Alistan obras del tren; en el oriente esperan estudio
Las empresas JOCA (España) y Molinari Rail (Suiza), Asociación Tunari, comienzan hoy con los trabajos previos para la construcción del tren metropolitano de Cochabamba con una inversión de 447,6 millones de dólares del Tesoro General de la Nación.
Entretanto, el Ministerio de Obras Públicas esperará la conclusión de los estudios que realiza la Alcaldía de Santa Cruz para reiniciar el proyecto del tren urbano en la capital oriental por al menos 750 millones de dólares.
El coordinador del tren en Cochabamba, Ariel Torrico, informó que los trabajos comenzarán con el retiro de los rieles, durmientes y materiales. La Asociación Tunari tiene hasta diciembre para concluir el estudio a diseño final y podrá solicitar un anticipo del 20 por ciento para comenzar los trabajos.
El ministro de Obras, Milton Claros, afirmó que hoy comienza la construcción del primer tren eléctrico del país.
La obra se construirá con fondos públicos después de que el primer contrato suscrito con JOCA, en 2015, quedó suspendido, porque el crédito de 630 millones de dólares con bancos de Suiza y Alemania no se concretó.
El segundo contrato se adjudicó a JOCA y Molinari porque fueron las únicas que presentaron su propuesta en los seis días de plazo que dio el Ministerio.
Santa Cruz
La adjudicación del tren se declaró desierta en julio de 2016 debido a que las empresas excedieron el precio referencial de 750 millones de dólares y no presentaron “garantía de propuesta”.
El Ministerio retomará el proyecto una vez que la Alcaldía de Santa Cruz concluya su plan de movilidad urbana. “Estamos analizando, la Alcaldía nos ha pedido un tiempo, porque tiene un plan de movilidad urbana; una vez que tengamos los resultados de ese plan, porque han desconcentrado mercados, hay que rediseñar el proyecto”, informó el ministro Claros, según el portal del periódico La Razón Digital.
Mejoras técnicas
El presidente de la Asociación de Ingenieros Eméritos (Asieme), Ganzalo Maldonado, instó a mejorar la propuesta técnica para el tren metropolitano, sobre todo, ahora que se va a trabajar en placa en vía y a coordinar los trabajos con las alcaldías que son las que elaboran los planes de movilidad urbana.
De acuerdo con Maldonado, cada día se hacen 2 millones de viajes en la región metropolitana, el 85 por ciento en Cercado, Quillacollo y Sacaba. Explicó que si la capacidad del tren será de 700 mil pasajeros al día, no ayudará a resolver el problema del transporte en Cochabamba.
FIRMARÁN ACTA CON ANDINA
La Empresa Ferroviaria Andina (FCA), que tiene la concesión de la red vial de Cochabamba, prevé firmar hoy un acta de entendimiento con el Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda (Mopsv) para desafectar este tramo por la construcción del tren metropolitano de Cochabamba, informó la gerente de la concesionaria, Cinthia Aramayo.
Después se prevé emitir un Decreto Supremo para legalizar la desafectación. “El acta se firma para hacer las gestiones correspondientes para los trámites de desafectación. Todo lo que se está haciendo es legal”, dijo.
Los rieles, durmientes y el material que se retire de la red se quedarán como propiedad del Estado.
Con esta acta, la FCA también comenzará a desalojar la estación central, en San Antonio. Entretanto, el buscarril continuará operando hacia el cono sur, pero partirá de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), en la avenida Petrolera.
“Vamos a comenzar a desalojar a la gente de la estación de Cochabamba, no hay plazos fatales y nosotros estamos en ese trabajo. El Gobierno se ha comprometido a hacer el paradero para que salga el buscarril”, dijo Aramayo.
AUTORIDADES DEFIENDEN SU IDONEIDAD
JOCA cuestionada en su país triunfa en Bolivia
“De la ruina en España al éxito en Bolivia”. Así se titula un recuadro dentro del artículo sobre las obras de El Canal Isabel II, entre Majadahonda y Boadilla del Monte, que la empresa JOCA no ejecutó en 2011 por 1,5 millones de euros, publicado por El País en 2016 y que se puede consultar en el link: https://elpais.com/ccaa/2016/04/15/madrid/1460747628_961187.html.
La publicación relata que JOCA Ingeniería y Construcciones comenzó a funcionar en Badajoz en 1977. Se expandió por España y Portugal con éxito, pero su posterior aventura inmobiliaria la arrastró a la suspensión de pagos en 2012. Los acreedores terminaron perdonando a JOCA un 25 por ciento de la deuda y la reflotaron con nuevos accionistas.
En 2013, otra empresa terminó su tramo del anillo de distribución de agua en Boadilla y poco tiempo después comenzó su despegue internacional.
En 2015, JOCA ganó un contrato por 537 millones de dólares (costo global 630 millones de dólares) para participar en un proyecto de tren metropolitano en Cochabamba (Bolivia).
La misma publicación menciona las reservas que existen en Bolivia sobre la solvencia de la compañía, la poca transparencia al haberse adjudicado el contrato por invitación internacional —sin licitación— y su experiencia. Las autoridades defienden su idoneidad.
El 4 de agosto, JOCA S.A., parte del grupo del mismo nombre, no pudo terminar el colegio Averroes, en Arroyomolinos de España, por problemas económicos, y resolvió su contrato con la Comunidad de Madrid, según el portal Madridiario y disponible en https://www.madridiario.es/447168/resolvera-contrato-construccion-colegi....
El comunicador Carlos Valverde comentó en su programa en La Red: “No pudieron terminar un colegio en España y le da un contrato” para un tren en Bolivia. Los Tiempos no pudo contactar a JOCA.
Molinari Rail
La empresa Molinari Rail, la socia de JOCA en el tren de Cochabamba, es una compañía de tecnología Suiza.
Es administrada por sus propietarios con experiencia central en sistemas ferroviarios. Apoya a sus clientes en la realización de sus proyectos. Su personal trabaja en la fabricación de material rodante y subsistemas, además de sistemas ferroviarios o lo que llama el “tren del mañana”. Se puede consultar más en: http://www.molinari-rail.com/es/. Preliminarmente se conoce que el contrato fue firmado por JOCA con Domingo García y Gonzalo López, y por Molinari con Pablo Ponseca.