Crónica de un desastre inesperado: Palmaflor pasa del cielo al infierno en cinco años y malas decisiones dirigenciales
De aquel 18 de noviembre de 2018 al 25 de noviembre de 2023, Palmaflor vivió el sueño que pocos clubes logran en su vida institicional: gozó de un meteórico ascenso de dos categorías y llegó a ser internacional en Copa Sudamericana, pero también llegó a caer en el abismo más profundo y su futuro se hace cada vez más oscuro por las malas decisiones dirigenciales asumidas en el último tiempo.
Los Tiempos, diario líder de la comunicación en Cochababamba, fue testigo de todo ese crecimiento del club quillacolleño desde la tercera división del balompié boliviano hasta la actual temporada que pone fin a un proyecto que prometió, pero que terminó mal encaminado.
Nacido en 2005 como Municipal Vinto, los residentes de Palmaflor en Quillacollo decidieron apostar por su proyecto profesional en 2018 y lo hicieron campeón del Torneo "Daniel Zambrana" de la División Primera "B" de la Asociación de Fútbol Cochabamba (AFC), con un saldo de 68 puntos en 26 jornadas (22 victorias, dos empates y dos derrotas).
La temporada 2019 marcó el mismo objetivo de Municipal Vinto, ya en trámites de adición del nombre Palmaflor. El sueño era ser profesional en 2020, aunque muchos creyeron que la dirigencia quillacolleña soñaba sobre algo "imposible". Clasificó a la Copa Simón Bolívar como segundo detrás de Arauco Prado, vigente campeón de la máxima categoría valluna de entonces y serio candidato al ascenso.
En silencio, ganando desde la primera fecha y bajo la conducción del entrenador Humberto Viviani, Palmaflor avanzó con un récord de 10 triunfos sobre 10 partidos, totalizando 30 puntos (100% de efectividad). Aún así, las Fieras de Palmaflor pasaron casi inadvertidas a la siguiente etapa.
Una derrota ante Real Santa Cruz 3-1 en la capital oriental, hasta su coronación como la única caída en el ascenso boliviano, no supuso una traba para que Palmaflor, aún bajo el nombre de Municipal Vinto, llegue hasta el partido decisivo ante el mismo cuadro albo, dejando antes en semifinales al alteño Deportivo Fatic.
Ganó las finales a Real Santa Cruz ida y vuelta, para celebrar el domingo 22 de diciembre el título de campeón de la Copa Simón Bolívar 2019 junto a su público en el estadio Municipal de Quillacollo. Las Fieras rompieron todo pronóstico y dieron a Cochabamba una tercera plaza en el profesionalismo.
Entre la apuesta de los escépticos había una corriente: Palmaflor no duraría más de un año en la División Profesional. Nunca antes estuvieron mal, ya que el cuadro quillacolleño, rebautizado como Mcepal Vinto Palmaflor en su personería jurídica, se clasificó a la Copa Sudamericana 2021 con un empate logrado ante San José en Oruro (1-1), el 31 de diciembre de 2020 y de la mano del DT Xabier Azkargorta.
En su primera participación internacional quedó en primera fase al caer ida y vuelta con Wilstermann. Aún así, Palmaflor no se rindió y siguió siendo animador del torneo boliviano.
En 2022 cumplió su mejor campaña: fue semifinalista del Torneo Apertura y solo se despidió de la lucha del título al caer ante The Strongest 2-1, tanto en la ida como en la vuelta. Pero el segundo semestre y con el Torneo Clausura dado por concluido a seis fechas del final supuso un premio a su campaña del año: volvió a la Copa Sudamericana para la edición 2023.
Y en ese tiempo se dio el inicio del fin: el traspaso al trópico generó una mala administración de la nueva directiva que terminó por echar por la borda todo lo que hizo la dirigencia quillacolleña desde que se hizo cargo del proyecto en 2018. En Villa Tunari no gozó del respaldo de la gente, el dinero no llegó a cubrir la planilla y el pasado sábado 25 de noviembre de 2023 dio su último suspiro en Primera con una derrota 1-7 ante Bolívar en el estadio Bicentenario.
En este traspaso del valle bajo al trópico, Palmaflor cambió sus colores amarillo, verde y rojo por el azul, negro y blanco. Por decisión de su nueva administración dejó de apodarse las Fieras. La denominada Escuadra Azul no generó la misma expectativa entre la afición y hubo salidas de muchos jugadores que fueron la base del buen arranque de la temporada 2023.
A falta de un último partido, el de despedida ante Real Tomayapo en Tarija, a jugarse el lunes 4 de diciembre por la fecha 34 (19:00), Palmaflor solo hará acto de presencia y cumplirá con el calendario. A los futbolistas se les deben varios salarios del año, además de otras deudas pasadas que no fueron cubiertas.
Tampoco está claro el destino del club: si se inscribirá en la División Primera "A" de la AFC en 2024 y si la actual administración seguirá a la cabeza. Lo que un día fue un gran proyecto, hoy parece tener una fecha de caducidad.