<p class="rtejustify"> Washington |</p> <p class="rtejustify"> <strong>Retrasar la segunda dosis de la vacuna de la Covid-19, al menos en el caso de los menores de 65 años, podría reducir la mortalidad hasta en un 20 por ciento, pero sólo en determinadas condiciones, según un estudio publicado en The BMJ.</strong><br> Estas condiciones se refieren a una eficacia de una dosis de la vacuna del 80 por ciento o superior y tasas de vacunación del 0,1 por ciento al 0,3 por ciento de la población por día; si se dan estas circunstancias, los investigadores, que usaron modelos de simulación, afirman que la estrategia podría evitar entre 47 y 26 fallecimientos por cada 100.000 personas, respectivamente.<br> <strong>Tanto la vacuna de Pfizer como la de Moderna en un esquema estándar de dos dosis son muy eficaces para prevenir las infecciones sintomáticas y la muerte, pero la inmunidad en todo el mundo sigue siendo baja, en parte debido a las bajas tasas de vacunación, recuerda un comunicado de la propia publicación.</strong><br> Cuanto más tiempo se tarde en vacunar a la población mundial, mayor será el riesgo de que se desarrollen variantes resistentes a la vacuna.<br> Esto ha llevado a pedir que se dé prioridad a la vacunación con una sola dosis para el mayor número de personas posible, incluso si ello significa retrasar una segunda dosis más allá del plazo estudiado.<br> Esta justificación se basa en la suposición de que se puede lograr una protección significativa después de una sola dosis de la vacuna, pero esto es objeto de un intenso debate.<br> <strong>Para profundizar en esta cuestión, un equipo de investigadores estadounidenses de centros como la Clínica Mayo, el Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad de Pensilvania comparó el impacto de esta medida con el régimen actual, con datos de infecciones, ingresos hospitalarios y muertes.</strong><br> Utilizando un modelo de simulación basado en una población de muestra del mundo real de 100.000 adultos, ejecutaron una serie de escenarios para predecir las interacciones potencialmente infecciosas en diferentes condiciones durante un período de seis meses.<br> Entre ellas se incluían distintos niveles de eficacia de la vacuna y tasas de administración, así como diversos supuestos sobre si esta previene la transmisión y los síntomas graves o solo los síntomas graves, incluida la muerte.<br> También examinaron el impacto de retrasar las segundas dosis para los menores de 65 años, pero no antes de vacunar completamente a los mayores.<br> Los resultados sugieren que, en determinadas condiciones, se puede conseguir una disminución de la mortalidad acumulada, las infecciones y los ingresos hospitalarios cuando se retrasa la segunda dosis de la vacuna.</p>

<p class="rtejustify"> Washington |</p> <p class="rtejustify"> <strong>Retrasar la segunda dosis de la vacuna de la Covid-19, al menos en el caso de los menores de 65 años, podría reducir la mortalidad hasta en un 20 por ciento, pero sólo en determinadas condiciones, según un estudio publicado en The BMJ.</strong><br /><br /> Estas condiciones se refieren a una eficacia de una dosis de la vacuna del 80 por ciento o superior y tasas de vacunación del 0,1 por ciento al 0,3 por ciento de la población por día; si se dan estas circunstancias, los investigadores, que usaron modelos de simulación, afirman que la estrategia podría evitar entre 47 y 26 fallecimientos por cada 100.000 personas, respectivamente.<br /><br /><strong>Tanto la vacuna de Pfizer como la de Moderna en un esquema estándar de dos dosis son muy eficaces para prevenir las infecciones sintomáticas y la muerte, pero la inmunidad en todo el mundo sigue siendo baja, en parte debido a las bajas tasas de vacunación, recuerda un comunicado de la propia publicación.</strong><br /><br /> Cuanto más tiempo se tarde en vacunar a la población mundial, mayor será el riesgo de que se desarrollen variantes resistentes a la vacuna.<br /><br /> Esto ha llevado a pedir que se dé prioridad a la vacunación con una sola dosis para el mayor número de personas posible, incluso si ello significa retrasar una segunda dosis más allá del plazo estudiado.<br /><br /> Esta justificación se basa en la suposición de que se puede lograr una protección significativa después de una sola dosis de la vacuna, pero esto es objeto de un intenso debate.<br /><br /><strong>Para profundizar en esta cuestión, un equipo de investigadores estadounidenses de centros como la Clínica Mayo, el Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad de Pensilvania comparó el impacto de esta medida con el régimen actual, con datos de infecciones, ingresos hospitalarios y muertes.</strong><br /><br /> Utilizando un modelo de simulación basado en una población de muestra del mundo real de 100.000 adultos, ejecutaron una serie de escenarios para predecir las interacciones potencialmente infecciosas en diferentes condiciones durante un período de seis meses.<br /><br /> Entre ellas se incluían distintos niveles de eficacia de la vacuna y tasas de administración, así como diversos supuestos sobre si esta previene la transmisión y los síntomas graves o solo los síntomas graves, incluida la muerte.<br /><br /> También examinaron el impacto de retrasar las segundas dosis para los menores de 65 años, pero no antes de vacunar completamente a los mayores.<br /><br /> Los resultados sugieren que, en determinadas condiciones, se puede conseguir una disminución de la mortalidad acumulada, las infecciones y los ingresos hospitalarios cuando se retrasa la segunda dosis de la vacuna.</p>

Cuanto más tiempo se tarde en vacunar a la población mundial, mayor será el riesgo de que se desarrollen variantes resistentes a la vacuna.

Cuanto más tiempo se tarde en vacunar a la población mundial, mayor será el riesgo de que se desarrollen variantes resistentes a la vacuna.

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<p class="rtejustify"> Nueva Delhi |</p> <p class="rtejustify"> <strong>La India no consigue doblegar la pandemia, con más de 4.000 muertes y 360.000 casos diarios, una "tragedia apocalíptica", según la oposición, enfrentada en una batalla política con el Gobierno indio por la falta de vacunas. </strong><br> La curva de contagios, que comenzó su carrera ascendente a principios de marzo con unos 15.000 casos diarios y se disparó hasta principios de mayo con más de 400.000 nuevas infecciones, se situó ayer en 362.727, un pequeño descenso desde aquel pico que aún no ha aliviado la situación en el país, con hospitales colapsados.<br> Las muertes también volvieron a superar este jueves la barrera de los 4.000 fallecidos, con 4.120 nuevos decesos que elevan el total hasta los 258.317 desde el inicio de la pandemia, algo que se ha visto reflejado en crematorios desbordados con la llegada continúa de cadáveres en ambulancias y las piras ardiendo sin descanso.<br> <strong>Batalla política</strong><br> Doce de los principales partidos de la oposición, entre los que se encuentran los jefes de gobierno de cuatro estados, definieron esta situación en una carta dirigida al primer ministro indio, Narendra Modi, como una "tragedia humana apocalíptica".<br> <strong>En la misiva, compartida a última hora de ayer por los partidos, los líderes políticos reclaman al Gobierno sobre todo la "adquisición de vacunas de todas las fuentes disponibles, tanto domésticas como globales", y que sean gratuitas para todos.</strong><br> Y es que aunque la campaña de vacunación lanzada en enero es vista como la única salida a esta crisis, el proceso no avanza, con solo 1,8 millones de dosis administradas durante la última jornada en este país de 1.350 millones de habitantes.<br> Hasta el momento, el país asiático inoculó un total de 177 millones de vacunas y casi 40 millones de personas recibieron las dos dosis, una cantidad que no logra cumplir con el objetivo inicial de tener a 300 millones de personas inmunizadas antes de julio.<br> El principal problema es la falta de vacunas, con estados como el meridional Karnataka, uno de los más afectados, que ha tenido que anunciar que desde mañana suspende temporalmente la vacunación al último grupo de beneficiarios en unirse a la campaña, los adultos de entre 18 y 44 años, al carecer de dosis suficientes.<br> <strong>El estado occidental de Maharashtra, el más castigado por la pandemia tras registrar un total de 816 muertes y 46.781 contagios en la última jornada, también denuncia falta de vacunas para esa franja de edad, como en su capital, Bombay.</strong><br> "Hasta nuevas órdenes, se suspende la vacunación para los jóvenes de 18 a 44 años. Lamentamos las molestias causadas a nuestros jóvenes", informó la corporación municipal de Bombay en Twitter.<br> Ante esta situación, Bombay anunció su interés global por la adquisición de 10 millones de vacunas contra el coronavirus, aunque como confirmó ayer su comisionado municipal adjunto, P Velrasu, no se aceptarán propuestas de "países que hacen frontera con la India", en una referencia encubierta a la vecina China.<br> <strong>Nuevas vacunas en la India</strong><br> Hasta el momento las fórmulas aprobadas para su uso en la India son Covishield de AstraZeneca, que fabrica el Instituto Serum de la India (SII), y Covaxin, del laboratorio indio Bharat Biotech; a lo que se suma la vacuna importada rusa Sputnik V.<br> Pero el Gobierno indio rechazó ayer en un comunicado que sus políticas hayan llevado a una escasez de dosis y subrayó que el Ejecutivo "trabaja de forma constante y proactiva para asegurar y mejorar la disponibilidad de vacunas".<br> <strong>Así, remarcó, gracias a su "nueva estrategia liberalizadora", se puede aprobar el uso de emergencia inmediato en la India de las vacunas que ya han sido aprobadas, entre otros, en países occidentales como Estados Unidos, el Reino Unido o la Unión Europea, así como por la Organización Mundial de la Salud.</strong><br> Además, se han liberalizado los precios y la adquisición del 50 por ciento de las vacunas producidas en la India, mientras la otra mitad la controla el Gobierno central, algo que según el Ejecutivo incentiva a las compañías, a las que pidió que se alíen con otras empresas para compartir conocimientos y ampliar los puntos de producción.<br> Esta política llevará, según revelaron ayer las autoridades indias, a que el país cuente con 2.000 millones de dosis más entre agosto y diciembre, gracias a la aportación de algunas vacunas aún no presentes en el mercado, como la de la farmacéutica india Zydus Cadila.<br> <!--[if !supportLineBreakNewLine]--><br> <!--[endif]--></p>

<p class="rtejustify"> Nueva Delhi |</p> <p class="rtejustify"> <strong>La India no consigue doblegar la pandemia, con más de 4.000 muertes y 360.000 casos diarios, una "tragedia apocalíptica", según la oposición, enfrentada en una batalla política con el Gobierno indio por la falta de vacunas. </strong><br /><br /> La curva de contagios, que comenzó su carrera ascendente a principios de marzo con unos 15.000 casos diarios y se disparó hasta principios de mayo con más de 400.000 nuevas infecciones, se situó ayer en 362.727, un pequeño descenso desde aquel pico que aún no ha aliviado la situación en el país, con hospitales colapsados.<br /><br /> Las muertes también volvieron a superar este jueves la barrera de los 4.000 fallecidos, con 4.120 nuevos decesos que elevan el total hasta los 258.317 desde el inicio de la pandemia, algo que se ha visto reflejado en crematorios desbordados con la llegada continúa de cadáveres en ambulancias y las piras ardiendo sin descanso.<br /><br /><strong>Batalla política</strong><br /><br /> Doce de los principales partidos de la oposición, entre los que se encuentran los jefes de gobierno de cuatro estados, definieron esta situación en una carta dirigida al primer ministro indio, Narendra Modi, como una "tragedia humana apocalíptica".<br /><br /><strong>En la misiva, compartida a última hora de ayer por los partidos, los líderes políticos reclaman al Gobierno sobre todo la "adquisición de vacunas de todas las fuentes disponibles, tanto domésticas como globales", y que sean gratuitas para todos.</strong><br /><br /> Y es que aunque la campaña de vacunación lanzada en enero es vista como la única salida a esta crisis, el proceso no avanza, con solo 1,8 millones de dosis administradas durante la última jornada en este país de 1.350 millones de habitantes.<br /><br /> Hasta el momento, el país asiático inoculó un total de 177 millones de vacunas y casi 40 millones de personas recibieron las dos dosis, una cantidad que no logra cumplir con el objetivo inicial de tener a 300 millones de personas inmunizadas antes de julio.<br /><br /> El principal problema es la falta de vacunas, con estados como el meridional Karnataka, uno de los más afectados, que ha tenido que anunciar que desde mañana suspende temporalmente la vacunación al último grupo de beneficiarios en unirse a la campaña, los adultos de entre 18 y 44 años, al carecer de dosis suficientes.<br /><br /><strong>El estado occidental de Maharashtra, el más castigado por la pandemia tras registrar un total de 816 muertes y 46.781 contagios en la última jornada, también denuncia falta de vacunas para esa franja de edad, como en su capital, Bombay.</strong><br /><br /> "Hasta nuevas órdenes, se suspende la vacunación para los jóvenes de 18 a 44 años. Lamentamos las molestias causadas a nuestros jóvenes", informó la corporación municipal de Bombay en Twitter.<br /><br /> Ante esta situación, Bombay anunció su interés global por la adquisición de 10 millones de vacunas contra el coronavirus, aunque como confirmó ayer su comisionado municipal adjunto, P Velrasu, no se aceptarán propuestas de "países que hacen frontera con la India", en una referencia encubierta a la vecina China.<br /><br /><strong>Nuevas vacunas en la India</strong><br /><br /> Hasta el momento las fórmulas aprobadas para su uso en la India son Covishield de AstraZeneca, que fabrica el Instituto Serum de la India (SII), y Covaxin, del laboratorio indio Bharat Biotech; a lo que se suma la vacuna importada rusa Sputnik V.<br /><br /> Pero el Gobierno indio rechazó ayer en un comunicado que sus políticas hayan llevado a una escasez de dosis y subrayó que el Ejecutivo "trabaja de forma constante y proactiva para asegurar y mejorar la disponibilidad de vacunas".<br /><br /><strong>Así, remarcó, gracias a su "nueva estrategia liberalizadora", se puede aprobar el uso de emergencia inmediato en la India de las vacunas que ya han sido aprobadas, entre otros, en países occidentales como Estados Unidos, el Reino Unido o la Unión Europea, así como por la Organización Mundial de la Salud.</strong><br /><br /> Además, se han liberalizado los precios y la adquisición del 50 por ciento de las vacunas producidas en la India, mientras la otra mitad la controla el Gobierno central, algo que según el Ejecutivo incentiva a las compañías, a las que pidió que se alíen con otras empresas para compartir conocimientos y ampliar los puntos de producción.<br /><br /> Esta política llevará, según revelaron ayer las autoridades indias, a que el país cuente con 2.000 millones de dosis más entre agosto y diciembre, gracias a la aportación de algunas vacunas aún no presentes en el mercado, como la de la farmacéutica india Zydus Cadila.<br /></p> <!--[if !supportLineBreakNewLine]--><p><br /></p> <!--[endif]-->

El gigante asiático vive una “tragedia apocalíptica” con más de 3.600 contagios y más de 4.000 muertes diarias.

El gigante asiático vive una “tragedia apocalíptica” con más de 3.600 contagios y más de 4.000 muertes diarias.

public://media_imagen/2021/5/13/ahmedabad_india_13_05_2021_indian_health_worker_attends_a_suspected_covid_19_positive_patient.jpg

<p class="rtejustify"> La Habana |</p> <p class="rtejustify"> <strong>Cuba ha empezado a inocular masivamente a su población contra la Covid-19 con vacunas de fabricación propia, que aún no han recibido el visto bueno de las autoridades reguladoras</strong> y sobre las que no existen datos sólidos de eficacia.</p> <p class="rtejustify"> La campaña se ha iniciado en La Habana, donde los mayores de 60 años están recibiendo dosis de Abdala, una vacuna que ha culminado los ensayos clínicos, pero aún no ha recibido la autorización necesaria para su uso de emergencia. Sin embargo, a los que ha acudido a los consultorios a recibir la primera de las tres dosis necesarias eso no parecía importarles.</p> <p class="rtejustify"> <strong>"Yo me siento divina, no me dio nada</strong><strong>. Yo soy hipertensa, cardiópata y soy asmática y hasta ahora me he sentido muy bien”, aseguró ayer Celia, de 69 años.</strong></p> <p class="rtejustify"> "Ansiosa estaba por este momento. Yo decía: ¿pero, cuándo van a vacunar?", afirmó otra mujer.</p> <p class="rtejustify"> <strong>Cuba pone todas sus esperanzas en dos de las cinco vacunas que está desarrollando, Abdala y Soberana 02, que aún no ha terminado la fase de evaluación. </strong></p> <p class="rtejustify"> En su cuenta de Twuitter, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, aseguró que en agosto el 70 por ciento de la población cubana estará inmunizada.</p>

<p class="rtejustify"> La Habana |</p> <p class="rtejustify"> <strong>Cuba ha empezado a inocular masivamente a su población contra la Covid-19 con vacunas de fabricación propia, que aún no han recibido el visto bueno de las autoridades reguladoras</strong> y sobre las que no existen datos sólidos de eficacia.</p> <p class="rtejustify"> La campaña se ha iniciado en La Habana, donde los mayores de 60 años están recibiendo dosis de Abdala, una vacuna que ha culminado los ensayos clínicos, pero aún no ha recibido la autorización necesaria para su uso de emergencia. Sin embargo, a los que ha acudido a los consultorios a recibir la primera de las tres dosis necesarias eso no parecía importarles.</p> <p class="rtejustify"> <strong>"Yo me siento divina, no me dio nada</strong><strong>. Yo soy hipertensa, cardiópata y soy asmática y hasta ahora me he sentido muy bien”, aseguró ayer Celia, de 69 años.</strong></p> <p class="rtejustify"> "Ansiosa estaba por este momento. Yo decía: ¿pero, cuándo van a vacunar?", afirmó otra mujer.</p> <p class="rtejustify"> <strong>Cuba pone todas sus esperanzas en dos de las cinco vacunas que está desarrollando, Abdala y Soberana 02, que aún no ha terminado la fase de evaluación. </strong></p> <p class="rtejustify"> En su cuenta de Twuitter, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, aseguró que en agosto el 70 por ciento de la población cubana estará inmunizada.</p>

Las vacunas anticovid de Cuba todavía no tienen la certificación mundial para su aplicación.

Las vacunas anticovid de Cuba todavía no tienen la certificación mundial para su aplicación.

<p> Ginebra |</p> <h3> <strong>Las dos dosis de la vacuna de Sinopharm necesarias para inmunizarse de Covid-19 deben administrarse con tres o cuatro semanas de intervalo, y después de inoculadas se tardan unos 15 días antes de lograr completa protección, destacaron ayer expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). </strong><br> La vacuna, primera no occidental aprobada para uso de emergencia por la OMS, "es comparable a otras en eficacia y seguridad", subrayó en un encuentro con internautas el mexicano Alejandro Cravioto, presidente del Grupo de Expertos para Asesoramiento Estratégico que emite recomendaciones sobre el uso de vacunas anticovid a la OMS<br> Preguntado por posibles efectos secundarios de esta vacuna, el experto señaló que, como otras desarrolladas por otras farmacéuticas contra la Covid-19, puede producir dolores en el brazo donde es inyectada, fiebre, así como un malestar que puede prolongarse unas horas o unos días.<br> "Es normal, pues es la manera en la que el cuerpo responde al antígeno", subrayó Cravioto, quien afirmó que por ahora no se han detectado efectos secundarios graves con esta vacuna en pacientes.<br> <strong>El asesor de la OMS subrayó en todo caso que los países que la utilicen deben tener sistemas de control que detecten de manera rápida efectos secundarios de importancia o de larga duración. </strong><br> Cravioto indicó además que la vacuna de Sinopharm se ha mostrado también eficaz ante variantes ya muy extendidas del coronavirus, como la "británica" o la "brasileña", aunque no hay datos todavía suficientes para medir su respuesta a las detectadas primero en Sudáfrica o India, también presentes en decenas de países.<br> Como en otras vacunas, la de Sinopharm muestra una duración de la inmunización que genera de al menos seis u ocho meses (no hay datos más allá de eso debido al reciente desarrollo de estos antígenos).<br> <strong>La vacuna ha mostrado ser eficaz hasta en un 79 por ciento para prevenir casos graves de Covid-19 </strong>y se basa en adenovirus (virus debilitados o inactivados), como la mayoría de vacunas que se han desarrollado hasta el momento, con excepción de las de Pfizer y Moderna, que usan la más avanzada tecnología del ARN mensajero.<br> <strong>La vacuna china está recomendada para mayores de 18 años</strong> y aunque no se realizaron demasiados ensayos clínicos en mayores de 60 años no hay razón para pensar que esta vacuna se comporte de forma diferente en ese grupo de edad, según señaló el propio Cravioto.<br> La inclusión de la vacuna -que puede conservarse en una nevera normal- en la lista de uso de emergencia de la OMS abre la puerta a que sea distribuida en países de todo el mundo, si la organización cuenta con dosis, a través del <strong>programa Covax</strong>, ideado para lograr mayor equidad en la administración global de vacunas anticovid.<br> Este programa tiene el objetivo de distribuir antes de fin de año 2.000 millones de dosis en todo el planeta, pero por ahora sólo ha entregado unos 60 millones, debido a imprevistos como la ola de Covid-19 en India, uno de los principales productores de dosis, que las ha tenido que redirigir a su mercado interno.<br> <strong>Por ahora figuran en la lista de la OMS las vacunas de Sinopharm, Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Johnson &amp; Johnson, aunque en los próximos días podría añadirse la también china de Sinovac, que ya está siendo sometida a análisis por expertos de la organización.</strong><br> Sinopharm es la primera vacuna que la OMS ha aprobado antes de que lo hicieran uno de los dos principales reguladores del mundo en el campo farmacológico: la Administración de Fármacos y Alimentos de EEUU (FDA, en inglés) o la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).<br> La FDA por ahora sólo ha dado luz verde al uso en el país de tres vacunas producidas por empresas de ese país (Pfizer, Moderna y Johnson &amp; Johnson), mientras que la EMA ha hecho lo propio en la Unión Europea con esas tres más la elaborada por la sueco-británica AstraZeneca. <o:p></o:p></h3>

<p> Ginebra |</p> <h3> <strong>Las dos dosis de la vacuna de Sinopharm necesarias para inmunizarse de Covid-19 deben administrarse con tres o cuatro semanas de intervalo, y después de inoculadas se tardan unos 15 días antes de lograr completa protección, destacaron ayer expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). </strong><br /><br /> La vacuna, primera no occidental aprobada para uso de emergencia por la OMS, "es comparable a otras en eficacia y seguridad", subrayó en un encuentro con internautas el mexicano Alejandro Cravioto, presidente del Grupo de Expertos para Asesoramiento Estratégico que emite recomendaciones sobre el uso de vacunas anticovid a la OMS<br /><br /> Preguntado por posibles efectos secundarios de esta vacuna, el experto señaló que, como otras desarrolladas por otras farmacéuticas contra la Covid-19, puede producir dolores en el brazo donde es inyectada, fiebre, así como un malestar que puede prolongarse unas horas o unos días.<br /><br /> "Es normal, pues es la manera en la que el cuerpo responde al antígeno", subrayó Cravioto, quien afirmó que por ahora no se han detectado efectos secundarios graves con esta vacuna en pacientes.<br /><br /><strong>El asesor de la OMS subrayó en todo caso que los países que la utilicen deben tener sistemas de control que detecten de manera rápida efectos secundarios de importancia o de larga duración. </strong><br /><br /> Cravioto indicó además que la vacuna de Sinopharm se ha mostrado también eficaz ante variantes ya muy extendidas del coronavirus, como la "británica" o la "brasileña", aunque no hay datos todavía suficientes para medir su respuesta a las detectadas primero en Sudáfrica o India, también presentes en decenas de países.<br /><br /> Como en otras vacunas, la de Sinopharm muestra una duración de la inmunización que genera de al menos seis u ocho meses (no hay datos más allá de eso debido al reciente desarrollo de estos antígenos).<br /><br /><strong>La vacuna ha mostrado ser eficaz hasta en un 79 por ciento para prevenir casos graves de Covid-19 </strong>y se basa en adenovirus (virus debilitados o inactivados), como la mayoría de vacunas que se han desarrollado hasta el momento, con excepción de las de Pfizer y Moderna, que usan la más avanzada tecnología del ARN mensajero.<br /><br /><strong>La vacuna china está recomendada para mayores de 18 años</strong> y aunque no se realizaron demasiados ensayos clínicos en mayores de 60 años no hay razón para pensar que esta vacuna se comporte de forma diferente en ese grupo de edad, según señaló el propio Cravioto.<br /><br /> La inclusión de la vacuna -que puede conservarse en una nevera normal- en la lista de uso de emergencia de la OMS abre la puerta a que sea distribuida en países de todo el mundo, si la organización cuenta con dosis, a través del <strong>programa Covax</strong>, ideado para lograr mayor equidad en la administración global de vacunas anticovid.<br /><br /> Este programa tiene el objetivo de distribuir antes de fin de año 2.000 millones de dosis en todo el planeta, pero por ahora sólo ha entregado unos 60 millones, debido a imprevistos como la ola de Covid-19 en India, uno de los principales productores de dosis, que las ha tenido que redirigir a su mercado interno.<br /><br /><strong>Por ahora figuran en la lista de la OMS las vacunas de Sinopharm, Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Johnson &amp; Johnson, aunque en los próximos días podría añadirse la también china de Sinovac, que ya está siendo sometida a análisis por expertos de la organización.</strong><br /><br /> Sinopharm es la primera vacuna que la OMS ha aprobado antes de que lo hicieran uno de los dos principales reguladores del mundo en el campo farmacológico: la Administración de Fármacos y Alimentos de EEUU (FDA, en inglés) o la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).<br /><br /> La FDA por ahora sólo ha dado luz verde al uso en el país de tres vacunas producidas por empresas de ese país (Pfizer, Moderna y Johnson &amp; Johnson), mientras que la EMA ha hecho lo propio en la Unión Europea con esas tres más la elaborada por la sueco-británica AstraZeneca. <p></p></h3>

La vacuna china de Sinopharm es la primera no occidental aprobada para uso de emergencia por la OMS para incluirla en el programa Covax.

La vacuna china de Sinopharm es la primera no occidental aprobada para uso de emergencia por la OMS para incluirla en el programa Covax.

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