Obama abre nueva etapa en las relaciones con Cuba y Argentina
La visita que realizó el presidente de EEUU, Barack Obama, a Cuba y Argentina es catalogada por algunos analistas de positiva y por otros de “claros oscuros” al haber logrado profundizar las relaciones con los dos países que hasta hace poco eran consideradas irreconciliables.
La histórica visita del presidente de EEUU a Cuba, la primera en 88 años, es un paso más para normalizar unas relaciones rotas, inamovibles y heladas desde hace décadas.
Obama llegó a una isla aún “comunista”, pero que durante estos 15 meses, desde que se restableciera la relación entre La Habana y Washington, se encuentra en un proceso de actualización económica social, donde el país que hasta hace poco era su principal enemigo se empieza a ver como un socio más que comercial.
En este clima de apertura y de normalización de las relaciones bilaterales quedan todavía viejas y profundas heridas que ambos países tendrán que cerrar, indicó el analista político Roberto Covarrubias Núñez.
Un deshielo que comenzó en diciembre de 2014 y que, pese al viaje de la familia Obama, y a las buenas palabras que se dirigen de uno y otro lado, depende todavía de muchos gestos, pero sobre todo de dejar a cero las cuentas pendientes entre ambos países.
“Para consolidar las relaciones bilaterales, el Gobierno cubano insiste que se levante el bloqueo económico sobre la isla que lleva más de 50 años, y la devolución total de la base naval de Guantánamo”, indicó Covarrubias Núñez.
El Gobierno cubano ha insistido a lo largo de este último año en que el proceso de retomar las relaciones diplomáticas no podrá completarse hasta que EEUU levante el embargo y devuelva el territorio que ocupa la base naval en “contra de la voluntad” de la isla, según un reciente editorial del diario “Granma”.
Sin embargo, EEUU no ha dado ninguna señal, de momento, de estar abierto a retornar el terreno.
“No hay ningún plan, ninguna conversación de la que yo sea consciente”, aseguró el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, hace unas semanas sobre Guantánamo, que acoge desde hace 14 años el penal de alta seguridad para los detenidos por terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Por su parte, el experto en América Latina del Instituto Cato de Washington, Juan Carlos Hidalgo, consideró que la visita “significa el clímax” en el proceso de deshielo del último vestigio de la Guerra Fría que quedaba en la política exterior estadounidense, algo que habría sido impensable hace tan solo dos años.
Sin embargo, Cristian Rojas, profesor del Programa de Ciencias Políticas Universidad de La Sabana (Colombia), tiene dos lecturas simples y extremas puede tener la llegada de Obama a La Habana.
La primera, ve la apertura hacia una primavera económica y democrática en Cuba, la segunda cree que se trata de la legitimación del régimen de los hermanos Castro (Raúl y Fidel) por parte de un presidente que simpatiza con el viejo socialismo.
En realidad, la visita de Obama a la isla no puede entenderse como la persistencia de una ortodoxia marxista a la cubana, pero tampoco como la llegada de la democracia liberal tras 57 años de gobierno revolucionario.
A FAVOR DE LIBERTADES DEMOCRÁTICAS
Obama habló también a favor de las libertades democráticas y se reunió con opositores que reconocieron su mensaje, aun cuando algunos hubieran preferido una posición más contundente frente al Gobierno cubano en materia de derechos humanos.
“Él pidió democracia, derechos humanos, libertades, de una forma muy diplomática. A nosotros nos hubiera gustado que fuera más directo”, señaló a la AFP Guillermo Fariñas, premio Sajarov 2010.
El disidente José Daniel Ferrer consideró que pese a los llamados de Obama, el Gobierno de Castro hará “oídos sordos”.
Por su parte, Elizardo Sánchez, de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, opinó que Obama dejó una muy buena impresión en los cubanos.
AIRE FRESCO SIN CONSECUENCIAS EN CUBA
El Barack Obama bonachón que proclamó el fin de la Guerra Fría encandiló a muchos cubanos, pero otros vieron a un adversario seductor: el efecto Obama tendrá pocos efectos en la vida diaria, aunque ya logró agrietar la opinión monolítica en la isla.
Con su mensaje de reconciliación y de cambio, Obama se acercó a una población cubana que por generaciones escuchó hablar pestes de la mayoría de los mandatarios estadounidenses.
Y lo hizo con una desenvoltura y un manejo de la comunicación que hasta la prensa oficialista tuvo que reconocerlo, reseñó la AFP.
“La visita de Obama a Cuba fue una clase magistral de marketing político al cual estamos muy poco acostumbrados los cubanos”, afirmó el miércoles la televisión estatal en un editorial sobre la visita.
“¿Logró despertar simpatía dentro del pueblo cubano? Ése no es el objetivo de este análisis”, concluyó.
La prensa estatal y un sector de la población, en cambio, pusieron el foco en las acciones de EEUU para normalizar las relaciones después de que estuvieron rotas por más de medio siglo.
Obama “es un hombre que tiene un hablar muy bonito, pero al final son palabras. Otra cosa es la realidad, definitivamente Obama llegó y se fue de Cuba y el bloqueo sigue allí”, cuestionó Estrella Mora, jubilada de 61 años.
El mandatario estadounidense, que extendió una “mano de amistad” a Cuba y proclamó que su visita enterraría los “últimos vestigios de la Guerra Fría”, no tuvo mucho más que ofrecer después de que en el último año su Gobierno alivió algunas restricciones del embargo.
El castigo económico que “hiere” a los cubanos, según describió Obama, sólo puede ser levantado por el Congreso de mayoría republicana, pero las autoridades insisten en que el mandatario podría hacer más para minimizar su impacto.
“Cuando entró a la presidencia yo dije: me parece que ese mulatico va a ser el perfecto para que nos quite el bloqueo. Ahora espero que lo que él dijo sea realidad”, dijo Marielena Cabrera, ama de casa de 68 años.
Cuba reclama indemnizaciones por los “daños económicos y humanos” del embargo que EEUU le impone. Según el informe Cuba vs. Bloqueo, Cuba cifra en 121.192 millones de dólares en precios corrientes los daños totales que atribuye al embargo desde la década de los 60.
Datos: Agencias e Internet