Autoridades noruegas justifican matanza de oso polar
Las autoridades noruegas defendieron hoy las acciones de los guardias de un crucero alemán que mataron a un oso polar que atacó y lesionó a un miembro de la tripulación, diciendo que al principio trataron de ahuyentar al animal.
El portavoz policial Ole Jakob Malmo dijo que dos miembros de la tripulación de 12 hombres que descendieron a la isla septentrional del archipiélago de Svalbard, antes que los turistas el pasado sábado, primero trataron de protegerse del oso "gritando y haciendo ruidos fuertes, así como disparando una pistola de señal, pero sin ningún efecto".
La persona herida de 42 años, cuyo nombre no se ha dado a conocer, tiene lesiones menores en la cabeza debido al ataque, dijo Malmoa a tiempo de detallar que se encuentra fuera de peligro.
El operador del crucero Hapag Lloyd Cruises dijo, en su página en Facebook, que el propósito de descender en Svalbard no “era para la observación de osos polares, sino al contrario: los osos polares solo se observan desde los barcos, a una distancia segura”.
El archipiélago entre el territorio continental de Noruega y el Polo Norte es conocido por sus impactantes montañas cubiertas de nieve, fiordos y glaciales, y es un destino popular entre los cruceros.
En la página oficial en internet, el gobierno local dice que los osos pueden aparecer en cualquier parte en Svalbard y se le pide a las personas “mantenerse lo más lejos posible para evitar situaciones que puedan ser peligrosas para el individuo y para el oso”, si es que alguien encuentra a uno de los 20.000 a 25.000 osos que viven en el Ártico.
La localidad está salpicada de advertencias sobre los osos polares. Los visitantes que eligen dormir al aire libre reciben severas advertencias de las autoridades de que deben portar armas de fuego mientras anden fuera de los asentamientos.
El incidente desató la indignación internacional, y los activistas por los derechos de los animales dijeron que, para empezar, era un error dejar que los turistas del crucero MS Bremen invadieran un territorio conocido por ser un hábitat para las especies vulnerables.
En 2015, un oso polar sacó a un turista checo afuera de su tienda mientras él y otros acampaban al norte de Longyearbyen, el asentamiento principal de Svalbard, arañando su espalda antes de ser ahuyentado por disparos.
El animal asesinado el pasado sábado fue transportado a Longyearbyen para ser examinado rutinariamente, concluyó Malmo.
