Incomparables Los destinos favoritos de los bolivianos

Conocer una ciudad o pueblo es una experiencia que queda marcada, pero hay sitios que se pueden visitar una y otra vez por la belleza que albergan. Alrededor del año, Bolivia tiene varios feriados y muchas familias aprovechan esos días para conocer un nuevo lugar turístico o para regresar a uno de sus sitios favoritos. 

Bolivia alberga una incomparable diversidad de sitios turísticos que son visitados por miles de turistas nacionales y extranjeros. Los favoritos tienen características especiales que tienen el potencial de atraer en repetidas ocasiones. 

Chiquitaní

El circuito que alberga a las iglesias jesuíticas se funde con abundante naturaleza que atrapa a quienes desean pasar días de descanso en contacto con la flora y fauna. 

Situada en el departamento de Santa Cruz, los atractivos que ofrece la Chiquitanía son varios. 

Destacan los templos misionales que también cuentan con museos para conocer más sobre la historia de la construcción y el legado en la región.

Las pinturas, la iconografía y las imponentes estructuras sorprenden a los visitantes. 

El Valle de la Luna, en San José; el Parque Nacional Santa Cruz La Vieja; el sendero del Cerro Turubó; Chochís; el Parque de Tucabaca, y las termas naturales de Aguas Calientes están entre los atractivos más visitados. 

La gastronomía tradicional y la oferta de artesanías chiquitanas se suman a este viaje. 

La variedad de sitios turísticos en la región ha generado que emprendimientos medianos y grandes apuesten por hoteles, villas, cabañas y otros espacios agradables para hospedarse, lo que también suma a una experiencia inigualable. 

Copacabana 

El lago Titicaca y todo lo que está alrededor en Copacabana se muestra como otro destino favorito. La diversidad de actividades que se dan en las orillas del lago más alto del mundo atrae a los bolivianos en cualquier ocasión. 

Además del santuario de la Virgen de Copacabana, las islas flotantes donde se pueden degustar platos de pescado fresco, las islas del sol y de la luna, además de un tour a lo largo del lago son los principales atractivos. 

La oferta de hospedajes también llama mucho la atención en Copacabana, puesto que en la Isla del Sol se han instalado hoteles rústicos que ofrecen una experiencia totalmente diferente con vistas imponentes del lago. 

Un elemento adicional que atrae en ese sitio es el comercio, ya que se oferta una diversidad de productos que ingresan desde la frontera con Perú.

Uyuni 

Uno de los destinos más llamativos por excelencia es el salar de Uyuni. La imponente explanada de sal con sus variaciones de acuerdo a la temporada atrae miles de miradas y los turistas llegan en repetidas ocasiones porque anhelan conocer más de la región. 

En un circuito que inicia en el pueblo de Uyuni, la cantidad de días que se puede permanecer en la zona varía de acuerdo a lo que los visitantes deseen conocer. 

Volcanes, aguas termales, lagunas y la fauna de la región sorprenden a cada kilómetro que se recorre. 

Los turistas emplean varios días para hacer senderismo, trekking e incluso recorridos en bicicleta para albergar recuerdos únicos de su visita a la zona. 

La magnificencia del salar potosino se une con las construcciones hoteleras que han usado bloques de sal para establecer hospedajes acordes a lo que se ve alrededor. La opulencia y los espacios añadidos en cada hotel marcan una amplia diferencia, dejando que los visitantes tengan una experiencia única tanto en los recorridos por el salar como durante su estadía. 

Tarija 

“Si vino a Tarija y no tomó vino, entonces ¿a qué vino?” es una de las frases más usadas en Tarija y es que el atractivo principal de la región gira en torno a la producción vinícola de la región. 

Las empresas que se dedican al rubro han establecido espacios para dar a conocer detalles sobre la producción de vino y las distintas variedades, pero esto también se completa con una corta clase para la cata de vinos. 

La ruta del vino se muestra también como una oportunidad para que las comunidades que están cerca de las industrias vinícolas muestren su potencial. 

La naturaleza también acompaña, ya que el clima cálido acompaña a las visitas.

A esto se suman lugares tradicionales como San Lorenzo, la represa de San Jacinto, el mirador de los sueños que concentran la atención por las particularidades que se muestran.

La comida es un infaltable en Tarija ya que de la mano de los vinos se puede acompañar un platillo de carne a la parrilla. La peculiar forma de preparación de las carnes a la parrilla es adicional en la ciudad. 

Samaipata 

Una estructura imponente y una historia digna de admirar en repetidas ocasiones es lo que pone a Samaipata como uno de los mejores destinos a

visitar, pero no es lo único, ya que la ruta del Che también llama la atención. 

Como casi en toda Bolivia, la región ofrece una naturaleza digna de admirar, por lo que el pueblo de Samaipata también ha optado por contar con servicios de hospedaje acorde a los visitantes. 

En el pueblo se presentan varios espacios que principalmente son cabañas familiares que pueden ser rentadas para pasar un fin de semana en tranquilidad y contacto con la naturaleza. 

Quienes visiten por primera vez este sitio serán atraídos por el Fuerte de Samaipata, un espacio arqueológico precolombino y preincaico de origen chané, misma que es considerada como Patrimonio Cultural de la Humanidad. 

Por otra parte, quienes gusten de la historia del Che Guevara pueden acceder a recorrer la ruta del guerrillero. En el mismo se exploran los sitios donde el Che y los miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) estuvieron en 1967. 

Cochabamba 

El departamento de Cochabamba cuenta con espacios turísticos para visitar. Uno de los principales es el Cristo de la Concordia, pero puede resultar más atractivo llegar a esta ciudad para degustar de la tradicional comida valluna. 

El gusto cochabambino deleita a quienes pasan por el valle, más aún si se trata de hacer un recorrido por distintas provincias ya que la oferta gastronómica varía en cada lugar. 

El potencial turístico de Cochabamba atrae por los exquisitos platos empezando por el tradicional chicharrón, silpancho, sopa de maní, pique macho, falso conejo, ch’ajchu, entre otros, que se unen a espacios pensados de manera específica para que los visitantes tengan un recuerdo inolvidable de esta visita. 

La Angostura, Corani, Chapare y la cordillera del Tunari se ofrecen como nuevos destinos donde la comida no faltará. 

Tiwanaku 

La antigua ciudad arqueológica de Bolivia, capital del Estado tiahuanacota, está ubicada a 21 kilómetros al sureste del lago Titicaca. 

Tiwanaku fue el centro de la civilización tiwanakota, una cultura preincaica que basaba su economía en la agricultura, la ganadería y la arquitectura. 

En el departamento de La Paz quedan los espacios donde se estableció esta cultura y los vestigios que quedaron de la misma. 

Templos, monolitos y otras estructuras de piedra son la atracción del lugar. 

Así como Bolivia ofrece espacios que pueden ser visitados en reiteradas ocasiones también están los pueblos pequeños y más alejados que ofrecen inolvidables experiencias, sólo queda aventurarse un poco y salir a descubrir la tierra que nos alberga.