Pintura y fotografía: Artistas bolivianas y la creación desde el confinamiento
Hay muchos artistas bolivianos que residen fuera del país, pero mantienen un nexo dinámico con Bolivia, con exposiciones constantes, por ejemplo. Es el caso de María la Placa, quien actualmente reside en Barcelona, además de Alejandra Alarcón y la fotógrafa Paola Lambertin, ambas viven en México, aunque Alarcón lleva allá alrededor de 18 años, mientras que Lambertín, unos meses. Las tres respondieron algunas preguntas para Lecturas & Arte y explicaron cómo es que siguen trabajando y creando en este confinamiento que es prácticamente a nivel mundial.
María la Placa
Artista plástica
Vive en Barcelona desde hace 15 años. La cuarentena allá se ha extendido 25 días hasta la fecha.
María es artista plástica y tiene su estudio en casa, así que su rutina habitual no ha sufrido un cambio drástico como lo ha sido para otras personas durante lo que va de confinamiento, comenta.
“Lo que sí ha cambiado para mí de forma drástica durante esta crisis de la pandemia es que me siento ansiosa, triste y preocupada por lo dramática que es la situación y por lo que aún faltará por venir. Sin embargo, también el vivir algo tan extraordinario es un estímulo para mi creatividad e ingenio”, dice y añade que le preocupa el bienestar general e intenta poner su talento al servicio de la comunidad dando ideas, compartiendo conocimientos y siendo solidaria.
“Creo que la creatividad no se atrofia en estos casos; al contrario, la creatividad se agudiza, se hace indispensable y urge utilizarla más que nunca para ser parte de la solución y no aumentar el problema con quejas y autocompasión”.
La Placa asegura que está aprovechando este tiempo para crear y compartir de manera gratuita dibujos que se pueden descargar e imprimir para colorear desde la página web de mi marca Ballet Papier, www.balletpapier.com.
“Así muchos niños y ¿por qué no? adultos también tendrán algo más para entretenerse y hacerles más llevadero el encierro. Siempre pensando en los más pequeños, estoy preparando unos tutoriales gratuitos para aprender a dibujar.
Aparte de esto que es lo inmediato, mirando hacia más adelante y, como es más que seguro que las cosas cambiarán mucho en los próximos meses, aprovecho este momento para replantear mis objetivos y estrategias y poder subsistir. Aún existe mucha incertidumbre y lo único cierto es que habrá que adaptarse a lo que venga”, finaliza la artista.
Paola Lambertin
Fotógrafa
Es fotógrafa y directora de arte, actualmente trabaja como fotógrafa de moda y publicidad, pero su obra se enmarca en la fotografía artística. Lambertin vive en Ciudad de México desde fines de agosto del año pasado, antes residía en Santa Cruz. Explica que en esa gran ciudad no están en cuarentena obligatoria, sino en una contingencia sanitaria pasando la fase 2.
“Entraremos a la fase 3 el 19 de abril. Lo que sí ha sucedido es que desde hace tres semanas las empresas han decretado home office para sus trabajadores y la gente desde ese entonces está practicando una cuarentena voluntaria”, explica y cuenta que su trabajo actual está en pausa, ya que la agencia en la que está prestando servicios ha suspendido sus actividades hasta que pase todo.
“Entonces este tiempo para mí es una oportunidad de dedicarle tiempo a otros proyectos que tenía en pausa, leer, aprender nuevas técnicas y experimentar. Creo que, a pesar de todo, tenemos que ver esta crisis planetaria como una oportunidad en muchos sentidos. En vez de concentrarnos en la incertidumbre, el miedo o cualquier sentimiento parecido, debemos ver esto como una oportunidad de crear, experimentar o simplemente frenarlo todo para cuestionarlo y darle otro giro o visión”, comenta Lambertin.
Asegura que este tipo de reflexión es importante y que para nutrir la creatividad se necesita soltura y experimentación para seguir nuevos caminos y llegar al destino al que se quiera llegar. Propone consumir contenidos que desafíen nuestro cerebro e incentiven nuestra pasión y sobre todo hacer y hacer.
Alejandra Alarcón
Artista plástica
Alarcón vive en la ciudad de México, en Coyoacán, desde hace 18 años.
En esa ciudad la cuarentena comenzó hace alrededor 15 días. Asegura que ha estado trabajando casi normalmente. “De alguna manera, podría decir que mi vida ha estado en una constante cuarentena, siempre he vivido en esta especie de tiempo fuera del tiempo, y adentro. Y mis trabajos siempre los he realizado desde mi casa, incluso dar clases”, comenta y admite que definitivamente algo ha cambiado en su proceso creativo.
“Hay una distancia interna desde la cual tienes otra perspectiva que te hace pensar la vida en relación a la muerte, al fin, a las ‘distancias adecuadas’, a lo humano, a la naturaleza, al equilibrio, al fin como un comienzo, al apocalipsis como un estado del ser. Desde esta nueva perspectiva empecé una serie chiquitita de acuarelas sobre esto, que he ido compartiendo en las redes (El libro de los finales o coleccionar finales)”, cuenta Alarcón y su consejo para que la creatividad no se “atrofie” en el confinamiento es que éste se vea como una oportunidad.
“Generalmente, no tenemos el tiempo para poder dedicarlo enteramente a lo creativo, y ahora sí. Me ha servido mucho no sólo pintar, sino también escribir, ver, leer. Hablar con otros artistas sobre lo que están sintiendo en el cuerpo, en sus espacios, ponerle nombre, ponerle palabras e imágenes”.
La artista propone marcarse una actividad diaria y tratar de cumplirla.
“Me propuse hacer un dibujo-acuarela diario, de esta nueva serie que cuento, entonces eso ordena el tiempo, porque así hay un resultado alcanzable”, asegura.
Además, cuenta que su pareja Alfredo Salomón y ella tienen un niño de cinco años, con el que han estado haciendo muchas actividades creativas, desde dibujos hasta animaciones.