La rentabilidad de la banca cae en $us 10 millones
Durante el primer trimestre de 2013, el sistema bancario nacional logró una rentabilidad de 31 millones de dólares, 10 millones menos que en el mismo período de 2012, según informe de la Asociación Privada de Bancos (Asoban), que atribuye la causa al impacto de la aplicación del Impuesto a la Venta de Moneda Extranjera (IVME).
La aplicación del IVME, según la nota institucional de Asoban, ha tenido dos efectos en la gestión 2013: la disminución de las operaciones de venta de moneda extranjera en el sistema financiero formal, tal como se evidencia en el Informe de estabilidad financiera publicado por el Banco Central de Bolivia (BCB); y la disminución significativa de las ganancias netas por operaciones de cambio, como se refleja en el estado de resultados de las entidades bancarias.
Las ganancias netas por operaciones de cambio del sistema bancario, al 31 de marzo de 2013, antes de la aplicación de impuestos alcanzaron a 16,2 millones de dólares y el impuesto a la venta de moneda extranjera (IVME) a 9,2 millones de dólares , con lo cual la ganancia neta de operaciones de cambio del sistema bancario, después del pago del IVME, es de 7,1 millones de dólares, los cuales son menores comparados con los 16,4 millones que se generaron en la gestión pasada, cuando aún no existía este impuesto.
Los impuestos por IVME, al 31 de marzo de 2013, representan el 57 por ciento de la ganancia neta por operaciones de cambio, explica Asoban.
Si a esto se agrega el hecho de que estos impuestos no son considerados un gasto deducible de la base imponible para el cálculo del Impuesto de las Utilidades de Empresas (IUE 25 por ciento + AA IUE 12,5 por ciento = 37,5 por ciento), el cálculo del impuesto a las utilidades sobre la ganancia neta de operaciones de cambio a marzo de esta gestión alcanza ya a 6,1 millones de dólares.
Esto significa, en los hechos, que el sistema bancario, al 31 de marzo de 2013, pagará en impuestos 95 por ciento de las ganancias netas por operaciones de cambio.
Asimismo, en la medida en que los bancos terminen de vender dólares que compraron en el pasado a un tipo de cambio más bajo y ya no puedan adquirir dólares en el mercado, salvo del Banco Central de Bolivia, su actividad derivará en pérdidas si continúan operando en el mercado cambiario, según el análisis de Asoban.
Por los efectos negativos en el público que usualmente opera con moneda extranjera, Asoban mantiene la posición de que las disposiciones legales referidas a la creación y reglamentación del IVME deben ser revisadas.