Alcaldías fumigan penales San Pablo y El Abra
La Alcaldía realizó la fumigación y desinfección de los ambientes interiores y exteriores del penal San Pablo de Quillacollo, como parte de las medidas para evitar la proliferación del coronavirus y cuidar la salud de los internos.
El secretario de Desarrollo Productivo, Rudy Valverde, informó que se desinfectaron todos los ambientes del penal donde viven los privados de libertad en condiciones precarias y de hacinamiento.
“No hemos querido quedar indiferentes con la población carcelaria, por eso se ha procedido a la fumigación de todo el penal”, aseveró Valverde, según un comunicado del municipio.
La desinfección se hizo a solicitud del alcalde, Héctor Montaño, quien desde el inicio de la cuarentena instruyó que se fumiguen todos los ambientes de instituciones y lugares públicos.
Durante marzo y abril se fumigaron todos los distritos, mercados, plazas, las principales calles y avenidas de la ciudad, el templo de San Ildefonso, el Juzgado de Quillacollo y el Comando Regional del Valle Bajo.
Por otra parte, se realizó la limpieza general de la plaza Bolívar, fumigación y remozado de las áreas verdes.
Sacaba
La alcaldesa Lisbeth Morales informó que también se desinfectó la cárcel de máxima seguridad El Abra para prevenir el coronavirus.
“Se está realizando la desinfección porque es una obligación y responsabilidad”, declaró. En el lugar hay más de 500 internos.
Morales llamó a la población sacabeña a cumplir con la cuarentena hasta el 10 de mayo. “Pedir, primero, que se cumpla con disciplina”, dijo. El municipio tiene dos casos detectados.