Una persona fallece y buscan a una familia tras el desborde de ríos
El desborde de cuatro ríos, dos en el valle bajo y dos en el cono sur, dejó ayer muerte y desastre en Cochabamba. Un comunario identificado como Alejo Veizaga (25) falleció en Mizque y en el mismo municipio se busca a una familia que se presume fue arrastrada por una riada. En tanto, otras 100 familias se vieron afectadas por las pérdidas de sus sembradíos en Vila Vila, Sipe Sipe.
Las lluvias provocaron estragos en varias zonas del departamento. En Mizque se lamentó el deceso de Veizaga, que fue sorprendido por la riada del río Tujma. El cuerpo del joven de 25 años aún no fue hallado. Es el primer fallecido en Cochabamba a causa de las precipitaciones, informó el secretario de la Madre Tierra de la Gobernación, Alan Lisperguer.
“Esta persona estaba poniendo a buen recaudo su ganado cuando fue sorprendida por la riada. De momento se encuentra desaparecido y es buscado por las autoridades del municipio. En caso de que no se encuentra el cuerpo hasta mañana (por hoy) tenemos previsto el ingreso de grupos de rescate”, dijo.
Asimismo, se presume que este río se llevó en su caudal a una familia. La vivienda de estas personas está afectada y no se encontró a nadie dentro. También son buscados, pero se tiene la esperanza que estén en otro lugar.
En el mismo municipio se reportó la crecida de otro río, Uchama. El afluente, que es parte de la cuenca Mizque junto al Tajna, provocó daños en sembradíos que están en proceso de cuantificación, precisó Lisperguer.
Vila Vila
El valle bajo de Cochabamba también amaneció con inundaciones, principalmente en la comunidad de Vila Vila en Sipe Sipe. La prolongación del río Rocha se desbordó y provocó daños en los sembradíos de 100 familias y en la viviendas de estas personas.
El reloj marcaba la una de la madrugada cuando los comunarios escucharon la crecida del río. En menos de dos horas, el agua llegaba hasta la cintura. La gente rescataba sus pertenencias, pero no podían evitar la pérdida de más de 16 hectáreas de cultivos.
Una de las comunarias, María Teresa Argote, cuenta que allí no llovió durante la jornada del martes, por lo que se sorprendió al observar la crecida del río de una forma que no había visto nunca.
“Sí hubo desbordes en años pasados, pero nunca así”, cuenta Argote. Su vivienda está ubicada a unos 80 metros del caudal del río. Por lo que se estima que el afluente creció casi 100 metros de su ancho natural.
Las parcelas estaban listas para ser cultivadas, pero ahora están bajo el agua. Tomate, brócoli, perejil y zapallo son algunos productos que representan pérdidas de unos 5 mil bolivianos por familia.
Los daños en esta zona llegaron hasta la carretera. La circulación tuvo que cortarse durante unas horas hasta que se pueda hacer la limpieza de la vía. (Continúa en la página 11).
16 hectáreas dañadas se contabilizaron de manera preliminar en Vila Vila. Los comunarios contaron la afectación a sus tierras.
COMUNARIOS
"Desde que tengo memoria nunca vi esto. Sí hubo rebalses de agua, pero nunca de esta magnitud. Lo más triste es ver nuestros sembradíos totalmente perdidos". María Teresa Argote. Comunaria Vila Vila.
"Tenía harto para cosechar y se ha perdido. Son unos 5 mil bolivianos que pierdo. Algo así no ocurría desde hace unos 10 años". Rubén. Comunario.
