A un año de los Juegos, disciplinas deportivas nuevas se estancaron
A un año del estreno de los undécimos Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, las disciplinas que emergieron para formar parte de la competición internacional quedaron estancadas, principalmente porque sus exiguos deportistas no tienen en dónde ejercitarse.
Bádminton, hockey sobre césped, patinaje, balonmano, primordialmente, son los juegos que germinaron hace más de un año, pero después de los Juegos perdieron protagonismo por falta de escenarios y apoyo financiero por parte de las autoridades de Gobierno.
A ellos se suma el tiro con arco, deporte que nació en Bolivia en 2014 y que esperaba consolidarse después de la justa internacional; sin embargo, sin recintos adecuados y sin respaldo financiero poco pudieron hacer, pese a que un trío de atletas consiguió el boleto a los Juegos Panamericanos Lima 2019, gracias a su esfuerzo y al de sus familias, porque “no recibimos apoyo del Comité Olímpico Boliviano (COB), menos del Gobierno”, sostuvo el entrenador cubano-boliviano Ariel Rodríguez Noda, quien dirigió al cuadro nacional masculino en los Juegos que se desarrollaron en el valle cochabambino.
“Lastimosamente no tenemos una herencia de los Juegos”, sostuvo con acento de desilusión Jorge Pardo, expresidente de la Federación Boliviana de Bádminton, quien explicó que después de la justa internacional el número de deportistas que se ejercitaban en esta disciplina mermó considerablemente, como consecuencia de la falta de un escenario donde entrenar. “Antes de los Juegos teníamos a unos 40 atletas entrenándose, pero ahora sólo tenemos a cinco”, sostuvo.
Cabe señalar que el coliseo Evo Morales fue adecuado para llevar adelante el certamen de bádminton en los Juegos Suramericanos, y los implementos que se adquirieron para esa ocasión están guardados en instalaciones del Centro de Entrenamiento de Formación Deportiva (Cefed), en la zona de La Tamborada.
El también entrenador de esta disciplina deportiva relató que antes de la competición internacional peregrinaron en busca de recintos deportivos para entrenarse, panorama que no cambió después de la cita competitiva, porque continúan emigrando de un lugar a otro con tal de continuar practicando este deporte.
“Nos pidieron entrenar en el Cefed, pero nos quieren cobrar 25 bolivianos la hora, en cambio en donde practicamos ahora (colegio María Auxiliadora) nos cobran menos”, advirtió Pardo, quien dijo que el 30 por ciento para solventar ese gasto corre por cuenta de los atletas, el resto sale de su bolsillo.
Algo similar acontece con el patinaje, que pese a tener un escenario nuevo éste permanece cerrado desde el epílogo de los Juegos Suramericanos, situación que perjudicó a sus adeptos, porque se ejercitan en calles y plazuelas de la ciudad, dijo Enrique Rosales, titular de la federación de este deporte. Prueba de la aseveración del dirigente, es que el torneo nacional se desarrolló en la plazuela Osorio, en septiembre del año pasado.
Otros deportes, como esgrima, tampoco tiene dónde entrenar porque los desalojaron del estadio Capriles, antes de los Juegos.
1 año transcurrió del estreno de la undécima edición de los Juegos Suramericanos que se celebraron en Cochabamba.
OPINIONES
"Después de los Juegos, yo diría que hemos retrocedido por falta de escenario". “La gente se cansa y se va a otras disciplinas. Estoy a punto de retirarme porque no me alcanza el dinero". Jorge Pardo. Entrenador bádminton.
"Lo positivo es que nos dieron un patinódromo; sin embargo, no lo podemos utilizar". “Los deportistas entrenan en calles y plazuelas de la ciudad. La Alcaldía prometió abrir en una semana el escenario, ojalá sea así”. Enrique Rosales. Presidente de patinaje.
"Quedamos en el olvido después de los Juegos Suramericanos". “Hay proyectos que no se cumplieron. No existen escenarios en el país donde puedan entrenar nuestros deportistas". Ariel Rodríguez. Entrenador de tiro con arco.