¿Cuáles son las lesiones que más se presentan en el fútbol nacional?

Los jugadores de fútbol, que es un deporte de contacto físico e implica una gran cantidad de movimientos intensos, como saltos, choques, sprints, cambios bruscos de dirección, son propensos a sufrir una serie de lesiones que pueden ser óseas, musculares, tendinosas y ligamentosas. 

Las dolencias pueden tener un origen no traumático, como el agotamiento muscular y traumático que es ocasionado por un golpe o choque en el campo de juego. 

El jefe médico del club Wilstermann, Alex Antezana, explicó que entre las molestias musculares más comunes se encuentran las sobrecargas. 

“En este grupo están las contracturas, desgarros, sobrecargas que comprometen, principalmente, a la parte muscular”, indicó  Antezana. 

Entre las traumáticas están las fracturas, en el tobillo y la tibia, aunque Antezana señaló que, en los últimos tiempos, también se presentan de manera frecuente las fracturas de clavícula, producto de las caídas que sufren los futbolistas. 

En estos casos los jugadores deben ser sometidos a cirugías, aunque a veces depende de la gravedad de la fractura y el estado del deportista. 

“Una de las lesiones más temidas en el ámbito profesional es la ligamentosa, sobre todo la  del ligamento cruzado anterior de la rodilla. En este grupo también están las del ligamento colateral medial, colateral lateral y aquellas a nivel del tobillo”, sostuvo el galeno. 

Si bien estas dolencias pueden estar relacionadas con una insuficiencia muscular que pueda presentar el deportista, según Antezana, estas “generalmente son producto de traumatismos o de una mala biomecánica, es decir, las posiciones y movimientos rotacionales que se producen durante la actividad física que esté realizando el deportista”. 

Antezana apuntó que muchas veces se observa, tanto en los entrenamientos como en los partidos, que un jugador sufre una lesión, sin tener contacto con un rival y suele decirse que se “lesionó solo”. 

Esto se debe a que el futbolista hizo un movimiento inadecuado, ya sea por la posición, forma y actitud del cuerpo en el momento. 

Otro tipo de molestia común son las “rupturas meniscales, que gracias a los nuevos implantes ahora pueden ser intervenidas y reparadas. Con los nuevos tratamientos, se pueden realizar suturas meniscales, con el objetivo de preservar esa rodilla en la actividad deportiva”, manifestó Antezana. 

En este tipo de situaciones el que toma la decisión final de operarse o no es el deportista, pero, según Antezana, se aconseja la cirugía para dar una mayor vida a la rodilla, “porque si se hace solamente el remodelado meniscal, el pronóstico a corto plazo de esa rodilla es malo, porque se puede desarrollar una artrosis”. 

Entre las lesiones comunes también están las tendinosas,  que pueden ser rotulianas y de Aquiles. El origen de estas puede tener una incidencia fuerte en el tipo de terreno en el que se entrena. 

Los futbolistas también suelen presentar pubalgias, que se caracteriza por un dolor intenso en los grupos musculares ubicados en la zona inguino-púbica. Estas tienen un origen traumático, tras una caída o un salto incorrecto, que genera una tracción en los aductores.

La recuperación debe ser planificada

Después de una cirugía, como la del ligamento cruzado anterior, se debe tener un tratamiento preventivo posterior, porque se vio que en un tiempo corto hay un alto riesgo de una artrosis de rodilla. 

“Lamentablemente, la mayoría de los jugadores del fútbol, por la actividad física que realizan, pueden terminar con rodillas lesionadas, que ya presentan cuadros de artrosis y que al final tengan que usar prótesis de rodilla para realizar sus actividades normales”, advirtió Antezana.

Las canchas duras pueden generar lesiones

Son muchos factores que pueden generar las lesiones en el fútbol, uno de ellos y muy importante es el tipo de cancha en la que se trabaja.  

“Las canchas en Bolivia y en la mayor parte de Sudamérica son duras, lo que puede generar cuadros de pubalgia, tendinitis rotuliana y de Aquiles”, aseveró Antezana. 

Además, el galeno puntualizó que hubo un incremento de las tendinitis rotulianas. En su criterio, se debe a que muchas de las escuelas de fútbol practican en canchas de césped sintético. 

“No es por hablar mal, pero casi el 100% de las canchas no cumplen con los requerimientos necesarios para realizar una actividad deportiva adecuada. La FIFA sacó unas características que deberían tener esas canchas para disminuir el impacto a nivel de las rodillas y evitar estos problemas de lesiones”, concluyó.

Las lesiones óseas son las fracturas y fisuras

Una fractura es la ruptura completa del hueso, mientras que las fisuras son una rotura parcial del hueso. 

En el grupo de las lesiones óseas también están los esguinces, que son una distensión del aparato de ligamentos, y las luxaciones, que son la separación de las superficies articulares de los huesos. 

Sobrecarga y

contractura muscular

Una sobrecarga muscular se produce por un sobreesfuerzo que se manifiesta con pesadez y dolor. 

La contractura se debe a la contracción involuntaria de uno o más grupos de músculos. Se presenta con un abultamiento con inflamación y dolor. 

Desgarro o 

ruptura muscular

Es el rompimiento de las fibras del músculo causado por una contracción o un estiramiento violento. 

Tendinitis del

talón de Aquiles

Es una sobrecarga del tendón de Aquiles, que puede ser causada por el tipo de pisada, la distribución de las cargas y la retracción del tríceps.  También está la tendinitis rotuliana. 

Ruptura de ligamento cruzado anterior

Es la rotura del ligamento por un encuentro abrupto con un contrincante o por un giro brusco de la rodilla. 

Tres grados de rupturas

El grado I se produce por un estrés en el ligamento, pero sin comprometerlo. 

El grado II es de consideración porque se rompen vasos y fibras del ligamento. 

En el grado III se produce una ruptura considerable del ligamento.