Dopaje, el terror de los tenistas
Geraldine Corrales Arandia
La exnúmero uno del tenis mundial, Maria Sharapova, se convirtió desde la semana pasada en el más reciente caso de dopaje en el mundo de ese deporte, tras dar positivo en el control antidopaje durante el Abierto de Australia que se desarrolló el pasado mes de enero.
Meldonium es el medicamento que Sharapova consumió por más de 10 años, el mismo que ingresó a la lista de sustancias prohibidas de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) desde el 1 de enero de 2016.
Según un estudio publicado por el laboratorio antidopaje de Colonia, “el uso del medicamento demuestra un incremento en la resistencia de los deportistas, ayuda en la recuperación tras el ejercicio, protege contra el estrés y mejora la activación del sistema nervioso central”.
Sharapova aseguró que sus médicos le prescribieron el medicamento en 2006 debido a problemas de salud que aquejaba.
Con todo el revuelo causado por sus declaraciones, la tenista rusa ha perdido contratos millonarios con sus auspiciante: Nike, TAG Heuer (relojes) y Porsche, quienes decidieron concluir su relación con la deportista.
Sin embargo, la desvinculación que trajo más repercusión fue la anunciada por la Organización de Naciones Unidas (ONU). Sharapova formaba parte de la institución como embajadora de buena voluntad en el marco del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), un portavoz del ente señaló que las actividades planificadas con ella quedan suspendidas “mientras continúa la investigación”.
En el caso específico del consumo de meldonium, al menos 16 deportistas registraron positivo en las pruebas de control antidopaje, varios de ellos son de origen ruso.
Fuente: Mundo Deportivo