Quintín Apaza Choque y la wiphala como símbolo originario
Hadiye Arriaza Callaú y María Fernanda Vargas
Laboratorio de Periodismo UCB
Quintín Apaza Choque es el cocreador de la wiphala y parte de la organización que fundó el movimiento katarista. Nació el 31 de octubre de 1936, en la provincia Samaca, Oruro. Realizó sus primeros estudios en la escuela Eduardo Sagarnaga de Curahuara y estudios universitarios en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), de la cual salió profesional con el título de licenciatura en Ciencias Jurídicas y Políticas.
Pero ¿quién es este personaje que hasta el día de hoy se muestra ante la gente? Se trata del representante y cabeza de la wiphala. Hasta la fecha, se desconocía la historia de cómo surgió la wiphala y hasta se lo identifica como símbolo del Movimiento Al Socialismo (MAS). Sin embargo, Apaza nos cuenta su trayectoria para crearla de comienzo a fin.
Todo empezó el año 1971 en la universidad, cuando un grupo de estudiantes campesinos originarios sufría de discriminación. Para tomar cartas en el asunto, este grupo fundó el movimiento Katarista en la localidad de Allo Allo, provincia Aroma de La Paz. Los fundadores, además de Apaza, fueron Reymundo
Tambo, Isidoro Arismendi, Constantino Lima y Genaro Flores.
Su primera actividad con el “katarismo” fue luchar por el ingreso libre a la universidad, debido a la mencionada discriminación a la cual se tenían que someter los campesinos originarios. Es por ello que, ese mismo año, constituyeron el Movimiento Revolucionario Tupaj Katari. Otra de las acciones que realizaron fue elegir un nuevo dirigente, el cual fue Genaro Flores. El katarismo trabajó en la dictadura de Bánzer hasta conseguir la democracia.
En ese entonces, los socialistas se escaparon yendo al exterior y el Tupaj Karismo tomó la Central Obrera Boliviana (COB) a través de Flores.
En 1985 se abrió la convocatoria para elecciones generales, cuando todo este grupo sacó dos diputados: Víctor Hugo Cárdenas y Walter Reynaga. Para esas elecciones presentaron su estatuto, programa de gobierno, bandera y símbolos.
Para esa presentación, Quintín Apaza fue el cocreador de la actual wiphala, símbolo nacional boliviano y símbolo del katarismo. Antes de lo sucedido, Germán Choquehuanca ya había formulado la wiphala, la cual tenía otra estructura. Sin embargo, Apaza trazó la que hoy vemos actualmente, aumentando el color blanco.
El color blanco nació debido a que en el tiempo del Collasuyo se usaba el mismo color. Entonces, lo que hizo Apaza fue presentar a la corte nacional en las elecciones el nuevo símbolo. Con el tiempo, a través de la Asamblea Constituyente, esto se convirtió en un símbolo nacional.
En el año 1986, el katarismo cambió su línea política; esto se debe a que, hasta en ese entonces, los mismos tenían una línea sindical, pero a partir de la mencionada fecha hasta 2005, trabajaron con la reconstitución de ayllus. Apaza trabajó 20 años como capacitador en los cinco departamentos de Bolivia.
En ese entonces, formaron la organización de los ayllus de Curahuara de Carangas. El año 2002 empezaron los movimientos para reconstruir los ayllus comenzando por las provincias de La Paz. El motivo y causa de esta organización fue buscar la autodeterminación de los pueblos, la defensa de los derechos de los indígenas y pueblos originarios, defensa de los recursos naturales y de los derechos humanos.
Hasta ese entonces, Apaza fue asesor de Jacha Carangas, de los 150 ayllus de Jacha Carangas. En 2005 su vida dio un vuelco. Fue un momento en el que tuvo que tomar decisiones y seguir adelante con la tranquilidad de saber todo lo que había logrado.
“He tenido que retirarme, descansar, ya no he podido participar. Esa ha sido mi lucha, mi situación. Siempre hemos estado trabajando por la democracia, con un gobierno propio, respeto a las autoridades originarias, respeto a los derechos humanos, defensa de los recursos naturales, defensa de las libertades y garantías constitucionales, justicia ordinaria, justicia comunitaria, la seguridad jurídica, la seguridad alimentaria y la seguridad ciudadana”, siendo los mismos principios que guiaron sus decisiones.
Hasta el día de hoy, Quintín recuerda cada 15 de noviembre el aniversario del movimiento katarista con cariño y orgullo. Para realizar el homenaje cada fecha, él mismo recuerda a la población que el katarismo tiene que seguir adelante recordando los principios que dicta este movimiento y estando orgulloso de que la wiphala, como símbolo del katarismo, se haya convertido en un símbolo nacional. Todo esto iniciado por los mismos pueblos indígenas originarios por los que luchó años importantes de su vida.