Guía de dolores de cabeza
Las cefaleas, conocidas también como dolores de cabeza, son uno de los trastornos más comunes del sistema nervioso que, sin embargo, pueden ser muy subestimadas y por ende, no atendidas eficazmente. El neurocirujano Rodolfo Quiroga señala que las cefaleas son la causa más frecuente de consulta en neurología. “Cobra importancia, porque este síntoma afecta en un 80 por ciento a la población en general”, agrega.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma en su portal oficial que, en todo el mundo, sólo una minoría de las personas que sufren cefaleas recibe un diagnóstico apropiado formulado por un profesional sanitario. “A escala mundial, las cefaleas han sido subestimadas, se conocen mal y no reciben el tratamiento adecuado”, informa.
La entidad menciona que, para tratar las cefaleas como es debido, se necesita que los profesionales sanitarios estén bien capacitados, que la detección y el diagnóstico del trastorno sean exactos, que se proporcione tratamiento con medicamentos eficaces y la prescripción de modificaciones sencillas del modo de vida y la educación del paciente.
En una breve guía, Quiroga explica a la revista OH! qué tipos de cefaleas existen, sus síntomas y demás aspectos importantes.
TIPOS DE CEFALEAS
Quiroga expone que las cefaleas pueden ser primarias o secundarias. Especifica que las cefaleas primarias son aquellas en las cuales el trastorno se establece por alteraciones en las propias estructuras cerebrales sensibles al dolor. La migraña, la cefalea tensional y la cefalea en racimos pertenecen a este grupo.
En cambio, indica que las cefaleas secundarias se refieren a aquellas en las que una enfermedad origina el desarrollo de mecanismos que provocaran irritación, inflamación o tracción de las estructuras que llevan el estímulo doloroso al cerebro. Ejemplos de éstas son la cefalea por sinusitis, cefalea por trastornos de la visión (glaucoma), cefalea postrauma craneal, cefalea por enfermedad vascular cerebral y cefalea por deshidratación, entre otras.
A continuación, el experto ahonda en los dos tipos de cefaleas más comunes.
Migraña
De acuerdo a la OMS, la cefalea también puede ser incapacitante. En el Estudio de la Carga Mundial de Morbilidad, actualizado en 2013, la migraña por sí sola representó la sexta causa mundial de los años perdidos por discapacidad. Colectivamente, las cefaleas fueron la tercera causa.
Quiroga explica que la migraña también es conocida como jaqueca. Describe que es una cefalea de carácter hereditario y es más frecuente en mujeres. Ésta empieza, por lo general, entre los 15 y 20 años, aunque puede presentarse desde la niñez y disminuir en la vejez (en las mujeres después de la menopausia, diferencia el especialista).
El experto señala los siguientes síntomas y manifestaciones:
- Es de características pulsátiles (expresadas por el paciente “como si latiera”).
- Los episodios dolorosos duran entre cuatro a 72 horas.
- Es hemicraneal. Es decir, afecta la mitad del cráneo.
- Habitualmente está acompañada de náuseas y vómitos.
- Es común que los pacientes refieran intolerancia a la luz y sonidos.
- Es recurrente: los episodios de dolor se repiten cada cierto tiempo.
El neurocirujano señala que existen dos tipos:
- Migraña con aura: “es aquella que se acompaña de síntomas que reflejan alteraciones en el cerebro. Estos síntomas son defectos en el campo de la visión como manchas e imágenes borrosas (como ver a través de un vidrio esmerilado)”, asegura.
Adiciona que es frecuente que el paciente perciba hormigueos en la cara, manos y pierna de un “hemicuerpo”. “En casos más graves, los pacientes indican dificultad en el habla o en articular palabras”, advierte.
- Migraña sin aura: Es llamada también migraña común y el experto asegura que no presenta los síntomas descritos anteriormente.
Quiroga manifiesta que ambos tipos de migraña pueden desencadenarse con factores alimentarios (alimentos ricos en titamina: quesos madurados, chocolates, vinos, condimentos y frutos secos). Añade que la aparición del dolor también puede estar relacionada con el cansancio físico, la falta o excesivo sueño, ingesta de alcohol y el periodo menstrual en las mujeres.
Cefalea tensional
La OMS menciona que la cefalea tensional episódica, que se produce menos de 15 días al mes, se observa en más del 70 por ciento de ciertos grupos de población. Quiroga resalta que es el tipo más común de cefalea y es predominante en mujeres jóvenes. “Tiene clara relación con el estrés, la ansiedad, el exceso de trabajo y las posturas mantenidas (en el trabajo de oficina)”, acota.
El especialista señala los siguientes síntomas y manifestaciones:
- El dolor es referido a nivel occipitocervical (parte posterior de la cabeza y la nuca).
- Los pacientes indican que sienten “presión”, “como cinta que oprime”.
- El dolor puede durar días, semanas e incluso meses.
- Muchos aquejan hormigueos o electricidad en el cráneo.
- El dolor empeora con el transcurso del día.
- Se asocia con insomnio, depresión y ansiedad.
¿CUÁNDO ALARMARSE POR UNA CEFALEA?
Quiroga detalla las siguientes señales de alerta:
- Comienzo después de los 50 años.
- El dolor no cede con analgésicos habituales.
- La cefalea cambia de características habituales.
- El dolor despierta al paciente.
- Cuando está acompañada de síntomas como: cambios en la personalidad, convulsiones y defectos de la visión, Quiroga advierte que estos síntomas pueden indicar la existencia de un tumor.
- “Cuando la instalación es muy aguda y demasiado intensa con vómitos explosivos, puede indicar la existencia de una hemorragia en el cerebro, aneurisma cerebral”, asegura.
- Cuando la cefalea intensa se asocia a fuerte fiebre y el estado general está comprometido, el especialista asevera que puede sospecharse de meningitis.
- “Cuando se asocia a pérdida de olfato y gusto, puede estar relacionada a comienzo de Covid-19”, alerta.
Quiroga responde que ante ello es importante la consulta urgente con un especialista en neurología. El médico indicará una serie de exámenes, entre ellos: una tomografía del cerebro o una resonancia magnética cerebral. Además de exámenes rutinarios de sangre. “No debe postergarse la consulta. Un retraso puede definir el pronóstico”, destaca.
RECOMENDACIONES GENERALES
El experto destaca que es importante que un médico establezca el tipo de cefalea que tiene el paciente y administre la medicación respectiva. “La automedicación puede ser contraproducente, más aún en el caso de la migraña. El uso de medicamentos que se denominan ergóticos y que son de venta libre pueden producir intoxicación manifestada por cefalea crónica”, advierte.
Añade que es importante tomar en cuenta si la cefalea muy aguda (el dolor no cede con analgésicos), ya que puede comprometer la conciencia, al ser una manifestación de la ruptura de un aneurisma cerebral. “Una dilatación sacular de una arteria cerebral que puede romperse y producir un sangrado que puede llegar a ser fatal sin atención especializada”, precisa.
En los casos de cefalea crónica (cefalea tensional), subraya que debe ser el especialista quien determine el tratamiento. “Es posible que sea necesaria la interconsulta con un psiquiatra, puesto que el dolor de cabeza puede ser una manifestación en el contexto de una depresión severa”, complementa.
Apunta también importante que, al padecer de migrañas, se tomen medidas higiénico-dietéticas adecuadas. Es decir, evitar alimentos (ya indicados) que provoquen cefalea y tomar líquidos (más de dos litros al día) para evitar deshidratación. Llevar un ritmo de sueño regular (ni mucho, ni poco) y evadir olores que la provoquen (cloro, pinturas, etc.).
Asegura que en la cefalea tensional es de ayuda realizar ejercicio moderado, yoga y pilates, entre otras actividades desestresantes. Otras medidas de utilidad y de gran ayuda que menciona son la acupuntura, especialmente en cuadros de cefalea por tensión.