Pintadas de Mbappé y Neymar, figuras gigantescas de Messi o Cristiano Ronaldo erigidas en la India escenifican la pasión con que los aficionados al fútbol de este país asiático viven el Mundial de Catar, una nación anclada al críquet, pero donde los recuerdos de Maradona y Pelé desatan pasiones.