Linchan a un joven en Entre Ríos
Al promediar a las 19:00 de ayer y en plena carretera, comunarios de Entre Ríos ataron de pies y manos a Rodrigo Carvajal (20), le rociaron con gasolina y, luego de golpearlo, le prendieron fuego en presencia de su padre y su tío, quienes, a pesar de las súplicas y llanto, no pudieron evitar el trágico desenlace provocado por la furia de al menos 700 personas.
Horas antes, él, junto a Edson Veizaga (21) y una mujer, estaban a bordo de un vehículo supuestamente robado, por ello, fueron detenidos por los vecinos y arrastrados por varias calles.
“¡Necesitamos ayuda! ¡Que venga la Policía! ¡La gente detuvo a mi hijo y sus amigos, y quieren lincharlos!”, gritaba el padre de Rodrigo, que, insistentemente y con desesperación, llamó reiteradas veces a la Policía.
Rodrigo falleció cerca de las 23:00, momento en el que la Policía logra acceder al cuerpo para realizar el levantamiento del cadáver, ya que la población enardecida impidió que los efectivos policiales rescaten el cuerpo.
“Los policías intentaron apagar el cuerpo que se encontraba en llamas, pero no les dejaron. Ellos también fueron agredidos, la gente estaba enardecida”, contó un testigo.
En una cancha de fútbol, otro grupo de pobladores procedió de la misma forma con Edson, quien pudo ser rescatado cerca a las 21:00, con vida pero con quemaduras de primer y segundo grado, y que actualmente se encuentra internado en el hospital de Yapacaní, Santa Cruz.
La tercera detenida fue liberada. “Ella sólo era una acompañante, no sabía sobre el supuesto robo del vehículo”, dijo un testigo. Tras un rastrillaje, la Policía dio con ella cerca de las 2:00 de la mañana del miércoles.
El comandante departamental de Santa Cruz, Alfonso Siles, informó que la Policía trató de intervenir, “trató de hacer todo, pero era una turba de más de 700 personas que no permitió que la Policía llegue hasta el lugar, es más, no hicieron caso ni al presidente del Comité Cívico ni al subalcalde ni a nadie, a ninguna autoridad y mucho menos a la Policía”.
Agregó que los pocos policías que acudieron al lugar fueron agredidos con piedras. También rompieron y abollaron el vehículo policial “y, es más, hasta la propia vida de los pocos policías que fueron reaccionaron de manera inmediata corría peligro”.
Siles confirmó que Edson Veizaga está internado en un hospital de Yapacaní, pero señaló que está terapia intensiva con quemaduras que le causaron un grave daño.
“Por más delincuente que sea, no pueden quitar la vida, mucho menos hacer justicia con mano propia. Seguramente el Comandante de Cochabamba ha tomando las medidas pertinentes para mandar policías a ese lugar (Entre Ríos)”, dijo Siles.
Este año, en Cochabamba se registraron dos casos de linchamiento y otros dos de intento de linchamiento.
"Todo acto delictivo debe ser sometido al Ministerio Público y a la Policía (…) Hay que investigar y establecer responsabilidades y comenzar procesos contra los que han causado la muerte". Iván Canelas. Gobernador de Cochabamba
LINCHAMIENTOS EN COCHABAMBA
En noviembre de 2016, en Entre Ríos, dos sujetos acusados de robar motos también fueron linchados por al menos 400 personas.
En 2017 se registraron dos casos. El primero fue en abril, cuando pobladores de Pandoja en Quillacollo lincharon a un joven (25). Lo confundieron con un ladrón. En diciembre, un presunto delincuente fue linchado en el municipio de Santiváñez.
En febrero de 2008, en el municipio de Epizana, tres policías fueron linchados.
PUNTO DE VISTA
Nelson Cox. Defensoría del Pueblo en Cochabamba
“Hace más la presión social”
Hace más la presión social, la presión de organizaciones que no permiten que se puedan esclarecer los hechos y eso ha sido un factor detonante para que no tengamos sancionadas a ninguna de las personas que han participado en linchamientos.
Las turbas, cuando están enardecidas, deben tener un control ético. La vida es un bien preciado que debe ser respetado. Las autoridades no asumieron decisiones acertadas, ya que no existe una acción definitiva para orientar a estas personas que acuden al linchamiento como recurso de justicia por mano propia.
“Esta vez, no debe prevalecer el pacto del silencio, la Policía debe dar con los responsables.























