Cochabamba, desde la venta callejera en carretillas hasta la industrialización
Una veintena de carretilleras intentan preservar la memoria y tradición culinaria de Cochabamba. La tarea no es fácil, ya que tienen que esquivar y escapar de los guardias de la Intendencia Municipal de Cercado, que tienen la misión de evitar el comercio ambulante en inmediaciones del mercado de La Cancha. Las comerciantes cargan el peso de dos arrobas de chuchusmuti (tarwi cocido) y una enorme barra de hielo que sirve de refrigerante para preservar el tarwi. Las vendedoras pasan hasta seis horas ofreciendo la oleaginosa en baldes de dos a 10 bolivianos.
Frío, calor y hasta maltratos de gendarmes son algunas de las adversidades que deben atravesar cada día en sus largas jornadas laborales. Los funcionarios municipales intentan hacer cumplir la normativa para despejar las vías, pero el tarwi sólo puede ser encontrado en dos puntos sectores de la ciudad de Cochabamba: La Cancha y un par de supermercados de cadena.
“Más venta que antes, porque ahora ya sabe todo lo que tiene el tarwi, conocen un poco más, están más informados por Internet”, asegura Domitila Saavedra, comerciante ambulante de chuchusmuti.
Por su parte, Dominga Quispe, carretillera que trabaja en inmediaciones de La Cancha desde hace 15 años, asegura que la venta del tarwi ha caído de 20 baldes diarios hasta los ocho. Explica que la tradición se ha ido perdiendo por desconocimiento y acción de funcionarios municipales intransigentes a su trabajo.
Industrialización
Un grupo de 30 familias de Cochabamba asumió el compromiso de producir tarwi en los municipios de Colomi y Anzaldo, gracias a un proyecto impulsado por la empresa Panaseri SRL en conjunto con la Fundación para la Promoción e Investigación de Productos Andinos (Proinpa).
Ambas instituciones emprendieron un trabajo de difusión para que se reconozca el valor y ventajas de este alimento y que se incluya en la dieta de los bolivianos.
Asimismo, lograron producir dos productos de valor agregado: Tarwix salado embosaldo y una salsa criolla a base de tarwi.