Hallado vivo tras 60 horas del accidente
"No comí nada, nada; sólo bebí mi orina cuando tenía sed. La primera noche dormí en el avión, y las otras dos noches en plena selva.
He vuelto a nacer", relató Minor Vidal Huerta, el único sobreviviente del avión siniestrado el martes pasado con nueve ocupantes a bordo en inmediaciones de la Laguna Brava, distante a 10 kilómetros de Trinidad, en el departamento de Beni.
Recordó que estuvo medio día encerrado, tirado dentro del avión, sin poder salir. “Sentía que tenía las costillas rotas” y, a pesar de que estuvo a punto de desmayarse, se dio "modos para salir". "Abrí un hueco, pero mi costilla y mi pecho no me dejaban salir.
Poco a poco, arrastrándome, comencé a salir", rememoró, y agregó que en ese momento se dio cuenta de la magnitud de la tragedia.
“Todos los demás estaban muertos”, dijo.
Vidal, de 38 años, fue rescatado ayer por una patrulla militar después de 60 horas del siniestro y un día después de que se hallara el avión CP 2548 de la empresa Aerocon accidentada cuando hacía la ruta Santa Cruz-Trinidad y a ocho de sus ocupantes sin vida (dos tripulantes y seis pasajeros, dos de ellos extranjeros). Las causas del siniestro aún no se conocen, aunque se atribuye a falta de visibilidad por humo.
Encontrado
Agitando una polera negra en una orilla de la laguna Rossendy, Minor logró que la patrulla militar lo viera y en ese momento -según los rescatistas e imágenes difundidas por la televisión- se arrodilló y levantó las manos al cielo para dar gracias a Dios por estar vivo.
Las lágrimas y abrazos de alegría de familiares del empresario chuquisaqueño, al conocer la noticia de su hallazgo con vida, contrastaron con el dolor y desconsuelo que se vivió en el aeropuerto de la capital beniana la jornada anterior.
Para el capitán David Bustos, comandante de los Diablos Azules, cuyos efectivos realizaron el rescate, la odisea de Vidal Huerta fue obra de "un milagro", pero también de sus "increíbles ganas de vivir".
“¡Yo sentía que estaba vivo!”, fue una de las primeras frases de la mamá de Miror, Nora Huerta, al conocer la noticia.
Rodeada de las hermanas Minor, entre lágrimas, no se cansaba de agradecer a Dios y manifestar que era un milagro porque el joven es un devoto de la Virgen de Guadalupe. “Para nosotros es volver a nacer. La felicidad es inmensa. Han sido momentos muy difíciles”, dijo Marlene, una de las hermanas.
Su esposa, Mariela Llanos, declaró a su vez: "Estoy feliz porque mi esposo está de vuelta, es el único sobreviviente, que por el carácter y el coraje que tiene, ha podido salir de este desastre".
Minor Vidal deambuló por el monte durante casi tres días, con un pulmón perforado, una herida en la cabeza y múltiples contusiones. Pasado el mediodía, se le sometió a una cirugía en el hospital de Cossmil en Trinidad.
"Las condiciones de salud hasta el momento son alentadoras, tiene un pronóstico vital bueno y con el procedimiento quirúrgico estará mucho mejor. Él sufrió policontusiones y un poco de deshidratación, pero sin embargo mantuvo la capacidad vital a través de la ingesta de su propia orina", informó el médico Fidel Silva.
Los representantes de Aerocon confirmaron que a petición de los familiares, hoy en horas de la mañana, Minor será trasladado a Cochabamba, pero que aún no se tenía definido el centro médico donde será internado para continuar con el tratamiento médico hasta su total recuperación.
Momento fatal
"No entendía por qué el avión volaba tan bajo. Luego hubo un fuerte golpe. No recuerdo más. Cuando desperté vi partido al avión.
No podía moverme, permanecí en mi asiento, que estaba en la parte trasera del avión. Al día siguiente (miércoles) salí y con mi sangre hice una flecha en una polera para que me busquen. Todos los pasajeros estaban muertos. Caminé día y noche hasta ser hallado por la patrulla", relató.
Vidal fracasó el jueves en su intento de ser rescatado con vida. "Unos pescadores me vieron, agité mi brazo varias veces, ellos me respondieron y se fueron. Seguro que pensaron que yo les saludaba. Ante ese hecho quise cruzar a nado la laguna. No podía porque tengo un terrible dolor en las costillas", expresó.
"Había fuego, había un olor a combustible, todo me daba miedo, y lo peor es que yo no escuchaba a nadie, pedía ayuda a gritos, comenzaba a gritar para ver si había alguien, pero toditos murieron", dijo, al recordar el tremendo miedo que lo embargó cuando comenzaron a arder los motores.
"A un principio, dentro del avión -prosiguió-, yo no veía nada, escuchaba gritos de la gente. Comenzaban a desesperarse, pero en ese momento todos se quedaron callados, yo quería hablarles, decirles que tengan fe en Dios, que Dios nos va a ayudar, pero todos se quedaron callados...".
Vidal Huerta dijo que esos momentos fueron "horribles", porque "no veía nada, no veía a nadie", y recién, al día siguiente, se dio cuenta de la magnitud de la tragedia, al ver que todos sus compañeros de viaje habían muerto. Cuando logró salir del aparato, vio "gente desparramada".
¡Ucha! -exclamó ante los periodistas de la televisión-, "¡han debido ver como el avión está hecho añicos!".
Gobierno
La ministra de Defensa, Cecilia Chacón, quien estuvo en los operativos desde el miércoles, informó la tarde del jueves tras el hallazgo de la nave y de ocho de sus ocupantes, que no había sobrevivientes del accidente, al igual que la Dirección General de Aeronáutica Civil, mediante un comunicado, dando por muerto al noveno ocupante (Minor Vidal) que estaba desaparecido.
Luego del rescate de Vidal con vida, la Ministra aseguró que el Gobierno ofrecerá toda la ayuda necesaria al único sobreviviente y a los familiares de los restantes ocho ocupantes de la aeronave que perdieron la vida.
Los ocupantes que fallecieron en el accidente aéreo son Eddy Martínez (dirigente indígena de la etnia chiquitana), Sergio Marañón, Joaquín Gutiérrez, Daniel Montenegro, Willam Lara (ecuatoriano) y Óscar Valencia (colombiano). El piloto de la nave que también murió es el capitán Santiago Román, al igual que el copiloto Mauricio Vlahovic.