Evacuan a miles de personas ante inundaciones por Harvey
Houston y Washington |
Las autoridades de un condado cercano a Houston (EEUU) alertaron ayer de que dos embalses de la zona se han desbordado por las lluvias torrenciales de la tormenta Harvey y ordenaron a los vecinos que evacuen inmediatamente la zona, en una jornada en la que el presidente Donald Trump visitó la zona.
En su cuenta de Twitter, el condado de Brazoria avisó que los embalses de Barker y Addicks habían alcanzado sus niveles máximos de capacidad y se estaban desbordando, por lo que los vecinos de la zona debían abandonar sus hogares inmediatamente.
Por el momento, las autoridades locales han confirmado la muerte de una decena de personas, al menos seis de ellas en los alrededores de Houston, la cuarta ciudad más poblada de EEUU y donde las lluvias han provocado “catastróficas inundaciones” y miles de personas aún tienen que ser rescatadas.
La última víctima confirmada es un policía de Houston, de 60 años, que se quedó atrapado en su vehículo en la madrugada del lunes cuanto trataba de llegar al trabajo.
La Cruz Roja informó además de que 17.000 personas pasaron la noche en albergues en el estado de Texas a causa de las inundaciones que afectan al sur del estado.
El jefe de policía de Houston ha explicado en rueda de prensa que, hasta ahora, las autoridades han rescatado a 3.500 personas sólo en Houston, por lo que el desbordamiento de las presas podría incrementar esa cifra de rescates.
Un meteorólogo encargado de asesorar al condado de Harris, al que pertenece Houston, afirmó que el aumento del nivel del agua en los embalses es “algo que nunca se ha visto antes”.
El nivel del agua de la presa de Addicks, localizada a unos 31 kilómetros de Houston, ha superado su límite en 33 metros por primera vez en la historia, lo que supone una amenaza inmediata para las áreas residenciales y los parques que rodean el gigante embalse.
Desde el lunes por la noche, las autoridades trataron sin éxito de contener el agua de los embalses, abriendo sus compuertas para dejar salir el agua.
TRUMP CALIFICA DESASTRE
El presidente de EEUU, Donald Trump, y su mujer, Melania, llegaron ayer a Corpus Christi, en Texas, donde se reunieron con organizaciones de ayuda a las víctimas.
El avión presidencial, el Air Force One, aterrizó al mediodía en el aeropuerto de esta ciudad situada a unos 350 kilómetros al suroeste de Houston.
La pareja presidencial se desplazará luego a la ciudad de Austin, más al norte del estado.
Trump aseguró que los efectos de Harvey han alcanzado proporciones “épicas”.
“Nunca nadie ha visto algo como ésto y sólo quiero decir que ha sido un honor para nosotros trabajar con el Gobernador y con todo su equipo”, señaló el Presidente.
Dijo que aún no quería felicitar a nadie, pero expresó su deseo de que la respuesta a Harvey sirva como guía para saber cómo actuar ante nuevas catástrofes naturales.
HURACÁN ESTANCADO EN TEXAS
Según el Centro Nacional de Huracanes, Harvey podría realizar un segundo impacto en tierra entre hoy y el jueves a lo largo de la frontera entre Texas y Luisiana, donde ya se preparan para enfrentarse a posibles inundaciones.
Los científicos consideran que el extraño comportamiento de Harvey está contribuyendo a que se haya convertido en una de las tormentas tropicales más graves de los últimos años.
“Parece moverse muy lentamente y no se aleja, como normalmente ocurre con las tormentas de este tipo (…) Simplemente se está quedando”, explicó la portavoz de la Organización Meteorológica Mundial, Claire Nullis.
Su recorrido inicial, desde que se formó en el Caribe hasta que llegó al golfo de México, es el común para muchos ciclones.
“Se restableció en las aguas cálidas del golfo y tomó rumbo a Texas como se preveía”, explicó a la BBC.



























