Tras 15 meses de guerra, más de 46.700 cadáveres palestinos y una destrucción sin apenas precedentes, Israel y Hamás han alcanzado un acuerdo de alto el fuego en Gaza. Lo han anunciado dirigentes de dos de los países mediadores —Mohammed al Thani, primer ministro de Catar, y Joe Biden, presidente de Estados Unidos— cinco días antes del regreso a la Casa Blanca de Donald Trump, quien llevaba semanas dejando claro que no quería encontrarse ese conflicto abierto.