En Bolivia, se producen más de 70 millones de litros de aceite vegetal al año, de los cuales 37 millones son desechados. Además, según estudios, un litro de aceite contamina hasta 1.000 litros de agua. Por ello, surgieron varias empresas que reciclan este producto, lo que abre un nuevo espacio de negocio sustentable con el medioambiente.