Muchos bancos ya cumplieron con el crédito de vivienda social y ya no lo ofrecen
La Ley de Servicios Financieros dispone en 2014 que los bancos y entidades financieras mantengan, durante cuatro años, un mínimo del 60 por ciento de su cartera, entre créditos productivos y de vivienda social. El plazo vence esta gestión. En ese sentido, algunos bancos que ya cumplieron la meta, como Fassil y Ecofuturo, ya no los ofrecen. Otros que también cumplieron, como el estatal Banco Unión, continúan ofreciéndolo.
En cambio, la entidad financiera de vivienda (EFV, exmutual) La Primera ofrece el crédito de vivienda a solo 4,49 por ciento de interés, a 30 años plazo, con bajo seguro de desgravamen.
En febrero de 2018, el Ministerio de Economía informó que Unión y Fassil alcanzaron la meta de cartera de crédito productivo y de vivienda social, con un nivel de 67 y 60 por ciento, respectivamente. En cambio el banco Ecofuturo había cumplido con el 56 por ciento y el Banco de la Comunidad se hallaba en 44 por ciento. Al Banco de Crédito le faltaba solo tres por ciento para alcanzar la meta.
El miércoles pasado, en una visita al banco Ecofuturo la persona encargada de informaciones indicó que la entidad ya no brindaban crédito de vivienda social. En cambio, en Fassil indicaron que lo ofrecían, pero sólo a siete años plazo, un tiempo corto con relación a otras ofertas de 25 y hasta 30 años plazo.
En el Banco de Crédito BCP explicaron que sólo las personas que tienen un salario por encima de los 7.000 bolivianos mensuales podrían acceder al crédito.
El analista económico José Gabriel Espinoza indica que la mayor parte de las entidades financieras a estas alturas del año ya cumplió su meta.
El Mercantil Santa Cruz (MSC) culmina este mes su campaña “Desinquilínate”, que ofrece el crédito con el 5,5 por ciento de interés, sin cuota inicial.
En marzo de este año, el Banco Nacional de Bolivia (BNB) sólo cobraba 4,5 por ciento de interés y en febrero ocupa el último lugar en la entrega de estos créditos con sólo 53 por ciento al igual que BancoSol. El mismo reporte señalaba que a otras 10 financieras sólo les falta como máximo siete puntos para cumplir el objetivo.
Datos
Durante el período 2014- 2018, la cartera de crédito de vivienda de interés social llegó a 18.751 millones de bolivianos y benefició a 59.859 familias, informó la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI).
En base a la norma, los créditos de vivienda por un valor máximo de 84.112 dólares tienen una tasa de 5,5 por ciento. Las casas valuadas hasta en 125.344 dólares manejan una tasa de 6,0 por ciento y los inmuebles de hasta 151.732 dólares, 6,5 por ciento de interés.
De esa cantidad, el 61 por ciento (35.522 familias) accedieron a un crédito con una tasa de 5,5 por ciento. El 29 por ciento (16.981 familias) con 6 por ciento de interés y 10 por ciento (6.031 familias) con una tasa de 6,5 por ciento.
Los créditos de vivienda social se incrementaron de 406 millones de dólares en 2014 a 2.665 millones hasta mayo del presente año.
Por objeto de los préstamos, el 51 por ciento se destinó a la compra de una casa, 20 por ciento para adquirir un departamento, 16 por ciento para construcción y el resto para refacción, remodelación o compra de terreno.
Los créditos de vivienda de interés social crecieron en 337,7 por ciento entre 2010 y abril de este año, cifra que representa 5.796 millones de dólares, informó la ASFI.
Hasta noviembre de 2017 con un monto de 6.204 millones de bolivianos, Santa Cruz concentraba 40 por ciento del crédito.
Según la ASFI, hasta esa fecha el valor total del crédito de vivienda a tasa de interés social ascendía a 15.517 millones de bolivianos. Por detrás estaban La Paz con 3.081 millones (20 por ciento), Cochabamba con 2.879 millones (19 por ciento) y Chuquisaca con 1.026 millones de bolivianos (7 por ciento), entre los principales departamentos.
DATOS
Créditos de vivienda de interés social. La Ley de Servicios Financieros define a la vivienda de interés social como aquella única vivienda sin fines comerciales, cuyo valor comercial o costo final de construcción (incluido el terreno) no supere UFV 400.000 si es un departamento o UFV 460.000 si se tata de una casa.
Casos en los que se aplica la tasa de interés social. Las tasas máximas establecidas en el Decreto Supremo 1842 se aplican para todos los créditos destinados a la adquisición de vivienda, construcción, mejoramiento, refacción y anticrético de vivienda, cuyo valor no exceda de UFV 400 mil.
TRÁMITES PARA EL CRÉDITO SUPERAN LOS $US 4.000
Una vez que la persona interesada ha calificado para acceder a un crédito de vivienda social, debe presentar más de 12 documentos y pagar el impuesto a la transferencia, que en este caso corresponde al 3 por ciento del total del inmueble. Si se accede a un crédito de 145.000 dólares deberá pagar unos 4.350 dólares.
A eso hay que añadir el pago al avalúa del inmueble, notarios y, algunas veces, tramitador. Además, debe avalar con un certificado su estado civil, sus aportes a las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), certificar que no tiene casa y certificado de su estado de salud, entre otros documentos.
En abril pasado, la Asociación de Bancos privados de Bolivia (Asoban) informó que el Fondo de Garantía de Vivienda de Interés Social (Fogavis), constituido por la banca nacional, cuenta con 23,9 millones de dólares provenientes de las utilidades netas de los bancos en las gestiones 2014 y 2016. De acuerdo con los lineamientos de funcionamiento del Fogavis, este monto permite garantizar en torno a 239 millones de dólares en créditos de vivienda social.
Créditos productivos
El Viceministerio de Pensiones informó, a su vez, que los créditos productivos crecieron 416 por ciento entre 2010 y mayo de 2018. Entre 2010 y 2013, se tenía un crecimiento anual de 19 por ciento en promedio, mientras que entre 2014 y mayo de 2018 se tiene un crecimiento anual del 29 por ciento en promedio.
ANÁLISIS
José Gabriel Espinoza. Analista económico
“No se está facilitando el crédito, sólo se lo hizo accesible para quienes ganan menos”
Cuando se accede al crédito de vivienda social, no es que se está facilitando el crédito, sino simplemente se lo está haciendo accesible para un segmento de ingresos más bajo de la población, pero no se está facilitando.
Lo que se ha hecho es limitar la tasa de interés al prestatario si la vivienda está en ciertos rangos de préstamos, pero los requisitos son exactamente los mismos. En ese sentido, no se ha generado ninguna diferencia.
Es posible que los riesgos hayan aumentado. El hecho de tener que cumplir las metas y los cupos ha obligado a los bancos a aceptar clientes bajo esas condiciones.
El Gobierno continuará manteniendo esa política, debido a que es un año electoral y estos créditos dinamizan la economía.
La ley de vivienda no tomó en cuenta las diferencias de precios en venta de las propiedades en diferentes regiones.
En las ciudades troncales los precios se han disparado, por lo que se limita en alguna medida el acceso a una vivienda de calidad. Tomado en cuenta los precios, las personas que quieren acceder a este beneficio acceden a uno de baja calidad.
Probablemente hace falta un buen ajuste en el préstamo de vivienda social. Sería bueno no sólo tomar en cuenta el monto, sino también la calidad de las viviendas en las principales ciudades del país.