La normativa permite un consejo sin el titular de la FBF
Hoy se cumplen 227 días de párate del fútbol nacional y tal parece que, en el mejor de los casos, pasarán otros 24 días para que el campeonato se reanude, si los 14 clubes no logran reunirse en un Consejo de la División Profesional, que según la normativa puede ser presidida por un directivo del comité ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
Más allá de que las restricciones que se tienen en Bolivia por la pandemia aún son limitantes para algunas actividades deportivas, el mayor problema que atraviesa el balompié profesional para no reiniciar el campeonato es la disputa entre Marcos Rodríguez y Robert Blanco, por la silla presidencial de la FBF, por la división que generó entre los clubes.
Los del G-8 apoyan a Rodríguez y los del G-6, a Blanco, motivo por el que no obedecen las convocatorias del otro dirigente para el desarrollo del Consejo de la División Profesional, que es la única instancia que puede modificar la convocatoria y reglamento de los campeonatos.
Blanco se mostró predispuesto a no participar del consejo si con ello los 14 clubes pueden reunirse. “Que participe todo el comité ejecutivo, que no esté Marco Rodríguez ni tampoco yo, ahí necesitan al director de competiciones y la gente de la comisión técnica para que el fútbol boliviano de una vez se reinicie”, aseguró Blanco.
El inciso 8 del artículo 33 del Reglamento del Estatuto de la FBF señala: “Las reuniones del consejo serán presididas por el presidente de la FBF, en caso de ausencia de éste, asumirá el vicepresidente de la división profesional y, en ausencia de este último, uno de los directores del comité ejecutivo”. Mientras que el inciso 2 dice: “(El Consejo) se reunirá a convocatoria del comité ejecutivo o a solicitud del 50 por ciento de los clubes profesionales”.
Por lo tanto, si los 14 clubes se pusieran de acuerdo y el comité ejecutivo realizara la convocatoria al Consejo de la División Profesional, éste podría llevarse adelante antes del 14 de noviembre, fecha en la que se realizará el Congreso Ordinario electoral, y así reanudar el torneo lo antes posible.
Sin embargo, según denuncia Blanco, existen algunos clubes que estarían chantajeando para aceptar la reunión, bajo la condición de que él retire la demanda contra Rodríguez y el comité ejecutivo, que instaló en Santa Cruz por desobedecer el fallo constitucional que le da la titularidad de la FBF.
Dardo Gómez, vicepresidente de Bolívar, uno de los clubes del G-6, mostró su predisposición de reunirse para ver el reinicio del torneo.
“Nosotros lo hemos dicho: queremos que comience el fútbol. La parte deportiva no puede mezclarse con la parte institucional y política, ni la parte legal. Por lo tanto, el fútbol debe comenzar”, dijo Gómez a tiempo de indicar que están a la espera de una nota oficial.
No habrá congreso
“No va haber congreso”, dijo Mary Carrasco, abogada de Blanco, a tiempo de indicar que son “varias razones” que impedirían el desarrollo del Congreso Ordinario convocado para el 14 de noviembre, donde se elegirá al nuevo presidente de la FBF. Una de esas razones es porque este congreso no fue convocado por Blanco.
El congreso está confirmado
El presidente del comité electoral de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Limbert Cardozo, confirmó la realización del congreso ordinario para el próximo 14 de noviembre en Tarija. “Si no ocurre algo ilegal, está confirmado”, sostuvo.
“En realidad, todo puede ser de manera ilegal. Nosotros sólo nos apoyamos en el estatuto y código electoral, que a la fecha hemos cumplido a la cabalidad”, dijo.
Entre tanto, la Fiscalía de Santa Cruz volvió a convocar a Marco Rodríguez, Jaime Cornejo, Antonio Decormis, Rolando Aramayo y Lily Rocabado (miembros del Comité Ejecutivo de la FBF) para que se presenten en las oficinas de la División Delitos contra las Personas de la Felcc (Santa Cruz) para brindar declaraciones sobre el caso de la demanda de Blanco.