Fiscalía investiga desastre en Alalay
La Fiscalía investiga de oficio las causas del desastre ambiental en la laguna Alalay que provocó la mortandad de miles de peces y decenas de aves a causa de la disminución del nivel de oxígeno del agua y la proliferación de microalgas tóxicas, informó el fiscal departamental, Evert Veizaga.
“Hay una investigación abierta hace dos semanas”, dijo y explicó que la averiguación está en una etapa preliminar. Por el momento se están solicitando documentación a varias instituciones y afirmó que será una investigación compleja.
Antes de la investigación, la Fiscalía recibió dos solicitudes para el inicio de proceso. La primera el 17 de marzo del concejal del MAS, Sergio Rodríguez, por presunta malversación de fondos e incumplimiento de deberes. La segunda por una abogada el 5 de abril.
El concejal dijo: “No es una acusación, pongo en conocimiento del Fiscal Departamental la Ley Nacional 3745, fotografías de los peces que se sacaron, también el recorte de presupuesto 2015 y 2016. Le pido que en caso que no haya ninguna denuncia se inicie la investigación de oficio”.
La segunda solicitud considera que el exalcalde Edwin Castellanos no tiene responsabilidad en el desastre y argumenta que la crisis se debió a factores como: la falta de guardias ambientales durante 10 meses, la demora en la contratación del coordinador del Comité de Mejoramiento, Recuperación y Protección de la Alalay (Crempla), la falta de control hidráulico de las compuertas para el ingreso de agua del río Rocha y los tres incendios de totorales.
Pero, además, considera que hay indicios de malversación de fondos porque no se ejecutó el plan de manejo y ahora se invertirán 4 millones de bolivianos en un plan de emergencia. Así como la adjudicación de una consultoría.
La Alcaldía informó la anterior semana que la contratación de la consultora quedó sin efecto. Ante la consulta que realizó Los Tiempos al municipio ayer, el secretario ejecutivo, Álex Contreras, pidió tiempo para tener el informe de la Dirección de Madre Tierra.