Vuelos irregulares: observan responsabilidad en la DGAC por falta de especialización
La falta de especialización de los inspectores de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) sería uno de los factores que viabilizaron las 32 operaciones aéreas irregulares el pasado 10 de marzo en el aeropuerto de Chimoré, el cual permanecía cerrado por deficiencias en su seguridad operacional.
La reapertura irregular del aeropuerto derivó en la destitución del director de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares de Navegación Aérea (Aasana), Ronny Balderrama. Sin embargo, desde el sindicato de trabajadores de esta institución señalan que la DGAC tenía pleno conocimiento de las operaciones.
Aldo Eamara, secretario general del sindicato de Aasana Cochabamba, afirmó que hubo negligencia y descuido de parte de los inspectores de la DGAC, quienes tenían la responsabilidad de verificar in situ las condiciones del aeropuerto.
Indicó que las deficiencias del aeropuerto, como la ausencia de carros bomberos y extintores de fuego, no se pueden pasar por alto, por lo que cuestionó la formación y especialización de los técnicos de la DGAC.
“Cuando una persona ocupa un cargo de acuerdo a su formación profesional, es imposible que estos detalles se le escapen, por eso es que hay averiguar cuál es la formación de cada funcionario que está de inspector en la DGAC”, dijo.
Eamara afirmó que dicha institución es la encargada de normar y supervisar todo lo referido a la seguridad del espacio aéreo en Bolivia, por ello consideró que tiene responsabilidad directa en este caso. No obstante, dijo que se debe incluir en la investigación al director ejecutivo, Celier Aparicio Arispe.
“Él tiene que dar una explicación de lo sucedido y del estudio que hubo de parte de ellos en cuanto a la reapertura de la atención ese aeropuerto”, agregó.
Por su parte, el experto en aeronáutica Constantino Klaric explicó que toda operación privada debe contar con un permiso y un plan de vuelo otorgado por la DGAC, requisitos que posteriormente son validados por Aasana.
En consecuencia, considera que ambas instituciones debieron tener conocimiento de las 32 operaciones irregulares del 10 de marzo.
Experto cuestiona poca transparencia
El experto en aeronáutica Constantino Klaric considera que llama la atención que, en el caso de las 32 operaciones irregulares realizadas el 10 de marzo en el aeropuerto de Chimoré, no haya una información certera respecto a los procedimientos realizados.
Cuestiona que no exista la documentación respecto a quién autorizó los vuelos, dado que existen contradicciones entre el ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, y el exdirector de Aasana Ronny Balderrama.
Klaric aseguró que las autoridades del sector aeronáutico tienen que saber que existen regulaciones internacionales que se debe cumplir, ya que este tipo de irregularidades vinculadas al incumplimiento normas de seguridad ponen al país en riesgo de perder la Categoría 1, que brinda facilidades para volar a Estados Unidos.