¿Calor? Seis enfermedades comunes de esta temporada
Las elevadas temperaturas, la contaminación ambiental, la baja humedad del ambiente (clima seco) y el contacto continuo con el agua son algunos de los motivos por los que en esta época la gente está más propensa a tener una serie de enfermedades.
Conjuntivitis, enfermedades infecciosas del aparato digestivo, infecciones vaginales, otitis, rinitis alérgica estacional y deshidratación son algunas de las enfermedades más frecuentes de esta época.
Muchas de ellas se pueden prevenir, pero cuando no se tratan correctamente pueden ser muy peligrosas para la salud, sobre todo para los niños, mujeres embarazadas y personas mayores que son más vulnerables.
Los entrevistados recalcan la importancia de visitar al especialista para que identifique a tiempo la patología y le brinde un tratamiento adecuado.
1. Conjuntivitis
Entre las patologías oculares más comunes de esta época está la conjuntivitis (seca y la bacteriana), explica el oftalmólogo José Antonio Zegada .
Las bajas temperaturas, la contaminación y la baja humedad del medio ambiente ocasionan que la conjuntiva (capa que envuelve los ojos) reaccione congestionándose, produciendo elementos inflamatorios en sus células que como resultado produce la infección.
Sensación de sequedad ocular, ardor, ojos rojos, sensación de cuerpo extraño y, finalmente, la complicación con procesos infecciosos son algunos de los síntomas de la conjuntivitis seca por la falta crónica de lágrimas en los ojos.
La principal manifestación en la conjuntivitis bacteriana es la presencia de secreción o lagañas.
El especialista recomienda el uso de lubricantes oculares recetados por un profesional y el uso de lentes que filtren la radiación UV.
Recomienda siempre pensar en la prevención que involucra la consulta con un especialista en el área y no acudir a la farmacia u óptica sin tener la prescripción médica.
Aconseja evitar los ambientes muy secos (con ventiladores y aire acondicionado) y el tabaco.
2. Enfermedades infecciosas del aparato digestivo
El aumento de las temperaturas, la mala refrigeración y poca higiene en los alimentos y las bebidas facilitan y promueven el sobrecrecimiento de gérmenes patógenos.
El gastroenterólogo Daniel Guerra explica que en época de calor incrementan las enfermedades infecciosas del aparato digestivo que pueden ser parasitarias (amebiasis, giardiasis), bacterianas (salmonelosis e intoxicaciones alimentarias) o virales (rotavirus).
Dolor abdominal, diarrea o estreñimiento, náuseas, vomitos y fiebre son los síntomas más frecuentes de estos males que causan deshidratación y, si no son tratados oportunamente, cuadros más severos.
Para evitar esto, el especialista aconseja lavarse las manos constantemente, tener cuidado en la preparación (lavado y desinfección) de los alimentos y consumir agua hervida.
Recomienda que ante cualquiera de los síntomas de infección se debe acudir a un centro médico para el diagnóstico preciso y el tratamiento oportuno.
3. Infecciones vaginales
Por el aumento de temperatura que genera calor y humedad en la región genital, en esta época se incrementan las infecciones vaginales, especialmente la candidiasis vaginal producida por el hongo Candida albicans, explica María Isabel Cabrera, ginecóloga obstetra.
Ardor, enrojecimiento e inflamación de la vulva y vagina, dolor al orinar , dolor durante las relaciones sexuales y secreción vaginal espesa, blanquecina que luce como requesón pero no huele mal, son los síntomas de la candidiasis vaginal.
Aclara que la falta de higiene también incrementa el riesgo de padecerla.
La experta señala que la candidiasis vaginal es la causa de enfermedad ginecológica más frecuente. De cada 10 mujeres que van a su consulta, siete de ellas padecen esta infección vaginal, explica Cabrera.
Por ello, aconseja mejorar la higiene íntima, usar ropa liviana, no ajustada —de preferencia, de algodón—.
Explica que, de no tratar a tiempo una candidiasis vaginal, ésta puede producir infecciones urinarias a repetición e incluso problemas de infertilidad debido a que el hongo puede migrar a órganos genitales internos como las trompas y causar su inflamación.
4. Otitis
El agua y el calor son dos elementos que favorecen la otitis, una infección auditiva.
Raúl Romero, otorrinolaringólogo, explica que la otitis puede ser bacteriana o micótica (hongos), debido a la humedad en los oídos, es más probable en personas que hacen natación o están mucho tiempo en la piscina.
Explica que entre los síntomas de este mal se presenta: dolor, prurito, sordera, zumbidos y secreción por el oído.
Por ello, recomienda el uso de protectores para los oídos (tapones y gorros) para evitar el ingreso de agua a los mismos.
Secarse los oídos después del baño con una gasa o toalla es aconsejable.
Es fundamental curar correctamente la infección, señala el especialista. De no hacerlo, se puede hacer crónica, con lesiones más severas del oído y la membrana timpánica, incluso llegar a la sordera permanente.
5. Rinitis alérgica estacional
Romero explica que la rinitis alérgica estacional se presenta en esta época por el aumento de la vegetación que da lugar a la producción de polen que es el alergeno que produce este mal.
Por ello, las consultas médicas por este mal incrementan significativamente constituyendo el 50 por ciento de las mismas.
Estornudos, escozor, obstrucción y secreción nasal son los síntomas más frecuentes.
Aconseja el uso de barbijos y no estar expuesto al alergeno.
6. Deshidratación
El calor y la exposición al sol hacen que uno pierda mucha agua corporal a través del sudor, la micción o las heces. Por ello, es importante beber líquido de manera continua, a pesar de no tener sed. Se recomienda ingerir dos litros diarios. De no hacerlo, se puede tener cuadros de deshidratación o golpes de calor.