"El Chaski sigue corriendo": reaparece en formato digital la añorada revista para niños
“Yo he crecido leyendo El Chaski, una revista que ha marcado mi infancia positivamente”. Con esta frase, Cecilia Vlahovic confirma su admiración y cariño por esta gaceta a la que ha decidido rendir homenaje con un proyecto de recuperación. Hoy, la revista patrimonial se ha restaurado y digitalizado para seguir conmoviendo a una nueva generación de millones de niños, niñas y adolescentes. El proyecto fue bautizado como El Chaski sigue corriendo.
Entre los años 1983 y 2000, la revista El Chaski produjo 144 ediciones, con un tiraje de 10 mil ejemplares mensuales. Estas añoradas revistas, que Vlahovic “guardaba como tesoro”, actualmente están disponibles, de manera gratuita, en una galería PDF en la página www.elchaskisiguecorriendo.org y son el resultado de la recolección y restauración digital liderados por la productora ejecutiva y diseñadora gráfica, quien con el apoyo financiero de la Fundación Simón I. Patiño y Save The Children, pudo concretar el proyecto.
“A partir de un ejercicio académico, tuve que investigar sobre una revista de Bolivia y me di cuenta de que El Chaski se estaba perdiendo, o sea que estaba dejando de ser accesible para las personas en bibliotecas, en tiendas y en quioscos. Fui indagando cada vez más y realmente ni siquiera en las bibliotecas más grandes y especializadas la tenían”, cuenta Vlahovic sobre cómo surgió la idea de realizar la página web de El Chaski, argumentando además que las nuevas generaciones tienen más acceso a la tecnología.
El proyecto se inició en 2009, pero no fue hasta 2014 cuando Vlahovic consiguió las autorizaciones. “Había hecho una gestión legal, tenía un proyecto armado y entonces empecé la gestión de auspicios que ha sido larga y durísima. Ha sido difícil conseguir financiamiento”, recuerda.
Para Vlahovic, el siguiente paso es profundizar y armar un buscador temático de toda la colección. “(Ésta) sería la proyección para El Chaski sigue corriendo, porque las revistas tienen contenido diverso y a mí me encantaría que tenga todas estas secciones para que la gente pueda buscar los archivos según su interés”.
De esta manera, la revista vuelve a la memoria y se instala en el presente. Cientos de usuarios aplaudieron el proyecto y muchos aseguraron que se los mostrarán a sus hijos, hermanos y sobrinos, además de educadores que comentaron que utilizarán las revistas en clases.
Vlahovic comenta que, con suerte, ha habido personas que han aportado con este proyecto de varias formas, como pintar el icónico mural (entre las calles Junín y Ecuador) o buscar financiamiento. “Siempre ha tenido ese tipo de colaboraciones cariñosas”. En 2014, el proyecto obtuvo la colaboración de la Cruz Roja Suiza que permitió darle continuidad a la gestión de auspicios.
Sobre el contenido
El Chaski fue creado para educar y dar voz a los niños y niñas de una manera entretenida. Sus contenidos son pedagógicos e incluyen cuentos, experimentos, recetas, manualidades, juegos y cartas de niños y niñas que cuentan la forma en que ven el mundo.
En 1987, la revista fue declarada texto oficial en los ciclos básico e intermedio del sistema educativo boliviano, valorando sus contenidos sociales, pedagógicos, ecológicos, culturales e históricos que, debido a su atemporalidad temática y su restauración digital, concluyen siendo un material contemporáneo y libre para el uso de varias generaciones.
Fue fundada en el Centro Portales durante la gestión de Marco Rossi, en 1983. Sus creadores fueron Elisabeth Hüttermann, Jesús Pérez, Rosalba Guzmán y Manuel Vargas; junto a un equipo de escritores e ilustradores. Al inicio estuvo bajo la tutela del Centro Pedagógico y Cultural Simón I. Patiño y su Club de Experiencias Pedagógicas y posteriormente a cargo de la Editorial Infantil Boliviana Luciérnaga.
En 1987, por decreto ministerial Nro. 1644, El Chaski obtuvo el estatus de “Texto oficial” por el Ministerio de Educación y Cultura, lo cual incrementó su influencia en las aulas y escuelas de Bolivia, utilizando este material como apoyo en diversas áreas del conocimiento. En 1990 obtuvo la “Gran Orden Boliviana de la Educación en el Grado de Comendador” y en 1993 la revista obtuvo el Premio de la UNEP “United Nations Environment Program” de “The Global 500 Roll of Honour”, conferido por la ONU.
Las ediciones digitales que hoy forman parte del proyecto El Chaski sigue corriendo se pueden descargar de forma gratuita, pero sin fines comerciales.