Cascos azules bolivianos reparten 10.000 platos de comida a damnificados de Haití
PUERTO PRÍNCIPE |
El contingente boliviano que conforma la misión de Cascos Azules que operan en Haití repartió durante la jornada 10.000 platos de comida a los sobrevivientes del fatal terremoto registrado el martes 12 de enero y que dejó alrededor de 100.000 muertos y tres millones de damnificados.
Los casos azules bolivianos forman parte de los socorristas que distribuyen alimentos y diverso tipo de ayuda a los pobladores de este país que fue devastado por la tragedia y que ahora se enfrenta a los peligros de la falta de alimentos, medicamentos y la aparición de enfermedades dado el cuadro de descomposición de los fallecidos que ya llevan varios días derramados en las calles de Puerto Príncipe, la capital haitiana.
Corresponsales desplegados en la capital del país hermano informaron que comprobaron que las brigadas de socorristas, organizaciones solidarias y Naciones Unidas están haciendo el esfuerzo de llevar y distribuir a la gente agua potable y alimentos en camiones que desplegados por toda la ciudad.
"Encontramos un contingente boliviano repartiendo unas 10.000 porciones, de comida caliente de arroz con pollo en un proceso que se lleva con mucho orden, pese a que la gente se atropella para recibir los alimentos", indicó un reportero de de la cadena televisiva norteamericana CNN.
El gobierno boliviano confirmó asimismo el envío de 11 toneladas de medicamentos, vituallas, sangre, además de 20 profesionales médicos que son expertos en desastres naturales a la República de Haití, informó, este viernes, el ministro de Salud, Ramiro Tapia.
La autoridad explicó que hasta el momento ya se logró recolectar un poco más de medio millar de unidades de sangre que servirán para salvar vidas en el país caribeño, cuya capital Puerto Príncipe fue escenario de un terremoto de grandes magnitudes que destruyó la ciudad y dejó a decenas de miles de muertos.
Tapia espera que hasta este sábado, cuando la campaña de ayuda llegó a su fin, se recolecte 800 unidades de sangre, por lo que convocó a la población activa a solidarizarse con un pueblo hermano víctima de los efectos del cambio climático.
El ministro explicó, también, que de las 11 toneladas, 5 son de medicamentos, dos son vituallas, tres toneladas son alimentos, y una tonelada es sangre, plasma y equipos para conservar la sangre en buen estado.