Experiencias y temores de los vecinos que viven cerca de puentes
Las historias que se registran bajo los puentes de Cochabamba parecen de otra realidad, los protagonistas son los inhaladores de clefa, los adictos a la droga y los transeúntes que en su mayoría están obligados a pasar por ahí, pero además los vecinos.
Hace más de un año, era normal escuchar hablar de drogas, robos, peleas y hasta de armas de fuego en cercanías de los puentes Antezana y Recoleta.
Los vecinos valoran que bajó la delincuencia en estos lugares, gracias al patrullaje y operativos que realiza la Policía y también la Guardia Ambiental del municipio.
“No hay caso de quedarse hasta tarde, da miedo”, dice Rafael, un artesano que trabaja en cercanías del puente Antezana. “A partir de las 20:00 es silencio, todas las tiendas se cierran temprano”, agrega.
“Antes era peor, ahora ya no hay muchos “cleferos” por el puente, pero aparecen nuevamente cuando hay caos vehicular en la zona, no sé de dónde salen”, se pregunta.
Respecto a las historias que se cuentan sobre estos lugares, Rafael, con cierta reserva, dice: “Yo no he visto, pero me han contado que un brasileño le ha matado a un inhalador de clefa porque no le ha querido vender droga, muchos cuentos hay”.
Otro vecino, a sus de 76 años de vida, recomienda caminar con mucha precaución por el puente Antezana y, por supuesto, por otros lugares de la ciudad. “No me puedo olvidar que hace mucho tiempo me han atracado en la calle y me han disparado, vivo con una bala en mi cuerpo”, contó don Gabriel, para él una triste experiencia cuando casualmente transitaba por el mencionado puente.
Después de varias experiencias amargas, Sebastián Gonzáles, un residente brasileño en Cochabamba y dueño de un restaurante en la avenida Santa Cruz, no se guarda nada y relata que antes era muy peligroso, porque había muchos cleferos por ese lugar, vendían drogas, cosas robadas y también tenían armas debajo del puente. Ahora no hay muchos, porque la Policía los retira.
“Se han entrado a mi restaurante tres veces, se han robado mis garrafas, cocinas, equipos de sonido y muchas cosas más”, lamentándose, dijo que no podía hacer nada al respecto.
“También han robado en el otro restaurante de a lado (…), he visto que jalaban la cartera de las chicas, les arrastraban, robaban celulares y se entraban debajo del puente”, concluyó.
Hace un año aproximadamente ha cambiado el panorama, la Policía y la Guardia Ambiental ya no les dejan asentarse en los puentes, relató la señora Natalia, propietaria de una tienda de barrio del lugar.
“A mí no me dejaban vender, venían a decirme, regálame agüita, comidita, regálame pancito, si no les daba, me lanzaban con piedras”.
Doña Natalia contó que hace un par de años se entraban permanentemente a su tienda a robar, por lo que se vio obligada a poner protectores de fierro en la parte del techo.
“Una vez, la vecina del frente me llamó en la madrugada, aproximadamente a las tres, para decirme que se estaban entrando a mi tienda, hasta que salga ya se habían escapado”.
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PLAN POLICIAL
Salvemos a nuestros hermanos de la calle
La gestión pasada, el PAC implementó el plan denominado: “Salvemos a nuestros hermanos de la calle”, que consiste en evitar que las personas terminen en la calle o debajo de los puentes.
“La Policía cumple con su trabajo pese a sus limitaciones, pero las otras instituciones que también tienen roles con esta población, no lo hacen”, manifestó Nelson Orellana, director de la Policía de Ayuda Ciudadana (PAC).
El plan también ha conformado un comité que reúne a varias instituciones para que pueda realizar acciones, desde sus competencias, para combatir la problemática de personas en situación de calle, sobre todo de los menores de edad.
De acuerdo al último censo de esta población, las personas en situación de calle serían aproximadamente 950.
Además, autoridades locales y departamentales firmaron un convenio para la construcción de la infraestructura multimodal para la atención de niños en situación de calle y drogodependencia que será implementado en el municipio de Capinota en un plazo de 520 días, a partir de la orden de proceder. La inversión es de 30 millones de bolivianos.
OPINIONES
" Se han entrado a mi restaurante tres veces, han robado garrafas, cocinas, equipos de sonido y otras cosas. He visto que jalaban carteras, robaban celulares y se entraban debajo del puente”.
Sebatian Gonzales
Residente brasileño
"Hay que caminar con mucho cuidado por el puente Antezana y también por otros lugares. A mí me han atracado y me han disparado, vivo con una bala en mi cuerpo hace varios años”.
Gabriel
Transeúnte
"La Policía cumple con su trabajo de patrullaje en las calles y los puentes, pese a nuestras limitaciones, las otras instituciones no cumplen con el rol que tienen con esta población”.
Nelson Orellana
Director del PAC