YPFB activa un plan para mitigar derrame de crudo
La empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y Repsol activaron un plan de contingencia para mitigar los impactos ambientales tras la ruptura del oleoducto que va desde el Campo Monteagudo a la Estación Cerrillos.
Según la empresa estatal, se trasladó al lugar personal de Seguridad y Medio Ambiente y la Brigada de Control de Derrames, se cerró la válvula del oleoducto más cercana al tramo afectado, se hicieron diques de contención, se instaló un turril para evitar una posible caída del petróleo al suelo, se realizó el monitoreo de gases en el área afectada y se recuperó el suelo contaminado para trasladarlo a una fosa de empetrolados.
La ruptura del oleoducto en Monteagudo fue ocasionado por un derrumbe en el lugar a raíz de las precipitaciones pluviales. Según el informe oficial de Repsol, el área de afectación es de 90 metros cuadrados y el derrame de petróleo se cuantifica en aproximadamente 10 barriles, de los cuales se recuperó 2,5 barriles con paños absorbentes.
El informe señala que el “incidente menor de derrame”, no afectó a personas y tuvo una mínimo impacto para el medio ambiente. Se realizaron recorridos por el área y hacia el riachuelo cañón abajo para verificar manchas de petróleo, sin encontrarse evidencias de afectación.
Horas antes, el gobernador de Chuquisaca, Esteban Urquizu, confirmó el derrame. “Este ducto correspondería a la empresa Repsol para todo lo que es el daño al medio ambiente, al agua de ríos abajo. Se hace la inspección correspondiente. Además, nos informaron que están afectadas tres comunidades”, dijo.
Por su parte, el director de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Gobernación de Chuquisaca, Basilio Vargas, informó que los técnicos de la empresa Repsol mitigaron el derrame de petróleo, en la quebrada de Pital de la comunidad Cerrillos, en Monteagudo.
Mientras que Repsol aclaró que, cuando ocurrió el incidente, no se estaba bombeando petróleo. “El petróleo derramado por la rotura es petróleo que queda en la línea (oleoducto). El derrame afectó el suelo y no a ninguna quebrada”, añade el informe.
Actualmente, se estudia la integridad del oleoducto para ver si es posible la habilitación del mismo.
Como alternativa, se considera el traslado del petróleo en cisterna. Asimismo, se informó que en el campo existe capacidad para dos semanas sin bombear el producto.
ADVIERTEN CON MEDIDAS SI SE VERIFICA DAÑOS MAYORES
El director de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Gobernación de Chuquisaca, Basilio Vargas, indicó que si se constata que el derrame de petróleo fue mayor, se asumirán acciones legales en contra de Repsol, incluso se recurrirá al Ministerio de Medio Ambiente y Agua.
“Se hizo el recojo del petróleo a unos reservorios de una geomenbrana, o sea, se mitigó el derrame ocurrido en Cerrillos, el derrame no es significativo; esta acción se efectuó el domingo, un día después de la ruptura del ducto que bombea petróleo del campo Piraimiri a Cerrillos”, señaló a ABI.
En declaraciones anteriores, el Gobernador de Chuquisaca, Esteban Urquizu, también advirtió sobre acciones legales que se asumirían desde esa instancia si se verificaría afectación a poblaciones o cursos de agua.
En agosto de 2015, una pala cargadora rompió el Oleoducto Carrasco Cochabamba (OCC) y provocó el derrame de 400 barriles de crudo sobre el río Magariño, en la comunidad de Ivirgarzama, según el reporte oficial de Yacimientos Petrolíferos Fiscales de Bolivia (YPFB). En ese entonces, se verificó que el derrame afectó a tres viviendas y un río cuyo cause atraviesa por el centro poblado de Ivirgarzama. La reacción ante el hecho fue inmediata.