Una nueva investigación, realizada en la Universidad de la Columbia Británica de Canadá y publicada en 'Frontiers in Cellular and Infection Microbiology', pone en entredicho la antigua suposición de que el microbioma intestinal de un bebé está formado principalmente por el microbioma vaginal de su madre y muestra que la composición del microbioma vaginal de la madre no afecta significativamente al desarrollo del microbioma del bebé.