Se tarda 8 minutos más en la Quintanilla en “hora pico”
La circulación de vehículos desde la plazuela Quintanilla hasta el puente de La Recoleta, del centro al norte de la ciudad, puede demorar hasta ocho minutos más que los dos habituales en las denominadas “horas pico” según un recorrido realizado ayer por este lugar y tras la reapertura parcial del corredor que está en plena construcción.
En tanto, el representante de la Asociación de Ingenieros Eméritos de Cochabamba (Asieme), Gonzalo Maldonado, identificó cuatro puntos de conflicto en el proyecto. Ante esto, el equipo técnico del municipio respondió que se toman previsiones.
El mayor congestionamiento comienza a mediodía, a la hora de salida de clases de los colegios Don Bosco y Laredo.
Al realizar el recorrido por este tramo en un vehículo de transporte público con un cronometro encendido se verificó que, para avanzar de la intersección de la avenida Salamanca y la plaza Quintanilla hasta el cine Center y puente La Recoleta, se necesitan ocho minutos; en otras horas o fin de semana, el recorrido se hace en dos minutos.
La situación para el peatón es más complicada aunque existen dos pasos de cebra: uno ubicado en el límite del túnel aún cerrado que permite cruzar de la plaza a la acera del edificio Los Tiempos y otro en la esquina. Sin embargo, ninguno de los pasos se respeta, los vehículos se detienen sobre ellos y una persona llega a esperar más de tres minutos para pasar.
Con motivo de la liberación de vías, pese a las obras del corredor, la Alcaldía instaló un semáforo en la intersección de la Oquendo y Salamanca, que no siempre se respeta.
Además, colocó un rompemuelles antes de uno de los pasos de cebra sin mucho éxito, pues los autos no reducen la velocidad .
Los técnicos del municipio indicaron que se trabaja en planes de vialidad para la apertura total del corredor. De ese modo, se logrará tener un mejor flujo. Mientras, piden paciencia a la población, hasta finalizar la obra.
Observaciones
El presidente de Asieme, Gonzalo Maldonado, realizó un recorrido por la obra junto a este medio de comunicación e identificó cuatro puntos que considera críticos.
El primer punto es en la intersección de la avenida Oquendo con la plaza Quintanilla. Observa que el actual sistema de seguridad del túnel es deficiente.
“Es muy simple, debería estar mejor tapado. Ahora mismo cualquier persona podría entrarse. Se convierte en un problema de seguridad incluso”, dijo .
Además, indicó que en esta zona se debe elaborar un plan que permita conducir apropiadamente el flujo de vehículos cuando se abra el túnel.
“Transitarán autos de la Oquendo, la Salamanca y la Ramón Rivero, entonces hay que ver el modo que se conduzca correctamente a quienes deseen descenderán al túnel”, agregó.
Asimismo, notó que esto podría afectar sobremanera a los estudiantes del Don Bosco, pues se trata del lugar donde el túnel comienza a descender.
Como segundo punto observó el túnel en dos partes. Una es la equina de la avenida Ramón Rivero, pues sale un constante hilo de agua que va a un desagüe. “Esto debería estar resuelto. Se podría bombear al río”, aseveró.
Luego, indicó que la salida generará gran cantidad de vehículos circulando; a éstos se sumarán los que tomen la vía a nivel, por lo que el tránsito peatonal será casi imposible. Además, los autos deberán tomar un puente elevado para no chocar con la vía de este a oeste.
En el trayecto al puente de La Recoleta, un grupo de técnicos se encontró con Maldonado. Le explicaron que, en el caso de los peatones, ahora deberán utilizar la pasarela del cine Center que lleva hasta el Boulevard.
Ante la observación de la filtración en el túnel, los técnicos de la Alcaldía respondieron con prepotencia que esto ocurre siempre y que para la temporada de lluvia tomaran previsiones para que el paso no se inunde.
Maldonado apuntó como otra observación el congestionamiento que se generará en la avenida América y Melchor cuando esté el corredor.
20 meses era el plazo inicial que tenía la empresa para la ejecución de la obra, pero diversos factores llevaron a que este tiempo se amplíe.
EL CORREDOR PODRÍA AUMENTAR DE PRECIO
La obra del corredor vehicular Quintanilla comenzó en octubre de 2017. La empresa encargada de la ejecución es la Asociación Accidental Imesapi POC. El costo inicial se fijó en 97 millones de bolivianos, pero se estima que éste puede incrementarse.
Hasta el momento ha tenido dos contratos modificatorios y se prevé que exista alguno adicional para el presupuesto.
Los concejales cuestionan que hasta la fecha no han tenido acceso al proyecto a diseño final. Además, indicaron que solicitarán un informe oral al Secretario de Infraestructura para que detalle estos aspectos.