Histerectomía Laparoscópica
EL TIEMPO DE RECUPERACIÓN DE ESTE PROCEDIMIENTO, ES MENOR QUE EL DE LA CIRUGÍA ABDOMINAL |ES IMPORTANTE QUE LA PACIENTE EVITE CIERTOS ESFUERZOS.
La histerectomía consiste en la extirpación del útero y ésta se puede realizar en cuatro circunstancias en general: procesos benignos, procesos malignos, complicaciones obstétricas que pongan en riesgo la vida de la madre y procesos inflamatorios infecciosos, explica el Dr. Ronald Aparicio Yuja, Ginecólogo Obstreta de la Clínica Los Olivos.
El procedimiento radical, es decir amplio, en que se incluyen parametrios, ganglios linfáticos, y manguito vaginal (al menos 3 cm de vagina), se reserva para procesos malignos. La histerectomía total o subtotal (cuando se incluye o no el cuello del útero, respectivamente) se reserva para todos los demás procesos.
Afortunadamente este procedimiento se lo puede realizar por laparoscópica, que a diferencia de la cirugía abdominal, es mínimamente invasiva. Se realiza con un instrumento quirúrgico denominado laparoscopio, que tiene en una cámara pequeña conectada mediante fibra óptica a un monitor y que cuenta con una luz en su extremo, lo que permite al cirujano observar el interior de la cavidad abdominal sin la necesidad de una cirugía abierta. Gracias a esta mínima invasión la paciente se beneficia en el tiempo de recuperación que es menor y al no tener una herida quirúrgica de tamaño relativamente importante.
“Este procedimiento dura, en un proceso benigno, menos de una hora y en procedimientos radicales alrededor de tres horas”, explica Aparicio.
El especialista asegura que en Los Olivos basados en su experiencia, la paciente luego del procedimiento debe permanecer entre 12 y 24 horas y luego se le da de alta.
BENEFICIOS
El Dr. Aparicio asegura que por vía laparoscópica en relación a la cirugía abdominal se tiene muchas ventajas:
- Menor lesión de la pared abdominal (se realiza mediante pequeñas incisiones 4 a 5 en total, en el abdomen. Una de 1 cm y las demás de 5 mm)
- Menor dolor post operatorio
- Menor sangrado durante el procedimiento, menor riesgo infeccioso.
- Mucho mejor visión de la anatomía
- Alta hospitalaria precoz (entre 12 y 24 hrs)
- Reinserción a las actividades cotidianas (laborales o no) mucho más rápida
- Menor tiempo operatorio
En cuando a las complicaciones que puede tener este procedimiento, el especialista asegura que afortunadamente son raras, pero sí pueden presentarse al igual que en las que se realiza a cirugía abierta: sangrado, lesión de vía urinaria, infección, pero en menor proporción que en la cirugía abierta.
“En ciertos casos, luego del procedimiento, la paciente debe tomar medicamentos para sustituir las hormonas que los ovarios producían, pero si no se retiran los ovarios durante el procedimiento la paciente no requiere ninguna terapia de sustitución”, dice el especialista a tiempo de asegurar que sí hubiesen sido removidos por alguna razón médica, se debe valorar primero sí la razón de su remoción fue debida a un proceso benigno o maligno, y ahí el especialista recién decidirá si se inicio o no la Terapia hormonal de reemplazo.
CUIDADOS POSTOPERATORIOS
Si bien el especialista asegura que no se requiere ningún cuidado especial cuando se utiliza esta técnica, es también recomendable que la paciente una vez que ha sido dada de alta se reincorpore a sus actividades poco a poco y siga siempre las recomendaciones de su médico.
La vuelta a las actividades cotidianas se puede realizar de manera progresiva al cabo de los tres días después del alta, aunque siempre evitando esfuerzos en la zona abdominal, ya que podrían causar dolor o problemas. A los siete días, la paciente ya puede volver a trabajar, dice Aparicio.
Es importante no olvidar tomar los medicamentos (analgésicos o antibióticos) que el médico le haya recetado y cuidar la pequeña incisión.
Se deben suspender las relaciones sexuales luego del procedimiento hasta que su médico las autorice nuevamente.
Cualquier duda consulte con un ginecólogo.
