Luis Cristaldo: “Ya era hora de conseguir un título” con el Hiska Nacional, el equipo de los lustrabotas

Luis Cristaldo encontró en el club Obrero su casa y en Hiska Nacional la motivación para hacer lo que más le gusta, dirigir a un club en la Primera A. El sábado 22 logró el ansiado título con Hiska Nacional tras vencer a Deportivo Fatic por 3-2, en la penúltima fecha del torneo de la “A”.

Con el equipo de los “lustrabotas”, como es conocido el club, logró su primer título como entrenador. Eso es algo que no podrá olvidar Cristaldo, mundialista en EE. UU. 1994, varias veces campeón con Bolívar, The Strongest, Oriente Petrolero, entre otros del país, y “legionario” con Mandiyu de Corrientes, Sporting de Gijón, Sol de América y Cerro Porteño de Paraguay.

Hoy, Hiska Nacional es su motivación, llega al Club Obrero, antes que nada, reza ante la imagen de la Virgen de Copacabana y saluda a los amigos en las prácticas.

“Aquí estoy desde 2022, primero estuve con el Tigre, luego con Hiska, todos estos tres años la pasé muy bien, ya había salido subcampeón en 2023 con Hiska, con el Tigre había salido dos veces subcampeón con sus juveniles, ya era hora sacar un título” (sonrisas)…

¿Qué se siente con este primer logro como técnico?

Gracias a Dios lo logré con un club tan antiguo como Hiska Nacional, tiene 107 años, y sobre todo salir campeón con diez jugadores paceños en cancha, hace que me sienta más orgulloso todavía, porque decían que aquí no hay futbolistas, resulta que hay y muy buenos, tengo los dos goleadores que son de La Paz (Sergio Aliaga y Luis Oblitas), nada que envidiar, tuvieron que enfrentar a jugadores de experiencia en otros equipos y lo hicieron bien y el equipo tiene un promedio de 24 años.

¿Qué partido fue más duro?

Nosotros empezamos el torneo con dos derrotas seguidas en las dos primeras fechas, enfrentamos a dos equipos que estaban en la Simón Bolívar y con ritmo, nosotros estuvimos parados un mes, trabajé lo más que pude porque una semana antes que comience el torneo volvió el equipo y si un equipo no tiene ritmo la puede pasar mal, es lo que puede pasar con la Selección Nacional para el repechaje, si no hay torneo. Luego comenzamos a ganar, logramos ganar quince partidos al hilo, agarramos la punta luego de comenzar coleros, pudimos salir campeón tres fechas antes, pero salimos una antes.

¿Qué características tiene el equipo?

Es bien humilde, todos estos chicos, de los once que van a la cancha, seis van a la universidad, cinco son de la zona sur, y no cobran sueldo, no tienen remuneración económica, por ahí les pueden reconocer algo, pero nada que ver, pero la unidad caracteriza a este grupo, es la base de un buen equipo; hay que tratar de llevarnos de la mejor manera porque un jugador desmotivado es lo peor que puede haber, así tenga millones en el banco. Acá, pese a la carencia, necesidad, los muchachos armaron un buen grupo, que merecidamente salió campeón.

¿Quiénes componen su cuerpo técnico?

 Trabajé yo sólo, no tenía un preparador físico, yo realizaba los trabajos de lo que había hecho en mi etapa de jugador en la parte física, esos trabajos simples, sin mucha alharaca como se dice, nos dieron la base para correr también los partidos, aguantar y estar físicamente bien. No tenemos kinesiólogo, ni utilero, solo don Ángel (Mamani) que es el secretario, se hacía cargo del material deportivo y pare de contar. Nos arreglamos como pudimos y lo logramos.

Hay más carencias que cualquier otra cosa… Este es un club semiprofesional, amateur, tienes que saber manejarlos, no puedes exigir como un equipo profesional porque es la realidad, todo gira sobre la base del buen grupo que se armó, todos son importantes para mí, muchos jugadores se iban a jugar los fines de semana a las villas, entonces el trato tenía que ser igual para todos, porque el momento en que yo trabajaba con los titulares y de repente me faltaban, lo que era entendible.

¿Adoptó el sistema de juego de Xabier Azkargorta?

Sí, es la mejor, es el sistema que más alegría le dio al fútbol boliviano, en los años noventa lo jugó Bolívar, el Tigre, jugamos nosotros con la Selección y fue lo mejor. Bolívar llegó a una final de la Sudamericana jugando así, Azkargorta llegó a la semifinal jugando así, y ¿por qué yo voy a cambiar? Si los europeos, brasileños juegan de otra manera y yo voy a tratar de jugar así, pero no estamos a la altura de otros países, primero porque no hay formación de los jugadores, la parte logística e institucional es mucho más grande en otros lados.  Cuando llegó Azkargorta, él hizo jugar de acuerdo a lo que era el jugador boliviano y sus características, lo primero que vio fue que no había la misma formación, ninguno estaba formado. Pero hay que saber manejar y elegir a los jugadores, porque si eliges mal la vas a pasar mal también.

¿Cómo es este sistema?

Es una línea de cinco, o de tres como le llaman, se juega mucho ese sistema, se lo tilda de un sistema muy defensivo, para mí no lo es si lo sabes trabajar, tuvimos al goleador de las eliminatorias, Ramallo quien estuvo por encima de Romario, Bebeto, muy defensivo no es.

¿Le golpeó la muerte de Azkargorta?

Seguro, desde que llegó, todos aprendimos de él muchas cosas buenas, y lo recordamos hasta el día de hoy, lo llevaremos toda la vida, sirvió para hacer las cosas como corresponde, para mí es un homenaje como él me enseñó a jugar y lo juego así porque es la situación de nuestro fútbol, lo juego hace tres años y con equipos sin condiciones de entrenamiento ni de materiales deportivos, logré el objetivo con un juego de la misma manera, y, como él dijo, pase lo que pase hay que seguir igual y sigo igual hasta ahora, además, la verdad que me ha ido bien, en tres años sacar tres subcampeonatos y un campeonato no está nada mal.