Caos por incumplir normas
El incremento desmedido de los comerciantes, el crecimiento del parque vehicular y el incumplimiento a normativas municipales de los recorridos y paradas de las diferentes líneas de transporte hacen cada vez más caótico el tránsito en la ciudad, especialmente los días de feria.
“Los controles sólo son en las mañanas, después no hay nada, ni conos. Los domingos es más fuerte porque todos los comerciantes salen a vender tomando las calles y no hay nada de control”, afirmó un chofer de la línea LL que trabaja desde hace seis años, Beto Gutiérrez.
La pasada semana, el transporte federado y libre se enfrentó en cuatro oportunidades en las inmediaciones de la calle 25 de Mayo por la alteración de rutas, provocando destrozos en más de una decena de vehículos y causando que varios pasajeros paguen por su irresponsabilidad con golpes de piedra en sus cabezas.
Tras estos problemas, el jefe de Movilidad Urbana de la Alcaldía, Ever Rojas, dispuso desde el miércoles el control del cumplimiento de los recorridos de 120 líneas según la Ley Municipal 0111 con 35 guardias municipales en las calles, que resultaron insuficientes.
“La Guardia Municipal debe cumplir su rol para poner en orden el tráfico y vialidad, sino ¿cuál la finalidad de contratarlos? En Cochabamba esto ya es un tema insostenible”, afirmó el secretario ejecutivo de Buses y Colectivos, José Luis Cardozo.
Un conductor de la línea 136 afirmó que, siguiendo su recorrido sobre la calle Lanza y Calama hasta la calle Punata, tarda entre una hora y media a dos para salir del embotellamiento, que es más contundente los miércoles y sábados desde las 6:00 hasta horas de la noche.
Gutiérrez indicó que las líneas que vienen de otros municipios son las que generan el congestionamiento de las rutas porque salen cada minuto cuando el transporte de la ciudad tiene un tiempo de siete minutos para que un vehículo salga tras el otro.
Sin embargo, Los Tiempos corroboró en un recorrido por la calle Lanza, Honduras, Punata, San Martín, Esteban Arce, entre otras, que varios micros y trufis tienen paradas intermedias en las calles donde hay mayor congestionamiento vehicular sin que nadie controle aquello.
Además, se constató que personal de la guardia municipal de Movilidad Urbana de la Alcaldía, en vez de cumplir con su trabajo de control, organización y educación vial, observa sin hacer nada el congestionamiento vehicular, como ocurrió ayer a lo largo de la calle Punata.
Uno de los guardias en la zona contó que ellos permanecen de las 6:00 a 14:00 haciendo “educación vial” y poniendo conos en medio de las vías cerca de La Cancha, que muchas veces no se respetan.
Entre tanto, Cardozo indicó que el martes volverán a las calles a su vigilia hasta que la Alcaldía controle el recorrido de las diferentes líneas para evitar el embotellamiento.
Rojas indicó que, para el viernes, Movilidad Urbana convocará a una reunión del Comité de Transporte para tratar los conflictos suscitados esta semana. Cardozo señaló que no le llegó ninguna invitación, pero que “todos deben cumplir la norma”.
En Cercado existen 120 líneas de las que 109 son del transporte federado y 11 del libre. El 50 por ciento de ellas incumple el recorrido establecido por norma.