Emociones confinadas: diez claves para ayudar a los niños
Por más de 80 días, en Bolivia, los niños y adolescentes están confinados en casa ante la cuarentena obligatoria para evitar la expansión del coronavirus. De la noche a la mañana tuvieron que cambiar su rutina y desarrollar su día a día puertas adentro.
El confinamiento es una situación nueva para todos. La pandemia también alteró la vida a los niños, al igual que a los jóvenes y a los adultos.
Ante la situación, los niños tienen una serie de sentimientos y así lo expresaron en el video que acompaña la nota.
En líneas generales, 15 niños y niñas, de entre 3 y 15 años, manifiestan que están bien en su casa con su mamá y/o papá, que están felices de estar en familia. Comentan que juegan y hacen tareas, pero expresan esa pena de no poder salir, ya sea para ir a jugar o visitar lugares, amigos o familiares. Explican que están aburridos y demandan sus espacios de socialización.
Expertos explican que la experiencia para cada niño será diferente porque depende de diversos factores: sociales, culturales, económicos y otros. “Cada uno puede estar llevando el confinamiento según sus características de vida. No es lo mismo vivir en un departamento de 60 metros o en una casa con jardines, patios y piscina”, explica Marlene Vargas, psicopedagoga.
El psicólogo Germán Burgoa explica que las experiencias para los niños de este tiempo en casa también serán diferentes si forman parte de familias relativamente estables o, caso contrario, de familias disfuncionales en las cuales los niños se enfrentan a carencias, problemas de comunicación, hacinamiento y violencia intrafamiliar.
A nivel general, los niños pueden tener diversos sentimientos durante el confinamiento, como confusión, aburrimiento, ansiedad, miedo, enojo, angustia, irritabilidad, incertidumbre y estrés, entre otros.
Por ello, es labor de los padres protegerlos y explicarles el contexto de acuerdo a su edad y, sobre todo, brindarles y transmitirles seguridad sin causarles temor.
La socialización
“El ambiente social, las relaciones sociales son vitales para el niño, para su aprendizaje y su adaptación”, dice Burgoa.
“La socialización es el proceso por el cual los niños aprenden, es la interacción lo que les permite desarrollarse, estimularse, crecer, vivir”, señala Vargas.
La psicóloga Ximena Calatayud explica que los espacios de socialización son fuentes de aprendizaje permanente y es incalculable su valor estimulante en el desarrollo de los niños.
Por este motivo, organizar el día a día para llevar de la mejor manera posible esta situación excepcional es clave.
Los especialistas brindan algunos consejos para ayudar a contener a los niños durante el confinamiento y hacer más llevadera esta situación.
01 Enseñarles rutinas ligadas a hábitos
Burgoa, quien trabaja con familias y niños desde hace más de 30 años, señala que el desarrollo y la enseñanza de los hábitos es algo cotidiano que los padres deben hacer a pesar del confinamiento para poder beneficiar a los niños.
“La rutina le genera estabilidad al niño y ayuda a calmarlo porque le da cierta noción de control sobre su entorno, sabe lo que pasará después y eso es bueno”, dice Calatayud.
Conviene mantener horarios de comidas, estudio, sueño y hábitos de higiene, dejando tiempo para el esparcimiento. Además se le deben dar tareas de cooperación en la casa y actividades que le ayuden en su autonomía (vestirse, peinarse, prepararse la leche) y otras acorde a su nivel de desarrollo.
02 Controlar la información que reciben
Los niños no procesan la información de la misma forma que los adultos. Por eso es necesario protegerlos de la información que podrían malinterpretar o no entender.
“Hay que ser honestos, pero no entrar en detalles innecesarios y no exponerlos de forma permanente a charlas o informativos sobre la Covid-19, ya que no es saludable”, dice Calatayud.
Burgoa aconseja no magnificar ni minimizar el impacto de la enfermedad. “Al magnificar, se genera miedo que puede convertirse en fobias, y, al minimizar, se pone en riesgo al niño respecto a su salud y la del entorno”, aclara.
03 Crear espacios para la expresión emocional
Los padres deben ser muy creativos con los niños y generar espacios que permitan la expresión emocional de los niños a través del diálogo, dibujos, escritura, juegos (grupales e individuales), cuentos, manualidades, puzles o pasatiempos.
Calatayud aconseja hablar de las emociones, qué le preocupa, a qué tiene miedo y procurar en base a esa información contenerlo y darle estabilidad.
Es importante que se desahogue, no sólo decir: “debes calmarte” o “no te preocupes”. “Es bueno reconocer esa situación y sus emociones, pero no estancarse en ella; buscar la forma de gestionarla en base a conductas de cuidado y protección responsable”.
“Reprimir las emociones genera malestar y afecta su autoestima”, acota Vargas.
04 Adultos en calma
Los adultos deben estar en calma y cuidar de su salud mental. Los niños son muy susceptibles al estado emocional de las personas que los rodean.
Los adultos deben acoger y brindar protección, seguridad a los pequeños.
“El miedo, la tristeza y demás, el (niño) podrá manejar mejor en la medida en la que le generen también la seguridad que necesita para vivir, sintiéndose protegido y amado, y eso será a partir de la presencia activa de sus padres en su vida”, dice Vargas.
05 Fomentar las relaciones con sus pares
Es importante mantener lazos e intercambios sociales con los amigos y familiares. Las videoconferencias son una buena opción.
06 Mantener una alimentación saludable
Es importante y vital mantener una alimentación saludable para fortalecer el organismo.
07 Hacer un buen uso de la tecnología
Es necesario regular el uso de la tecnología en casa, así este recurso será un elemento positivo y no negativo que influya en el distanciamiento de las personas que están cerca.
08 Realizar actividad física y artística
Se recomienda realizar ejercicios físicos que ayudan a la salud y combaten el estrés. Asimismo, actividades artísticas (canto, baile, tocar un instrumento) que beneficia también a la salud mental.
09 Promover la autonomía de los niños en actividades educativas
Vargas recomienda promover la autonomía de los niños en sus tareas educativas. Es importante respetar la tarea del niño como él la hizo (esté bien o mal). Entender que son sus tareas, sus clases y la autoridad en el proceso de aprendizaje es el maestro. “Si la maestra no detecta que el niño no puede algo porque los papás hicieron por él sus deberes, no detectará sus dificultades y no podrá intervenir y ayudar a la superación de los mismos”, dice.
10 Respetar espacios personales
Es importante respetar el espacio personal de los integrantes de la familia, no todos tienen que estar siempre juntos.