Galo Medina: “Quiero contar mil historias”
El cochabambino Galo Medina soñó, proyectó y hoy avanza en uno de sus primeros propósitos como productor de videos en redes sociales.
Su idea es comunicar de manera sencilla pero contundente, por eso, solo tiene 60 segundos para contar “La historia de hoy”.
Medina se propuso contar mil historias de artesanos y emprendedores de diferentes países y ciudades, con el único objetivo de “empoderar a los latinos”.
Su inicio
Galo Medina contó que no cree en las coincidencias y recordó el momento en el que su vida tomó el rumbo por el que ahora continúa.
“No creo en las coincidencias, yo estudiaba en el CBA luego de haber salido del colegio Adventista. Mis padres son profesores en la universidad y mi mamá es peruana y siempre tuvo ese deseo de que sus hijos sean competitivos, entonces me coloca en el CBA a mis 14 años, yo no quería porque a mí me encantaba el fútbol. Comienzo a estudiar inglés y en el CBA me llega una oportunidad, de parte de una fundación que se llama Ciudad Mundo que lo maneja Wendy Meruvia, entonces aplico para irme a Estados Unidos como consejero en campamentos de verano”, relató.
Durante su permanencia en Estados Unidos, vio que en las universidades había buena presencia de estudiantes europeos, asiáticos, pero no de bolivianos.
“Fue como un shock, me pregunté por qué hay todas estas personas en las mejores universidades y no hay bolivianos”, afirmó.
Cuando volvió al país, decidió dejar su carrera y conversó con sus padres acerca de la posibilidad de irse a estudiar a Estados Unidos.
Recordó que su trabajo comenzaba a las 5 de la mañana y concluía luego de la medianoche.
Cuando tuvo suficiente dinero ahorrado, pidió su visa, pero se la negaron y aunque reconoce que cayó en depresión, no se quedó con ese sentimiento y comenzó a trabajar nuevamente por su objetivo.
“Hago el mismo trabajo otra vez y ahí es cuando me conozco con Jimmy. Luego me voy a Cancún a un casting de fútbol, donde dan becas, vienen entrenadores de Estados Unidos y vienen jugadores de España, Brasil, Argentina y dan becas. Son como 100 jóvenes y vienen 50 coaches, te dan becas en distintos lugares de Estados Unidos. Pero la vida en Estados Unidos es muy cara, la beca no era lo que yo esperaba. En ese momento estando en Cancún, como tenía un tío en Monterrey, voy a visitar la universidad de Montemorelos, el Tec de Monterrey, la Universidad Panamericana y me convenzo por estudiar en la universidad de Montemorelos, convalido algunas materias de Bolivia y termino estudiando negocios internacionales en México”, recordó.
Medina concluyó su carrera en 2020 y se dio cuenta de que también lo apasionaba la comunicación, por lo que decidió ingresar al programa de comunicación de su universidad.
“Iba todos los sábados, aprendí sobre transmisiones en vivo, aprendí sobre cámaras, videos, pero ahí mi nivel era normal, era estándar. Entonces, fue cuando me di cuenta que tenía que dar un salto, ahí mi vida cambia porque conozco a Nas Daily, él tiene más de 60 millones de seguidores. Estudio en Harvard, trabajo para PayPal y ahora tiene más de 150 trabajadores en Dubai, Filipinas y Singapur. Entonces, a mí me encantaba las cosas que él hacía, y casualmente él tiene un amigo que se llama Franco Dubini, un italiano que estaba viajando por el mundo, estaba en Chile, Perú y yo ya lo estaba monitoreando cuando dice que va a venir a México, yo estaba en el último semestre de la universidad y le escribí un correo en el que le dije que me encanta lo que hace, que me gustaría aprender de él, viajar con él, simplemente quería estar con él a donde fuera”, relató.
Medina señaló que luego de una entrevista, se unió al italiano por seis meses en los que considera que tuvo un salto exponencial en su carrera.
“Me enseñó a sacar buenas fotografías, a sacar la cámara, a dirigir personas, liderazgo, ser profesional, en todo este tema de ser creador digital. Entonces, él vuelve a Italia, yo tampoco podía ir, él me invita a Italia, pero son estas clases de limitaciones que tenemos los bolivianos que a veces no nos permiten crecer. Me pedían visa”, afirmó.
Tras cumplir su labor con Dubini, decidió invertir en su equipo de trabajo. Con la experiencia vivida y luego de un largo tiempo fuera de su hogar, volvió a Bolivia para reunirse con su familia.
“El primer video que hice es en el que sorprendo a mi mamá después de cuatro años porque con esto de la pandemia ellos creían que yo seguía en México. El video es muy emocional y de ahí tengo la misión de crear contenido, al principio hacía contenido en inglés, lo hacía porque podía llegar a más personas, pero mi misión era ser un fenómeno mundial, no sólo ser conocido en habla hispana, porque así llegas a más personas. Comienzo a hacer los primeros videos en inglés y en el video 30 me doy cuenta que los videos estaban lindos en inglés, pero no conectaba, entonces cambio a hacer contenido en español”, añadió.
La misión
Luego de un corto periodo en Cochabamba volvió a México y empezó a contar las historias que encuentra. Allí también encontró su misión.
“Mi misión es comunicar, revalorizar y empoderar al artesano, al emprendedor, al artista en toda Latinoamérica, al principio no lo tenía claro, pero es algo que me encanta decir, como cuando tú empiezas como emprendedor, no sabes dónde va a ser tu fin, no sabes dónde vas a terminar, pero tienes certeza de que va a llegar a algún lado”, aseguró.
Galo emprende, en este momento, un recorrido por Bolivia y está contando historias sobre lugares icónicos, personas extraordinarias y experiencias únicas.
El cochabambino ya trazó su recorrido para los próximos meses y tiene previsto viajar por Perú, México, Guatemala, Ecuador. Luego retornará a Bolivia.
“Hoy en día tengo claro que quiero contar mil historias, una cada día y en dosis de un minuto, porque soy fiel creyente de que un buen comunicador lo hace fresco, sencillo, al punto, entonces si tienes una idea tienes que comunicarla bien, con un video de buena calidad de un lugar o una persona increíble. Es mi misión de vida, empoderar a los latinos, contando historias de gente extraordinaria y lugares increíbles”, concluyó.