Scotland Yard descarta el móvil terrorista en el ataque en Londres
Londres |
La Policía británica descarta por el momento la pista terrorista en el ataque de un hombre que agredió a cuchilladas a varias personas en el centro de Londres y mató a una estadounidense.
“Hasta ahora no se han encontrado pruebas de radicalización ni nada que sugiera que el hombre que tenemos bajo custodia estuviera motivado por el terrorismo”, dijo el jefe adjunto de la Policía de Londres, Mark Rowley.
El autor del ataque el miércoles por la noche en Russell Square, una plaza del centro de Londres, es un hombre de 19 años de nacionalidad noruega y origen somalí y actuó de manera “espontánea” y “al azar”, según la policía.
Además de la mujer fallecida, que tenía unos 60 años, resultaron heridas cinco personas de nacionalidad australiana, estadounidense, israelí y británica. Sólo dos seguían en el hospital ayer por la mañana.
“Todo el trabajo que hemos hecho hasta ahora apunta cada vez a que este trágico incidente fue provocado por problemas de salud mental”, dijo Rowley tras los interrogatorios al detenido y a su familia.
Durante la noche, la Policía habló en un primer momento de la posibilidad de un atentado de carácter “terrorista” como los que han tenido lugar recientemente en Francia y Alemania.
“Este ataque provocará preocupación”, reconoció el responsable de Scotland Yard, y anunció un aumento de las patrullas policiales en la capital británica.
El sospechoso fue neutralizado con un “taser”, una pistola eléctrica. Primero fue llevado al hospital y luego a un centro de detención del sur de Londres.
Por su parte, un portavoz de la Policía noruega dijo que el presunto autor del ataque salió de Noruega en 2002, según el registro.
“Estaba comprando una cerveza y de pronto oí una mujer que gritaba y corría detrás de un hombre. Creía que le habían robado el bolso, había más gente”, explicó Xavery Richert, un turista francés de 22 años que duerme en un albergue de juventud de la plaza.
El domingo, el jefe de la policía de Londres, Bernard Hogan-Howe, ya había advertido de la posibilidad de un ataque en el Reino Unido.