Abren dos investigaciones y Alcaldesa de Vinto se repone
Mientras la alcaldesa de Vinto, Patricia Arce, se reponía ayer en un centro de salud que sus allegados no quisieron identificar por razones de seguridad, dos investigaciones fueron abiertas para dar con los autores de los hechos de violencia perpetrados el miércoles pasado.
La primera fue interpuesta por la Alcaldía en la Fiscalía de Vinto contra el autor o autores de los destrozos y quemas que sufrió el edificio municipal, que ayer fue precintado con fines de investigación.
La segunda fue abierta de oficio por la Fiscalía de Quillacollo (por jurisdicción) y tiene que ver con los vejámenes que sufrió la Alcaldesa Arce.
El miércoles pasado, tras correr el rumor de que dos jóvenes del lado de los bloqueadores en el puente Huayculi (municipio de Quillacollo) fallecieron tras los enfrentamientos ocurridos con campesinos, presuntamente, enviados desde la vecina Alcaldía de Vinto, una multitud de motoqueros y otros integrantes de la denominada Resistencia se dirigieron a este último lugar, destrozaron el edificio municipal y se llevaron a la Alcaldesa hasta Huayculi, donde la vejaron y humillaron por cerca de una hora, antes de entregarla a la Policía.
Sobre el primer asunto, el secretario administrativo y financiero, Renán Luján, informó que la denuncia se interpuso por daño calificado, peligro de estrados, destrucción y deterioro de bienes públicos, asociación delictuosa y otras figuras delictivas.
El director seccional de la Policía de Vinto, José Luis Fuentes, informó que el mismo miércoles, de noche, una vez que pasó la toma del edificio y secuestro de la Alcaldesa, la Dirección de Control Social y la Policía del lugar pusieron candados al inmueble. Ayer, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Quillacollo precintó por formalidad el inmueble.
Por la tarde, se tenía prevista la inspección por parte de la Fiscalía para cuantificar daños y recolectar información, pero por cuestiones de agenda fue pospuesta para el lunes en la mañana.
En el edificio municipal, del que podían observarse los vidrios rotos por ambas salidas del inmueble, las sillas de plástico calcinadas y papeles desparramados por las aceras, no había ningún funcionario municipal.
Además, como se constató un día antes, las computadoras también estaban destrozadas. Sólo dos policías (uno a cada salida) resguardaban que nadie ingrese al lugar.
Según Luján, en este inmueble funcionaban las oficinas de Recaudaciones, Urbanismo, Asesoría Legal, Archivos y Activos Fijos, y otros.
El daño a la documentación es mayor que al mismo costo de la infraestructura. “Trataremos de reabrir la atención al menor tiempo posible”, dijo la autoridad municipal.
300 personas en el saqueo. Es la cantidad de posibles manifestantes que el miércoles pasado quemaron la Alcaldía de Vinto.
MARCHAS Y AMENAZAS
Control Social de Vinto convocó para hoy a una marcha de “pañuelos blancos” en protesta contra la quema del edificio municipal ocurrida el pasado miércoles. La gente que sólo observaba el edificio destrozado lamentó la pasividad de la Policía esa tarde, pese a que el Comando colinda con la sede municipal.
La Policía, en tanto, indicó que esa tarde sólo había contados efectivos, pues casi todos habían acudido a reforzar la seguridad en el Huayculi, en Quillacollo.
La directora del Servicio Plurinacional de la Mujer, Tania Sánchez, anunció que instaurará una demanda penal ante el Ministerio Público para que se investiguen los hechos violentos, referidos tanto al caso de la Alcaldesa de Vinto como a las agresiones a mujeres indígenas.
La Asociación de Concejalas de Bolivia (Acobol) anunció también que presentará una demanda penal ante el Ministerio Público para pedir la investigación e identificación de los autores de los vejámenes.
POR AHORA, LA ALCALDESA ESTÁ EN SITIO DESCONOCIDO
REDACCIÓN CENTRAL
Tras los vejámenes que sufrió la Alcaldesa de Vinto, Patricia Arce, la Fiscalía de Quillacollo tomó de oficio el caso por tema de jurisdicción, pues los mayores hechos de humillación ocurrieron en el puente Huayculi, que corresponde a Quillacollo.
Arce fue detenida por los manifestantes fuera del edificio municipal de Vinto y obligada a caminar cinco kilómetros hasta Huayculi, donde, en el punto de bloqueo, le cortaron el pelo y la bañaron en pintura roja.
Los manifestantes la acusan de haber pagado a campesinos y funcionarios municipales para participar del desbloqueo en Huayculi, que, a la postre, cobró la vida de un joven, además de causar más de 60 heridos.
Tras ser entregada a la Policia, fue recluida en un centro de salud, del que no se quiso dar ninguna información. A su debido tiempo, si se ve prudente, se convocará a una conferencia de prensa, declaró Luján.