El asesinato de una niña de ocho años por parte de una colegiala de 17 continúa alarmando a la comunidad de Miraflores, en San Rafael de Velasco, Santa Cruz. La investigación realizada por la Fiscalía y la Policía reveló que la autora del infanticidio, antes de atentar contra la niña, ya había sacrificado a sus propias mascotas. Por este delito, fue sentenciada a seis años de reclusión en un centro de infractores.