Consejos para el cuidado de orquídeas
//Texto: María Fernanda Pando Sevilla//
La orquídea, una flor que se caracteriza por su belleza y elegancia, requiere cuidados especiales (sobre todo si se desea mantenerla en interiores). Sin embargo, se tiene la creencia que esta sofisticada planta requiere extremos cuidados, cuando en realidad todo recae en la dedicación que se le da, pero de acuerdo a sus variedades.
Para brindar una guía de su cuidado, la licenciada Noemí Ríos, propietaria de Vivero Plantines (Santa Cruz), explica el trato que deben recibir las orquídeas.
EL RIEGO Y LA MACETA
Las orquídeas son originales de zonas tropicales y húmedas, por lo que deben estar siempre en el punto de hidratación correcto. Este es el factor de cuidado de esta flor que se debe tomar muy en cuenta. Primero, la experta recomienda utilizar agua recolectada de lluvia antes que la de grifo.
El segundo paso, afirma, es observar detenidamente sus raíces. Si las raíces tienen tonos muy blancos y con flores un poco arrugadas, hace falta más riego. Si tienen tonos marrones, la planta está muy hidratada y debe dejar de regarse por unos días. Por último, si las raíces tienen colores verdes, su riego es correcto. Sin embargo, en todos los casos, se recomienda controlar que el sustrato se mantenga húmedo y sin charcos. Respecto a las estaciones, Ríos sugiere regar la orquídea dos veces por semana en primavera y verano, mientras que en invierno y otoño, cada cinco días.
Otro aspecto fundamental para el cuidado de esta planta es la maceta. La especialista asegura que estará en buen estado si ésta es transparente, ya que le entrará la suficiente luz a sus raíces. “Es mejor tenerlas en macetas transparentes, por el tipo de fotosíntesis a través de las raíces que realiza”, afirma.
ILUMINACIÓN Y HUMEDAD
La iluminación es fundamental para su crecimiento y floración. No obstante, existen limitantes a tener en cuenta para cuidar la orquídea. Ríos comenta que, idealmente, esta planta debe estar en un ambiente de 20 a 28 grados centígrados y no debe estar expuesta al sol directo como el de mediodía. “Lo ideal es situarlas en un ambiente con bastante luz, pero cuidar su exposición cuando están en floración”, dice.
La experta explica también que, si se desea situarla en un sitio donde recibirá al menos seis horas de sol, lo ideal es hacerlo gradualmente. Es decir, el primer día de la llegada al hogar dejarla en el área designada por pocas horas y, posteriormente, ir aumentando ese tiempo los siguientes días. Todo esto con el fin de evitar que sus hojas sufran quemaduras y un cambio drástico de ambiente.
Como ya se detalló, estas plantas necesitan humedad para sobrevivir. Las heladas o temperaturas menores a los 10 grados centígrados las pondrán en riesgo, según dice Ríos, por lo que cuando se presentan estos climas se recomienda tenerlas en el interior de la vivienda. Pero también, la experta manifiesta que las orquídeas pueden decorar un interior con poca luz, por ejemplo, una oficina. Esto únicamente en su tiempo de floración y teniendo todos los cuidados.
QUÉ HACER CUANDO SE SECA
Para entender cómo se seca la orquídea, Ríos expone lo siguiente: “Cuando florece en su vara se puede observar que las flores aparecen desde la base hacia la punta de la rama. Cuando las flores se sequen, empezarán a caer de la misma forma que florecieron”. Es decir, las primeras flores en crecer serán las primeras en irse, si el proceso sucede de esta forma es natural. Si la planta no actúa así, es que se empezó a secar por otras razones, como falta o exceso de riego.
Cuando la rama se seque, la especialista sugiere sólo en ese caso cortar ésta contando desde la base hacia arriba la tercera yema, para así permitir que una nueva logre crecer. Finalmente, cuando las hojas caen solas, es preciso controlar que la vara no esté seca, de no ser así evite cortarla.
QUÉ HACER CUANDO ESTÁ EN SU MAYOR PUNTO DE FLORA
Ríos manifiesta que, con los cuidados adecuados, la orquídea puede llegar a tener flores hasta dos veces por año por más de tres meses. Para lograr esto, comenta que es fundamental que esté en una maceta transparente. No deben estar en zonas con una fuerte corriente de aire para no dañar las flores y, sobre todo, no descuidar el riego.
“Recibí muchos comentarios que, cuando la compraron, no floreció de nuevo, que son plantas caprichosas. En algunos casos, un cambio de ubicación hace que la planta reaccione y no florezca”, cuenta.
Por último, en esta etapa de la planta, la experta comparte el secreto de simplemente tratarla con amor y recordar que es un ser vivo y que el trato que se tenga con ellas se verá reflejado visualmente.
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CUANDO DEJAN DE ESTAR EN FLORACIÓN
“Cuando terminan la floración entran en reposo, se recuperan de la carga de las flores y a veces dan flores de tamaño más grande entre una floración a otra”, comenta la experta. Esta etapa suele ser al final del verano y aunque no florezca, sigue requiriendo cuidados específicos.
Noemí recomienda quitar gradualmente las hojas secas o de color amarillo y, sobre todo, nutrir a la planta con abonos. Para realizar esta tarea, explica que los nutrientes que requiere la orquídea deben ser en líquido y regarla cuando está recibiendo la luz del sol (pero no directa). Estos nutrientes y abonos líquidos se pueden complementar con humus de lombriz también en ese estado químico. Se puede fertilizar de forma foliar o de riego cada dos semanas.
VITAMINAS Y SUSTRATO
Como punto de partida, Ríos advierte lo siguiente acerca del sustrato: “Son plantas tropicales epífitas, que viven sobre superficies y no sólo tierra. Su base es de corteza de pino, musgo o hasta incluso pedazos de carbón que ayudan en su absorción de humedad”. Sin embargo, apunta que todo depende del tipo de orquídea que se tenga y resalta que también puede vivir sólo con tierra. Sobre el cambio de sustrato, comenta que es ideal hacerlo cada vez que se cambiará de maceta o cuando las raíces no estén saludables.
Respecto a las vitaminas, los abonos hidrosolubles son los recomendados para la orquídea y activar la floración. Además, Ríos comparte la receta de un abono casero, que consiste en un té de cáscara de guineo. En dos litros de agua hervir cinco cáscaras de esta fruta, colar, dejar enfriar y verter en un rociador para regar la planta una vez a la semana.
TIPOS DE ORQUÍDEAS EN BOLIVIA Y CONCIENCIA AMBIENTAL
Según Ríos, la orquídea más comercial en Bolivia es la Phalaenopsis, pero también están la Dendrobium, Cymbidium, Cattleya, Cambria, Oncidium y Epidendrum, que se pueden encontrar en distintos colores. Además, resalta que las orquídeas que deben comercializarse son únicamente las que son criadas en viveros y que mayormente llegan de Brasil para ser vendidas.
No obstante, destaca que en Bolivia existen muchas variedades nativas, pero que éstas no deben ser extraídas de su hábitat y llevadas a la ciudad porque morirían rápidamente. “A veces las personas sacan de monte adentro variedades únicas de esta flor. Esto debe ser considerado como el tráfico de animales, no se las puede separar de su ambiente natural”, reflexiona Ríos.