Fleur de Lune, exquisito regalo dentro de otro regalo
Llegó septiembre, mes de la primavera, y Fleur de Lune aparece como una flor de emprendimiento. Se trata de un equipo de profesionales que trae consigo una oferta de arreglos florales, con creaciones originales y personalizadas y cuya presentación casi siempre asemeja “un regalo dentro de otro regalo”.
De la mano de Cecilia Sainz (ingeniera comercial), Brisa López Videla (marketing y logística), Pamela Prudencio (diseño gráfico) y Gabriel Eduardo (ingeniería de finanzas), el emprendimiento nació en 2005 con el aporte profesional de todos los miembros del equipo.
Inicialmente atendía sólo pedidos por teléfono o por Facebook, pero sus creaciones fueron ganando tal demanda, que actualmente cuenta con un punto de atención en Cochabamba, además de haberse abierto sucursales, mediante sociedades, en Santa Cruz y La Paz. Actualmente, esta última funciona bajo la modalidad de franquicia, que es justamente lo que la empresa busca promocionar. Por ello, pone especial énfasis en sus forma de atender y en las creaciones, para así conservar la imagen de la empresa.
¿Y las creaciones? ¿Y el regalo? Fleur de Luna parte del principio de la que la presentación debe ser original, distinta a la de los arreglos, personalizados y con un regalo incluido, que puede ser el mismo envase. Por ello, estos soportes no son descartables, sino que pueden constituirse en otro regalo. Por decir, se utilizan como envases de las flores una taza para un oficinista, una canastita para llevar cosas, o una mochila, que puede quedar como algo duradero una vez que se marchiten las flores, que son más efímeras. "Se trata de un regalo más duradero", explican Cecilia y Brisa, mientras trabajan un nuevo arreglo
Algunas de estas ideas fueron copiadas por otras florerías. Algo inevitable si las creaciones se publican en Facebook. De todos modos, los emprendedores están felices de ser ellos los imitados y no al revés. Otro aspecto que les da cierta satisfacción es que las imitaciones no logran alcanzar a la original.
Para las creaciones, se emplean flores locales, entre las que sobresalen lisianthus, claveles, lirios, rosas, gerberas, adquiridas sobre todo del valle bajo cochabambino (Quillacollo, Bella Vista, Tiquipaya y otros de la zona), pero además se tienen las flores de temporada más internacionales, como los girasoles, orquídeas o tulipanes, estos últimos traídos desde Chile. Otras variedades, como las hortensias, se traen desde La Paz, a través de la sucursal en esta ciudad. Por el contrario, de Santa Cruz, se proveen de las flores tropicales, pero en muy poca proporción. "En realidad, es más lo que mandamos de aquí a Santa Cruz", explica Cecilia.
Lo habitual, sin embargo, es que cada una de las sucursales atienda las demandas de la ciudad en la que se encuentran. Los pedidos se hacen por teléfono (el tradicional o por smartphones) y los arreglos se tienen listos en 20 minutos.
El arreglo más económico va desde los 15 bolivianos y, hasta la fecha, el más caro, ha sido un arreglo de 1.700 bolivianos, un caso de 300 rosas en un gigante balde de madera, destinado a un pedido de mano. De todos modos, el equipo suele trabajar en una sintonía entre la demanda y su creatividad.
"Los envases pueden ser una tacita, un recipiente o una mochila".
CONTACTOS
La empresa se llama Aunom de la Fleur de Lune SRL (en francés, algo así como "A nombre de la flor de luna") y la marca es Fleur de Lune.
Según refieren los emprendedores, el nombre se les quedó después de visitar Suiza, vivir allá durante 10 años, y conocer esa flor blanca, que, según dicen, florece una vez al año.
Por ello, la empresa busca reflejar en sus creaciones un toque europeo, y que se trata de algo único, original y especial.
En Cochabamba, la tienda está ubicada en la avenida Melchor Urquidi, entre Uyuni y Portales.
Los teléfonos para atención, pedidos y consulta son 4036281, o en facebook f/fleurdelune y en Twitter, @fleurdelunebolivia.