El VIH/sida sigue una tendencia incontenible y toca más al trópico
El VIH/sida alcanza este año una de sus mayores cifras desde su aparición hace 34 años y se prevé que supere en un 5 por ciento a los casos notificados el año pasado.
Son al menos 577 vidas que se han visto afectadas este 2018 con un diagnóstico positivo del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Si bien la cifra es similar a la de 2017, no se registra un incremento como el que se dio en 2016, cuando los reportes aumentaron un 40 por ciento.
Hasta el 15 de diciembre pasado, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Cochabamba reportó 577 casos nuevos de VIH/sida.
Se estima que al finalizar el año se llegue a los 600. La cifra representa cerca del 5 por ciento más en relación a 2017, cuando se registraron 590, explicó el responsable de Monitoreo y Evaluación del Programa VIH/Sida del Sedes, Ariel Villca.
Grupos
El 65 por ciento de los portadores son varones, mientras el 35 por ciento son mujeres. Sin embargo, se trata del sector que menos acude a realizarse la prueba rápida del VIH/sida. (Ver infografía ).
“Nos hemos mantenido, pero en 2017 el registro se incrementó hasta un 40 por ciento sobre 2016, porque las personas tienen mayor conciencia y acceso a la prueba rápida”, comentó Ariel Villca.
Expresó que cada vez más personas son conscientes de la importancia de hacerse la prueba del VIH luego de sostener una relación sexual de alto riesgo, además que la misma está cada vez más disponible en los centros de salud de todo el departamento.
Tratamiento
Según el Ministerio de Salud, hay al menos 21 mil personas viviendo con VIH/sida en Bolivia. El primer caso en el país se reportó en 1984.
El 86 por ciento cuenta con un diagnóstico, pero sólo el 48 por ciento realiza el tratamiento médico.
Del total de pacientes en tratamiento, se estima que el 20 por ciento tiene una carga viral indetectable, es decir que cumplió el tratamiento con buenos resultados.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que estos porcentajes no sean menores del 90 por ciento. Esto significa que tiene que haber un 90 por ciento de personas diagnosticadas, la misma cantidad en tratamiento y también con una carga viral indetectable.
La prueba rápida
La información también muestra que la mayor afectación se da en personas entre los 15 y 35 años, pero el acceso a la prueba aún tiene limitaciones para los menores de 16 años.
“Sabemos que existen casos desde los 14 años, por lo que estamos tratando que se mejore el acceso a la prueba rápida. Si un adolescente pide hacerse el análisis, no se le puede negar”, informó Villca.
Explicó que algunos adolescentes señalan que en algunos centros de salud les pidieron la firma de uno de sus padres o de un tutor para hacerse la prueba rápida contra el VIH. Y ahora se quiere evitar que esta situación continúe.
Trópico
Durante 2017, el registro de casos en el trópico de Cochabamba se incrementó en un 300 por ciento.
Según el diagnóstico, buena parte de los pacientes contrajo el virus en relaciones de alto riesgo y en lenocinios clandestinos, debido a que las trabajadoras sexuales habían contraído la enfermedad y los clientes les exigían que no utilicen preservativo.
“Con la desconcentración del servicio de salud en Ivirgarzama se ha consolidado el diagnóstico y seguimiento a personas con el virus”, agregó el responsable de Monitoreo. Dijo: “Este año se tuvo una reunión con la Alcaldía para que mejore los controles en los lenocinios. Desde nuestras competencias, hemos hecho lo que corresponde”.
La desconcentración de los servicios de salud también permite hacer seguimiento a los portadores del virus en el trópico y evitar el abandono del tratamiento retroviral.
Municipios
Aunque el VIH/sida está presente en los 47 municipios del departamento, no todas las alcaldías aportan recursos para la prevención y atención de la enfermedad.
En 2017 se tenían 222 casos positivos en la ciudad, 29 en Quillacollo, 33 en Sacaba, 38 en Puerto Villarroel, nueve en Colcapirhua, 13 en Vinto, cuatro en Villa Tunari y dos en Villa Rivero.
De hecho, un sector vulnerable son los niños, que en su mayoría viven en centros de caridad, donde se les hace un seguimiento del tratamiento.
El primer caso de VIH/sida en Cochabamba se conoció en 1984 y desde entonces los reportes se han ido incrementando con un aumento considerable a partir de 2000.
Gratuita en los centros de salud
La prueba rápida no demora más de 10 minutos y sólo requiere una gota de sangre de un dedo. Se encuentra en la mayor parte de los centros de salud y es totalmente gratuita.
Se debe realizar aproximadamente tres meses luego de una relación sexual de riesgo o una transfusión de sangre. En caso de salir positivo, es necesario un análisis más que lo confirme.
Mujeres embarazadas, las que más se analizan
Más del 50 por ciento de las personas que se hacen la prueba rápida son mujeres embarazadas. Se trata de un requisito en los controles prenatales, pero hay menos detecciones.
Hombres no superan el 20 por ciento
Se trata del sector que menos pruebas se realiza. Esto por el temor a la discriminación y el machismo. Pero son los más vulnerables a este flagelos.
Cochabamba está en tercer lugar
Del total de casos reportados en el país, Santa Cruz tiene el primer lugar con 45,4 por ciento. Le sigue La Paz con el 21,5 por ciento. Mientras, Cochabamba está en tercer lugar con el 19,3 por ciento.
La mayor parte de los registros son en las ciudades capitales, pues concentran mayor cantidad de población, pero hay algunos casos en provincias.
Se necesita la coordinación, Édgar valdez Director IDH
Para mejorar el control del VIH es importante que todos los actores trabajemos de manera coordinada.
En primer lugar está el individuo que debe protegerse al momento de tener relaciones sexuales, ya sea que sea portador del virus o no.
Luego está la familia que no habla de sexualidad. Además, lastimosamente, una mayoría de los familiares de personas con VIH discrimina y rechaza. Entonces, los portadores ocultan su situación y no reciben la medicación.
Se tiene la sociedad civil, en las escuelas donde aún hoy no se habla sobre los riesgos de las enfermedades de transmisión sexual. La gente que discrimina incluso en los hospitales y centros de salud. A esto se suma que vivimos en una sociedad machista.
Finalmente, las autoridades del Gobierno y los diferentes ministerios que no conocen realmente la problemática. No todos, pero una gran mayoría no comprende la importancia social de la enfermedad, pero tampoco coordinan plenamente con la sociedad civil o las organizaciones que trabajamos en la temática y nos gustaría aportar.
Sería importante que se haga una auditoría externa a Bolivia sobre cuántos recursos destina para la prevención y atención del VIH y cuánto recibe del Fondo Monetario Internacional (FMI).