Las elecciones primarias fijadas para el 27 de enero del próximo año fueron forzadas por el presidente Evo Morales y su entorno con el propósito de desmovilizar el espíritu ciudadano rumbo a las Elecciones de 2019, y se repita lo que sucedió en Venezuela, que se deje el camino expedito para la perpetuación del poder en manos de quienes representan la minoría, afirmó el constitucionalista, Carlos Alarcón.