Investigan en dos países el caso de 39 cadáveres
Bélgica es una importante ruta de tránsito para los migrantes y para las redes de traficantes que buscan aprovecharse de la cercanía de Reino Unido, como demuestra el reciente descubrimiento de 39 personas muertas en un remolque.
La Policía británica anunció el miércoles haber hallado 39 cadáveres en un camión en una zona industrial al este de Londres. Y la Fiscalía belga no tardó en iniciar una investigación, en paralelo a las pesquisas británicas.
Aunque el camión viajó en un ferri que zarpó del puerto belga de Zeebrugge el martes por la tarde, nadie prueba “por el momento”, según la Fiscalía, que las víctimas subieran a bordo en Bélgica. La Policía británica anunció que eran de nacionalidad china.
“La investigación determinará desde cuándo están muertos. Es posible que el remolque haya cruzado el Canal de la Mancha con los migrantes ya fallecidos a bordo”, aseguró a la AFP François Gemenne, un experto en migraciones.
El trayecto utilizado demuestra que Bélgica, por su situación geográfica a un centenar de kilómetros de las costas inglesas, es un eje privilegiado para alcanzar el Reino Unido.
Actualmente, sobre el suelo belga hay entre 800 y mil migrantes que esperan una solución para atravesar el Canal de la Mancha a través de Zeebrugge o de los puertos franceses cercanos a la frontera belga.
En Bélgica, la vigilancia policial se reforzó en los aparcamientos de las autovías, donde estacionan los camiones en ruta hacia Reino Unido, en los que los migrantes intentan esconderse durante la noche. Para los expertos, la rapidez con la que los políticos acusan a estas redes cuando sucede un drama esconde su incapacidad para lograr “soluciones duraderas” .