El piloto cochabambino Cristian Solís se impone en el Rally de la Concordia
René Calderón Úzqueda
La primera fecha del torneo nacional de automovilismo culminó ayer con Cristian Solís como el mejor de 65 pilotos. Los duros caminos de la localidad de Tarata albergaron lo que fue el retorno del deporte tuerca en el país.
Solís terminó la carrera en el primer lugar de la clasificación final con un tiempo acumulado de 1:24:42’5, seguido en el podio por el chuquisaqueño Rolando Careaga con 1:24:52’1 y por el paceño Ali Ernesto Abo que marcó 1:25:21’2.
Luego de la victoria conseguida, Solís se mostró satisfecho de comenzar con el pie derecho la defensa del título conseguido en 2019.
“Logramos hacer respetar la localía en un rally muy bonito, con una mezcla de exigencias. Había lugares que te exigían velocidad y otros, mucha técnica”, remarcó el cochabambino.
“Este triunfo fue, primero, gracias a Dios, a mi equipo de mecánicos y a mi familia, que me apoyó todo el tiempo”, concluyó Cristian, aún emocionado por haber logrado su cometido.
Por su parte, el potosino Sebastián Careaga, de la categoría RC2N, que había abandonado la carrera el día sábado en la primera etapa por desperfectos mecánicos, fue el mejor de la segunda etapa con un crono de 31:33’8, quedando por encima de Luis Sandoval (32:24’3) y Rolando Careaga (32:24’4).
Sebastián Careaga culminó séptimo en su grupo sin poder aspirar a las primeras ubicaciones de la tabla general a raíz de los problemas técnicos que lo obligaron a claudicar en la primera etapa.
En el grupo R2B, el representante de la Villa Imperial, Jhonny Tarqui, se alzó con la victoria marcando un tiempo total de 1:32:39’0. Mientras tanto, el cochabambino Nelson Ponce triunfó en la R1B (1:34:41’0) y Mirael Gutiérrez (1:52:01’1) en Turismo Departamental
Un total de 35 pilotos lograron llegar a la meta en una competición que tuvo un recorrido de casi 120 km desplegados en 10 pruebas especiales.
Sol intenso seguidode chubascos
Como es costumbre en Cochabamba, el clima cambió rotundamente en el transcurso de la competencia. Primero, sol radiante y abrazador, sin una sola nube, y horas más tarde, lluvia intensa pero poco duradera.
Cientos de personas se trasladaron hasta el valle alto para presenciar el cierre del rally. Muchos aprovecharon la jornada dominical para viajar en familia e instalar sombrillas y preparar carnes a la parrilla en cercanías de las rutas.