Los ministros de Exteriores de la OTAN se comprometieron ayer a seguir apoyando a Ucrania “el tiempo que sea necesario”, también con respaldo para reparar la infraestructura energética, y aseguraron que no darán “marcha atrás”.
Ucrania advirtió ayer de otra semana complicada ante la preparación por parte de Rusia de nuevos ataques tras siete oleadas de bombardeos contra la infraestructura energética del país, mientras que el alcalde de Kiev no descarta una evacuación parcial de la capital si continúan los bombardeos.
En unos pocos días, Kiev se transformó en una zona de guerra. En esta ciudad de tres millones de habitantes, los tanques se pasean por las calles, preparándose para un asalto total de las fuerzas rusas.