Tras la clausura, sólo el 25% de los estudiantes pasa clases virtuales
A un mes de la clausura del año escolar, las clases virtuales sólo llegan al 25 por ciento de la población estudiantil, “sobre todo a los últimos niveles de secundaria”, afirmó la dirigente de la Federación de Maestros Urbanos, Norma Barrón.
En tanto, los demás niños y jóvenes en edad escolar que no tienen acceso a la educación virtual se dedican a las labores de casa o apoyan en el trabajo a sus padres en el comercio y otros rubros, informó el dirigente de la Red 26, Omar Velasco.
Sin embargo, los estudiantes que acceden a los cursos de nivelación ven este sistema de aprendizaje como muy poco productivo por la mala señal de la conexión de Internet y porque no todos prestan atención a las clases virtuales.
“Se aprende poco, pero no sirve de mucho como base para el siguiente curso. Paso siete materias: lenguaje, ciencias sociales, ciencias naturales, matemáticas, educación física, música y religión”, señala Gianina L., estudiante de sexto de primaria en la unidad educativa Guillermo Urquidi.
La dirigente de los maestros urbanos señaló que la educación virtual ha fracasado no sólo en Cochabamba, sino en todo el país.
“La educación ha fracasado por las condiciones materiales. Por los anuncios que han hecho (desde el Ministerio de Educación), los alumnos y padres se han desligado. De 20 alumnos, cinco pasan clases, no es ni la mitad. Cada día fueron disminuyendo, así que se tuvo que cortar y los maestros han dicho ‘haremos nomás las notas’. Así estamos”, explicó la dirigente del Magisterio, Norma Barrón.
El 2 de agosto, el Gobierno nacional comunicó la clausura escolar 2020 en sus niveles inicial, primario y secundario de la educación fiscal, privada y de convenio. Además, anunció la promoción de los estudiantes al curso inmediato superior.
Para Barrón, el anuncio del Gobierno hizo que muchos padres y alumnos ya no tomen en cuenta las declaraciones del ministro Víctor Hugo Cárdenas, en el sentido de que “el cierre del año escolar no quiere decir cierre de la actividad educativa, pero las nuevas condiciones del segundo semestre son para proseguir el trabajo vía virtual, vía distancia, tanto en el sector privado como el sector fiscal”.
El dirigente de la Red 26 señal que muchos profesores determinaron seguir con las clases “por el cargo de conciencia, porque no es justo que ganen sin trabajar”, pero siempre y cuando los padres estén de acuerdo.
“Los profesores han hecho una especie de encuesta y han determinado seguir pasando clases. De 40 estudiantes, están pasando menos de 20, a veces se conectan 15”, dijo Velasco.
“La mayoría de los chicos se fueron al campo a ayudar a su familia en la cosecha o están trabajando de ayudantes de albañil, cerrajeros y otros están en el comercio”, añadió.
Además, señala tres aspectos que influyeron para la baja presencia de estudiantes a las clases virtuales: la declaración del Gobierno sobre la promoción al curso inmediato superior; el aspecto económico, porque hay familias de escasos recursos que no pueden acceder a la Internet y a los equipos digitales, y el desconocimiento de los padres en el manejo de redes.
El director de la Dirección Departamental de Educación (DDE) de Cochabamba, Félix Zapata, señaló que hasta el 15 de septiembre se tendrá el reporte oficial de la cantidad de estudiantes y profesores que dictan clases virtuales luego del anuncio de la clausura del año escolar.
LA OTRA CARA DE LAS CLASES EN ZONAS MÁS ALEJADAS
REDACCION CENTRAL
Desde el inicio de la pandemia, cientos de profesores del nivel inicial, primario y secundario se vieron obligados a adoptar el modelo de educación virtual y a distancia.
Hace dos meses, antes de que el Gobierno comunique la clausura escolar 2020, se conoció la historia del profesor Wilfredo Negrete, quien, montado en su bicicleta y cargado de un pizarrón, se desplaza tres veces a la semana por las comunidades de Aiquile para dictar clases a niños. Esta acción molestó a varios de sus colegas; sin embargo, sirvió para otros tomen el ejemplo.
Al igual que Negrete, en el kínder Cochabamba muchos profesores del nivel inicial continúan pasando clases, pese a las determinaciones del Gobierno.
“Nosotros les enviamos audios y videos por WhatsApp para que los niños, junto a sus padres, sigan con el avance de las clases. Antes usábamos el Zoom, pero es más complicado para los padres porque muchos trabajan y no siempre pueden estar conectados”, dijo la profesora del kínder Cochabamba, Nora Jaldín.
En un mes, las clases virtuales bajaron del 50 al 25 por ciento en Cochabamba.
Hasta julio, las estimaciones hechas por la DDE, la dirigencia del magisterio, la Federación de Estudiantes de Secundaria (FES) y las Juntas Escolares de Cercado I y II señalaban que menos del 50 por ciento tenían acceso a la educación.