Basco: “Nuestros ahorros se están agotando, estoy muy preocupado”
Las Carreras Pedestres 10K organizadas por el Ministerio de Deportes ofrecieron a varios fondistas nacionales la oportunidad de ganarse la vida a través del deporte; sin embargo, ahora debido a la pandemia estas fueron suspendidas y los corredores se encuentran en aprietos económicos.
Uno de esos fondistas es el orureño Vidal Basco, recordista nacional de los 10.000 y 5.000. Medalla de plata en los XI Juegos Suramericanos Cochabamba 2018 y cuarto lugar en los Juegos Panamericanos de Lima 2019.
Aunque no se trata de un sueldo fijo, los fondistas podían mantenerse económicamente y a sus familias, gracias a los jugosos premios que entregaban las carreras (14.000 Bs al primer lugar).
Basco le contó a Los Tiempos las dificultades por las que atraviesa no sólo en el tema económico, sino para poder continuar con su preparación.
¿Cómo está su situación económica, ahora que las carreras 10K fueron suspendidas?
Económicamente estamos muy preocupados porque nosotros sólo vivíamos de esas carreras y ahora no contamos con ningún ingreso económico, espero que pronto exista una vacuna y se solucionen las carreras.
Estamos al borde de gastar todos nuestros ahorros, porque nosotros vivíamos como fondistas de las carreras 10 K. A la fecha ya debían llevarse adelante las carreras de Tarija y Sucre, que al final no se realizaron por la cuarentena.
La verdad estoy muy preocupado, porque mis ahorros ya se están acabando y los bonos tampoco nos están llegando.
Así como yo, hay otros compañeros que también vivían de las carreras 10K, ellos están muy preocupados también, no sabemos qué vamos hacer.
Ojalá sea posible que todo pronto pueda solucionarse y así volvamos a correr, eso es lo que esperamos.
¿Al no tener estos ingresos, evaluó la posibilidad de poder ver otra forma de ganarse la vida?
El problema es que de momento tampoco se puede trabajar de otra cosa, yo hubiera trabajado de albañil o tal vez atender una tienda, pero no hay nada de trabajo.
Me queda irme a mi pueblo, donde puedo entrenar allá, también tengo todavía a mi familia que me pueden apoyar en esa parte.
¿Cómo asumió este tiempo de cuarentena?
Cuando empezó la pandemia nosotros lo tomamos como si se tratara de un reposo, nos quedamos en casa la primera semana y después me fui a mi pueblo, a la cosecha de mis hermanos y mis papás, donde pude ganarme algunos productos para mi alimentación, porque ya no podía ingresar al centro de la ciudad para hacer compras.
¿Si bien estuvo en reposo el primer mes de la cuarentena, después pudo volver a los entrenamientos?
R.- Mi casa es en la orilla de la ciudad de Oruro y salgo a trotar por ahí. No estamos entrando a la pista, porque está cerrada, pero está bien, porque debemos acatar a esas reglas, porque las autoridades saben lo que hacen.
Nuestros entrenadores tampoco pueden entrenarnos. El tema es que tampoco ya estoy acostumbrado al terreno, porque todo este tiempo estuve entrenando en pista, entonces tendría que cambiar de rutina.
Salgo a trotar en las afueras de la ciudad por algunas lomas, donde no pueda tener contacto con nadie.
¿Tampoco está recibiendo el apoyo de las becas Tunkas?
R.- Me apoyaron unos dos meses del programa Tunkas el año pasado, ahora ya no, se cerró el programa. Ojalá que en este tiempo que estamos en crisis tal vez nos puedan ayudar, no sé si desde el Ministerio de Deportes o la empresa privada, pero es que también estamos paralizados por esta pandemia, que está perjudicando mucho. Le pedimos al Ministro(Milton Navarro) que no se olvide de nosotros los fondistas, que nuestra forma de solventarnos eran estas carreras, muchos nos ganábamos la vida con esas carreras, porque los apoyos como los Tunkas no duran mucho. Son sólo por algunos meses y luego se cierran, por eso nosotros estábamos más dedicados a las carreras 10K a nivel nacional, además que competíamos a nivel internacional siempre con la idea de llevar el nombre de Bolivia en alto.
Por eso, estamos continuando con los entrenamientos para que cuando comiencen las carreras estemos en forma y no perdamos nuestro ritmo.
LA COVID-19 NO CAMBIA SU SUEÑO
Uno de los mayores sueños de Vidal Basco es llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio, la pandemia y la crisis que se generó en el mundo del deporte no cambiaron su meta.
“Mi gran sueño sigue siendo llegar a los Juegos Olímpicos, por eso también, a pesar de que todas las calles están cerradas y hay controles de militares y policías, nos estamos dando formas para no perder el ritmo. Porque si paro más de dos o tres meses, va a ser difícil retomar los entrenamientos, por eso continuamos con los trotes, una vez al día. Me voy a las pampas lejanas, donde no pueda tener ningún contacto con otras personas”, asegura Basco.
Después del cuarto lugar obtenido en los Juegos Panamericanos Lima 2019, en julio del año pasado, Basco señaló que el tiempo tal vez no le alcanzaría para lograr las marcas mínimas para llegar a Tokio 2020; ahora espera que la pandemia le dé la oportunidad.